Tagle y Portocarrero, José Bernardo de. Marqués de Torre Tagle (IV), marqués de Trujillo (I). Lima (Perú), 21.III.1779 – Callao (Perú), 26.IX.1825. Militar, prócer de la independencia.
Hijo de Manuel de Tagle e Isasaga, III marqués de Torre Tagle, y de Josefa Portocarrero y Zamudio, a los diez años Tagle ingresó como cadete en el Regimiento de Dragones de Milicias Provinciales de Lima y al año siguiente, es decir en 1790, se incorporó a este mismo regimiento como portaguión.
Años después, en 1800, se casó con Juana García de la Plata, hija de un oidor de la Audiencia de Lima, pero, lamentablemente, esta mujer adolecía del mal de la tisis, por lo que Torre Tagle proyectó viajar a Europa para tratar de curarla. En el trayecto del viaje, el recrudecimiento de la enfermedad los obligó a desembarcar en Buenos Aires, regresando a Lima, donde ella falleció en 1811 a la edad de treinta años.
A la muerte de su padre en 1801, José Bernardo de Tagle heredó el título de marqués de Torre Tagle y el cargo de comisario de Guerra y Marina de Callao.
En 1811 fue ascendido a sargento mayor y al año siguiente pasó a formar parte del recientemente creado Regimiento de Voluntarios Distinguidos de la Concordia Española del Perú. En esta institución, Torre Tagle hizo una gran labor financiando parte de la organización, debido a lo cual se le ascendió a teniente coronel y poco después a coronel el 3 de diciembre de 1812.
Fue elegido alcalde de Lima, ejerciendo este cargo entre 1811 y 1812. Fue en este tiempo que Torre Tagle se vinculó con un grupo de nobles limeños liberales, como José de la Riva Agüero y Sánchez Boquete y el conde la Vega del Ren, que pugnaban por reformas en la administración del virreinato. Es por este motivo que el virrey Abascal, con el objetivo de alejarlo del Perú, propició su elección como diputado por Lima a las Cortes de Cádiz el 29 de marzo de 1813.
De esta manera viajó a España y en la Asamblea gaditana fue claro en manifestar que había que apoyar la independencia de América. Durante su estancia en la Península Ibérica, le envío una petición al Rey en la que le pedía ser nombrado intendente de Tarma o de Trujillo. El Monarca hispano sólo accedió a nombrarlo intendente de La Paz, por lo que Torre Tagle permaneció en Madrid unos años más.
En 1815 fue investido con la Orden de Santiago, y ese mismo año fue ascendido a brigadier de Infantería.
Permaneció en Madrid hasta 1817, cuando se trasladó a Sevilla, y justo al año siguiente se embarcó para regresar a América. Llegó al Perú en julio de 1819 para ocupar el cargo de intendente de La Paz, pero el virrey de entonces, Joaquín de la Pezuela, le negó la posibilidad de ejercer sus funciones ya que en ese puesto se encontraba un amigo suyo llamado Juan Sánchez. Por ello, Pezuela lo llamó para que fuera su edecán y posteriormente aceptó ser nombrado intendente interino de Lima tras la muerte del titular. Paralelamente, en diciembre de 1819 Torre Tagle volvió a contraer matrimonio, esta vez con Mariana Echevarría Santiago de Ulloa, quien le acompañaría hasta sus últimos días.
En 1820 el virrey accedió a otorgarle la Intendencia de Trujillo, comenzando a ejercer sus funciones el 25 de agosto de ese año. Así se inició la etapa de mayor trascendencia en la vida de Torre Tagle, al vincularse de una manera más comprometida y directa en el proceso independentista. Después de llegar al Perú en septiembre de 1820, el general San Martín se puso en contacto con Torre Tagle iniciando una correspondencia en noviembre de este año. Así, el norte del país fue la primera región que se vinculó al proceso de independencia gracias a la labor de personas como Torre Tagle, quien proclamó la independencia en Trujillo el 29 de diciembre de 1820. Además, se encargó de conseguir financiamiento y recursos para la Expedición Libertadora de San Martín, al mismo tiempo que difundía en el norte la causa de la independencia y organizaba cuerpos de milicias para la guerra que se aproximaba.
Llegó a Lima en agosto de 1821, asumiendo la Inspección General de los Guardias Cívicos y poco después el Comando de la Legión Peruana. También fue designado por San Martín consejero de Estado e incorporado a la recién creada Orden del Sol como miembro fundador, llegando a ser nombrado vicepresidente del Gran Consejo de ésta en enero de 1822.
En diciembre de 1821 se le ascendió a mariscal de campo, y en enero del año siguiente recibió el título de marqués de Trujillo de parte de San Martín; encargándole éste el mando del Poder Ejecutivo como delegado supremo, tras su viaje a Guayaquil para entrevistarse con Bolívar.
Entre enero y agosto de 1822, Torre Tagle ejerció el mando de la nación haciendo frente a diversos asuntos, como el motín de julio, que finalizó con la deposición y destierro del ministro Bernardo de Monteagudo.
Tras la salida de San Martín, quiso irse del país; pero el Congreso Constituyente le negó esa posibilidad arguyendo que su presencia era necesaria para la patria. De esta manera, cuando en febrero de 1823 la Junta Gubernativa del país cesó en sus funciones, fue llamado para que se hiciera cargo del Estado; sin embargo esto no se concretó, ya que el Ejército impuso a José de la Riva Agüero como presidente.
En los meses siguientes Torre Tagle siguió con su cargo de inspector general de Cívicos, hasta que en junio de 1823 el general Sucre, que recibió el encargo del Congreso de comandar la lucha contra los españoles, lo llamó nuevamente para que se encargara del gobierno del país mientras se continuaba con la guerra.
De esta forma, tras la promulgación de la Constitución de 1823, Torre Tagle fue nombrado presidente constitucional, encargándose de mantener el orden interno, para lo cual tomó diversas medidas para neutralizar los levantamientos de jefes militares como Riva Agüero. Torre Tagle cesó en sus funciones en febrero de 1824, cuando el Congreso le otorgó poderes dictatoriales a Bolívar. Poco tiempo después, Torre Tagle se retiró a un monasterio, pues temía ser arrestado por Bolívar, con el que tuvo muchas diferencias, en momentos en que los españoles ocuparon la ciudad. El marqués decidió presentarse como prisionero ante el general realista Monet, pero éste le reconoció el grado que tuvo en el Ejército español y le ofreció una guardia personal además del mando de la ciudad. Torre Tagle no aceptó y se retiró con su familia a los Castillos del Callao, donde vivió recluido y, siendo sitiado por las tropas independentistas, falleció víctima del escorbuto el 26 de septiembre de 1825.
Obras de ~: Narración que hace don José Bernardo Tagle de sus servicios a la causa de América, Lima, Imprenta del Gobierno, 18--; Manifiesto del Marqués de Torre Tagle sobre algunos sucesos notables de su gobierno, Lima, 1824.
Bibl.: M. de Mendiburu, “Don José Bernardo de Tagle y Portocarrero”, en Revista Histórica (Lima), XXV (1960-1961), págs. 103-126; J. Ortiz de Zevallos, Trujillo y Torre Tagle, Lima, 1964; “José Bernardo de Tagle y Portocarrero (1779- 1825)”, en Grandes Forjadores del Perú, Bogotá, Lexus, 2001, págs. 383-384; A. Tauro del Pino, “José Bernardo de Tagle y Portocarrero, marqués de Torre Tagle”, en Enciclopedia Ilustrada del Perú, vol. 16, Lima, PEISA, 2001, págs. 2579-2580.
Emilio Candela Jiménez