Mesa, Martín Alonso de. Sevilla, c. 1573 – Lima (Perú), 1626. Escultor y ensamblador.
Este artista debió de formarse a finales del siglo XVI con alguno de los buenos maestros hispalenses.
Su primer trabajo conocido es de 1595. Se conoce su aspecto físico: “buen cuerpo, barba rubia, los ojos azules, con una señal de herida en el dedo segundo de la mano izquierda”. Tras unos años de ejercicio profesional en Sevilla solicitó que se le expidiese el título de escultor en 1599. A partir de entonces debió de viajar rumbo al Nuevo Mundo, hasta el virreinato del Perú, en cuya capital aparece en 1602. Estuvo casado con la sevillana Petronila de Salazar y tuvieron varios hijos, el mayor —Pedro de Mesa— continuó con el arte del padre y terminó emigrando a Cuzco. Vivió en la plazuela del hospital de San Diego. Parece que no llegó a firmar testamento y consta que perteneció a la cofradía de la Virgen del Rosario (la de los españoles) en el Convento de Santo Domingo de Lima, y como hermano veinticuatro se le enterró en su capilla. Sin duda fue el escultor y ensamblador de retablos más importante de su época en la ciudad, realizando todos los grandes encargos del momento. Incluso, en un gesto de orgullo profesional, con ocasión de un pleito, llegó a afirmar “como se sabe en este reino no hay persona en el que me haga ventaja en la dicha arte de escultura”. Dirigió un numeroso taller donde aparecen discípulos y colaboradores como Pedro de Avilés, el mestizo Sebastián de Sande, Pedro de la Cueva, Juan Gutiérrez Coronado, el esclavo mulato Juan Simón y su hijo Pedro, entre otros. A lo largo de los años parece que tendió a realizar en los encargos de retablos la parte escultórica y subcontratar los trabajos de arquitectura en madera. De su etapa sevillana se conserva la Virgen de la Oliva en Vejer de la Frontera (Cádiz); y de su amplia obra limeña no han perdurado los numerosos retablos, pero sí algunas esculturas. Su estilo puede situarse en conceptos escultóricos renacentistas con ciertas novedades compositivas y formales que apuntan al Barroco.
Hay que destacar en su haber el diseño de la sillería de coro de la Catedral de Lima, que aún se conserva, aunque por enconados pleitos contra otros artistas murió sin realizarla.
Obras de ~: Virgen de la Oliva, Vejer de la Frontera, 1595- 1596; Retablo para iglesia de Santiago de Surco, 1602; Escultura de la Inmaculada para la catedral, 1604; Retablo para la iglesia de Ate, 1607; Retablo de Nuestra Señora de Gracia del Convento de San Agustín, 1608; Retablo mayor de la parroquia de San Sebastián, 1609; Retablo mayor de San Agustín, 1611; Retablo para la capilla de los plateros en San Agustín, 1611; Dos retablos para la Merced, 1612; Retablo mayor de la Encarnación, 1612; Monumento pascual de la catedral en colaboración con Juan Martínez de Arrona, 1613; Esculturas para el retablo mayor del noviciado de la Compañía, 1615; Arco triunfal para el virrey príncipe de Esquilache, 1615; Retablo mayor del Monasterio de la Trinidad, 1615; Retablo mayor de la parroquia de San Marcelo, 1616; Retablo para la Universidad de San Marcos, 1616; Reformas en la cajonería de la catedral, 1618; Retablo mayor de la Concepción del que se conservan relieves como el de la Anunciación y la Visitación, 1618; Retablo de la Inmaculada en San Francisco, 1620; Retablo de la capilla de Santa Mónica en San Agustín, 1621; Retablo de la iglesia de Magdalena, 1621; Custodia para Pisco, 1621; Escultura funeraria del arzobispo Lobo Guerrero, 1622; Diseño de la sillería coral catedralicia, 1623; Escultura de San Juan Evangelista para la catedral, 1623; Retablo para la iglesia de la Vera Cruz, 1625.
Bibl.: J. Gestoso y Pérez, Ensayo de un diccionario de los artífices que florecieron en Sevilla desde el siglo XIII al XVIII, t. III, Sevilla, 1900, pág. 150; E. Harth-Terré, Escultores españoles en el Virreinato del Perú, Lima, Editorial Juan Mejía Baca, 1977, págs. 118-132; G. Lohmann Villena, “Noticias inéditas para ilustrar la Historia de las Bellas Artes en Lima durante los siglos XVI y XVII”, en Revista Histórica, XIII y XIV (1940 y 1941), págs. 17-18 y págs. 361-362, respect.; A. San Cristóbal, “Martín Alonso de Mesa y Juan García Salguero en el retablo mayor de la Concepción”, en Revista del Archivo General de la Nación, 17 (1998), págs. 91-130; R. Ramos Sosa, “Martín Alonso de Mesa, escultor y ensamblador”, en Anales del Museo de América, 8 (2000), págs. 45-63; “Una escultura de Martín Alonso de Mesa, el San Juan Evangelista de la Catedral de Lima (1623) y otras noticias”, en Histórica, XVII-1 (2003), págs. 181-206.
Rafael Ramos Sosa