Cavallero de Añasco, Antonio. Paraguay, p. t. s. xviii – 31.V.1792 post. Político.
Nació en las primeras décadas del siglo xviii y su adolescencia transcurrió en los turbulentos años de las revueltas comuneras. Él mismo cuenta quién es cuando dice: “yo Don Antonio Cavallero de Añasco, natural y vecino de esta ciudad de la Asunción del Paraguay, hijo legítimo del Sargento Mayor don Juan Cavallero de Añasco y de Doña Rosa González de Guzmán, difuntos, vecinos que así mismo fueron de esta ciudad”.
Fue regidor decano o regidor perpetuo y se le nombra con el tratamiento de “ilustre señor veinte y cuatro”, sobre todo en los documentos referentes a la fundación de Villa Real de Concepción.
Actuación importante le cupo en la “re pública”, y en “regimientos”, en el período de recuperación del Paraguay en los últimos lustros del siglo xviii, dentro del período de las “reformas borbónicas”.
Sus más remotos antepasados en el Paraguay fueron los tenientes generales de gobernación, Juan Cavallero de Baçan, llegado en 1583 a la Asunción, en donde casó con María Sierra Prieto; y por otra rama, Antonio de Añasco, natural de Sevilla.
Fue diputado por el cabildo asunceño junto al gobernador Agustín Fernando de Pinedo para la fundación de Villa Real de Concepción, la cual se verificó el 25 de mayo de 1773 en el lugar elegido por Cavallero de Añasco cuya firma ratificó el Acta. Sobre este hecho histórico hay un informe de él escrito al cabildo, el cual hoy sirve de fuente de investigación.
Asimismo formó en 1788 un libro de Intervención de Cuentas del Ramo de la Guerra de la Ciudad de la Asunción.
La historiadora alemana H. von Kügger afirma que con él la familia Cavallero de Añasco llegó a ejercer en forma ininterrumpida por más de cien años el regimiento perpetuo de la Asunción. Fue la voluntad paraguaya puesta al servicio de los intereses de su provincia.
Casó en primeras nupcias con Bartola de Acosta Freire y en segundas con María Petrona Fernández de la Mora, en ambas hubo sucesión. Sus cincos hijos vivos menos el último fueron próceres firmantes del Acta de la Independencia (1811). En su descendencia están el presidente de la República general Bernardino Caballero y otros políticos, como Pedro P. Caballero, del Congreso Nacional; el científico Ricardo Caballero Ponce de León; Pedro Antonio Caballero, convencional republicano y el padre José Domingo Molas, primer sacerdote paraguayo en tierras de misión (Tailandia) y quien salvó de la destrucción una ciudad italiana en la gran guerra y en donde tiene un monumento.
Antonio Cavallero de Añasco otorgó testamento el 31 de mayo de 1792 y falleció poco después.
Fuentes y bibl.: Archivo Nacional de Asunción, v. 759 n.º 2.
J. Aguirre, Diario, Buenos Aires, Biblioteca Nacional, 1949; R. Quevedo, La fundación de Villa Real, Asunción, Academia Paraguaya de la Historia, 1973; H. V. Kügger, El Cabildo de Asunción, estructura y función del cabildo colonial, Colonia, 1996; P. Alvarenga Cavallero, Don Antonio Cavallero de Añasco, Cofundador de Villa Real, Asunción, Academia Paraguaya de la Historia, 2003.
Pedro Antonio Alvarenga Caballero
