Bassa de Girona, Pedro Nolasco. Villalonga (Tarragona), 1785 – Barcelona, 5.VIII.1835. Mariscal de campo y caballero laureado de San Fernando.
Estudiaba la carrera de Derecho cuando estalló la Guerra de la Independencia, abandonando sus estudios para combatir a los franceses, concediéndosele el empleo de teniente en el 2.º Tercio de Tarragona, con el que combatió en diversas acciones en Cataluña, encontrándose en septiembre de 1808 en la del puente de Molins del Rey y en octubre en la de San Cugat.
En enero de 1809 fue ascendido a capitán, luchando en el mes de febrero en Llacuna, San Magín, Santa Creus y Valls.
En 1810 resultó herido leve en la acción de Figueras, interviniendo al año siguiente en la defensa de Tarragona y cayendo prisionero de los franceses, siendo conducido a Francia, de donde consiguió huir y regresar a España, combatiendo seguidamente en Cervera, Bellpuig —donde volvió a caer herido leve— y Puigcerdá.
En 1812 fue ascendido a sargento mayor, luchando en ese mismo año en Vilaseca, Altafulla, Tolva, Pobla de Segur, Casa Massana y Centelles y en mayo de 1813 en La Bisbal, batalla en la que se batió contra fuerzas que triplicaba a las suyas, y a cuyo término el general en jefe le felicitó dándole un abrazo para que se lo transmitiese a los oficiales de su batallón, el Ligero de Cazadores de Cataluña, recibiendo él mismo como recompensa el empleo de teniente coronel.
Seguidamente se halló en las acciones de San Sadurní, Gracia y la librada en las inmediaciones de Barcelona.
En 1814, formando parte del Regimiento de don Carlos, penetró en Francia en persecución del derrotado ejército napoleónico.
Por sus destacadas intervenciones en la Guerra de la Independencia le fue concedida en 1815 la Cruz de San Fernando de 2.ª clase, Laureada. En los años siguientes estuvo destinado en los Regimientos del infante don Carlos y Guadalajara.
En 1821 se le encomendó el mando del 2.º Batallón de Córdoba. Al ser restablecido Fernando VII en el trono, continuó en el Ejército, confirmándosele en su empleo de coronel, con el que pasó a mandar el Regimiento de Gerona. En 1829, siendo brigadier, se le dio el mando del Regimiento de San Fernando. En el mes de diciembre de 1832 apresó al coronel Campos España, tras su fracasado intento de sublevación en Madrid.
Al año siguiente, cuando mandaba el Regimiento de la Princesa, fue ascendido a mariscal de campo, pasando a desempeñar el cargo de gobernador militar de Cádiz.
El 25 de julio de 1835 se produjo en Barcelona una grave insurrección, durante la que ardieron gran cantidad de conventos y muchos religiosos resultaron asesinados. El día 4 del mes siguiente se aproximó a la ciudad una columna enviada por el capitán general del Principado, general Llauder, y mandada por el mariscal de campo Bassa, quien, después de dejar la tropa acampada en Sans, se dirigió al edificio de capitanía, donde fue increpado por los alborotadores, que le exigían la dimisión. Al negarse a ello, penetraron al día siguiente en el edificio matándole de un disparo y arrojando posteriormente el cadáver por un balcón, tras lo cual lo arrastraron por las calles hasta echarlo a una hoguera que se formó en las Ramblas, al tiempo que derribaban la estatua de Fernando VII erigida por el conde de España.
Por Real Decreto de 6 de abril de 1848 se señaló a su viuda, Francisca Javiera de Saleta y Dezcallar, una pensión anual de veinte mil reales y, por Real Despacho de 18 de julio de 1853, Isabel II también le concedió el título de marqués de Monsolis por los méritos de su marido, merced en la que sucedió la hija de ambos, Concepción Bassa y Saleta.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), secc. 1.ª, leg. B-1048.
J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando. Infantería, t. I, Madrid, Ministerio de Defensa, 2001.
José Luis Isabel Sánchez
