Portilla y Sancho, Braulio de la. Córdoba, 7.V.1888 – Marruecos, 27.VII.1909. Militar y caballero Laureado de San Fernando.
Fueron sus padres Leoncio de la Portilla y Cobián, general de división del Arma de Caballería, y Patrocinio Sancho Varela. Obtuvo plaza de alumno en la Academia de Infantería en el mes de agosto de 1904, siendo tres años después promovido al empleo de segundo teniente y destinado al Batallón de Cazadores de Llerena, en el que ascendió a primer teniente el 13 de julio de 1909, saliendo nueve días más tarde de Madrid rumbo a Melilla, donde desembarcó el día 25.
El 27 acudió su Batallón a Los Lavaderos, desde donde avanzó hacia las estribaciones del Gurugú, pero cayó herido gravemente en el Barranco del Lobo al frente de su compañía, no obstante lo cual continuó el avance, arengando a sus hombres y contribuyendo personalmente al ataque, batiéndose con un fusil que encontró sobre el terreno, perteneciente a un soldado muerto, dando un alto ejemplo de espíritu militar y abnegación, hasta ser nuevamente herido, y murió después sobre el campo de batalla a consecuencia de las heridas.
Su heroica actuación fue recompensada con el empleo de capitán por méritos de guerra, se le abrió juicio contradictorio para la Cruz de San Fernando de 2.ª Clase, Laureada, que le sería concedida por Real Orden de 3 de mayo de 1911. Por el mismo hecho fueron recompensados con igual Cruz el teniente coronel Tomás Palacio Rodríguez, los comandantes Ricardo Fresneda Calsamiglia y Eduardo López Nuño y Moreno, los capitanes Rafael Moreno de Guerra y Alonso, Ángel Melgar Mata y Enrique Navarro y Ramírez de Arellano, y el primer teniente Joaquín Tourné y Pérez Seoane.
Se encuentra enterrado en el Panteón de Héroes de Melilla. Su familia, en unión de las del comandante Fresneda y los capitanes Melgar y Moreno de Guerra, fallecidos en la misma acción, dedicaron al jefe del Batallón de las Navas una artística placa de plata repujada con los retratos de los héroes y la siguiente dedicatoria: “Al teniente coronel Bermúdez de Castro, que arrostrando peligros y responsabilidades recogió nuestros cadáveres del campo enemigo a los dos meses del sacrificio por España. Cumplen este deber de gratitud nuestras viudas y madres”.
El Ayuntamiento de Córdoba, en sesión de 7 de marzo de 1910, acordó dedicarle una calle con una lápida que se inauguró el 8 de diciembre de 1911, obra del escultor y capitán de Infantería Delgado Brackembury. Dicha lápida estaba rodeada por una guirnalda de laurel que forma el marco, y lleva en el ángulo superior izquierdo el escudo del Batallón de Llerena y en el izquierdo inferior la Cruz de San Fernando; la bandera del Llerena cruzaba la lápida, en la que se podía leer: “Calle del teniente La Portilla, muerto en Melilla el 27 de julio de 1909”.
Por iniciativa del comandante García Pérez, el Ayuntamiento de Córdoba acordó, en sesión de 23 de marzo de 1910, ceder para emplazamiento de un monumento los jardines de la Victoria, frente a los pabellones militares.
En el Parque del Oeste de Madrid, se le levantó un monumento, que se inauguró el 14 de diciembre de 1913, consistente en un pedestal de piedra blanca de planta cuadrangular, soportando el busto en bronce; sobre el pedestal, que ostentaba la Cruz de San Fernando, aparecía la siguiente leyenda: “Braulio de la Portilla Sancho, capitán de Llerena. Muerto en el Rif al frente de sus soldados el día XXVII-VII-MCMIX”.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. P-2577.
J. M. Gárate Córdoba (dir.), España en sus héroes: historia bélica del siglo xx, Madrid, Ornigraf, 1969; J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando.
Infantería, t. I, Madrid, Ministerio de Defensa, 2001.
José Luis Isabel Sánchez