Ortiz, Tomás. Dueñas (Palencia), c. 1668 – Manila (Islas Filipinas), 16.VII.1742. Agustino (OSA), provincial en Filipinas y misionero en China.
Ingresó en el Convento agustiniano que la provincia de Castilla tenía en la ciudad de Valladolid y allí hizo su profesión solemne en 1687.
Dos años más tarde se alistó en la Misión colectada por el padre Álvaro de Benavente con rumbo a las misiones orientales, llegando a Manila el 27 de julio de 1690. En el Convento de San Agustín terminó su carrera eclesiástica en 1692 y con el título de lector de Teología Moral impartió clases hasta el capítulo celebrado en 1695, en que fue designado para el cargo de secretario provincial.
Como la burocracia no llenaba sus aspiraciones, presentó la renuncia en 1696 para cruzar el Mar de China y evangelizar en las misiones que la Orden tenía en el Imperio Celeste. Se aplicó en el aprendizaje de la lengua y de su pluma salió en 1710 unCompendio de la doctrina cristiana o catecismo, de estilo fácil y sencillo, que desde un principio fue adoptado por los misioneros, contando con muchas ediciones hasta mediados del siglo xix. Levantó una veintena de templos y animó otras tantas comunidades cristianas. Pero fueron aquellos años difíciles, en los que se debatían temas como la sujeción de los regulares a la jurisdicción de los vicarios apostólicos, ajenos al Patronato Regio, o la de los ritos chinos y la obediencia al delegado apostólico monseñor Tournon. Como vicario provincial de las misiones agustinianas tuvo que afrontar la situación: por lo que se refiere a la primera, se erigió en defensor de los privilegios de exención de los religiosos mendicantes.
En cuanto a las praxes sínicas, optó por someterse al dictamen que la Santa Sede emitió por medio de su representante cardenalicio, pero mostrándose como ángel de paz entre los misioneros divididos lastimosamente en dos bandos por la funesta cuestión de los ritos chinos. Al no aceptar el pia’o o licencia imperial, fue desterrado a Cantón y luego a Filipinas.
El mismo año de su regreso al archipiélago magallánico fue nombrado prior del Convento de San Agustín de Manila (1713), peldaño desde el que ascendió al provincialato en 1716 por unanimidad de votos, distinguiéndose durante su trienio por la discreción y dulzura con que supo captarse el aplauso y el cariño de sus súbditos. Fue, además, prior del Convento de Guadalupe (1719-1742), examinador de Teología Moral para los religiosos de las provincias de Tagalos y Pampanga y definidor provincial (1728-1731). No abandonó su afición a las letras y en 1731 publicó la Práctica del ministerio que fue considerada como el texto oficial para todo cuanto se relacionase con la administración espiritual de las parroquias y misiones de los agustinos en las islas. Y en 1740 vio la luz el Arte y reglas de la Lengua Tagala, importante contribución en el campo de la gramática filipina.
Pleno de días y méritos, murió el día 16 de julio de 1742 en el Convento de San Agustín de Manila, siendo inhumados sus restos al día siguiente en el presbiterio de la iglesia.
Obras de ~: Práctica del ministerio, qve sigven los religiosos del Orden de N. P. S. Avgvstín, en Philippinas, Manila, 1731; Arte y reglas de la Lengva Tagala, Sampaloc, 1740; Cathecismong quinallamnan nang manga pangad yi, at maicling casaysayan sa Christianong Aral. En que se contienen las Oraciones y breve Explicación de la Doctrina Cristiana, Sampaloc, 1740; Cheng kiao t’sie iáo [Explicación de la doctrina cristiana], Shanghai, 1842.
Bibl.: G. Cano, Catálogo de los Religiosos de N. P. S. Agustín de la Provincia del Smo. Nombre de Jesús de Filipinas desde su establecimiento en estas Islas hasta nuestros días, con algunos datos biográficos de los mismos, Manila, Imprenta de Ralmirez y Giraudier, 1864, pág. 102; E. Jorde, Catálogo bio-bibliográfico de los religiosos agustinos de la Provincia del Santísimo Nombre de Jesús de las Islas Filipinas desde su fundación hasta nuestros días, Manila, Est. Tipográfico del Colegio de Santo Tomás, 1901, págs. 167-173; T. López, Monastici Augustiniani, III, Valladolid, 1916, págs. 66-68; G. de Santiago Vela, Ensayo de una biblioteca Ibero-Americana de la Orden de San Agustín, VI, Madrid, Imprenta Asilo de Huérfanos del Sagrado Corazón de Jesús, 1922, págs. 179-199; A. M.ª de Castro, Misioneros agustinos del Extremo Oriente, 1565-1780 (Osario Venerable), ed. M. Merino, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1954, págs. 293-296; M. Merino, Agustinos evangelizadores de Filipinas (1565-1965), Madrid, Ediciones Archivo Agustiniano, 1965, pág. 38; T. Aparicio, “Ortiz, Thomas”, en M. Viller (dir.), Dictionnaire de Spiritualité, XI, Paris, Beauchesne, 1982, cols. 1001-1002; I. Rodríguez y J. Álvarez, Historia de la Provincia Agustiniana del Smo. Nombre de Jesús de Filipinas: China-Japón, vol. V, Valladolid, Estudio Agustiniano, 1993, págs. 353-363; I. Rodríguez y J. Álvarez, Al servicio del evangelio. Provincia Agustiniana del Santísimo Nombre de Jesús de Filipinas, Valladolid, Estudio Agustiniano, 1996, págs. 251-252.
Jesús Álvarez Fernández, OSA
