Ladrón de Guevara y Percaz, Antonio. ?, p. m. s. XVIII – ?, f. s. XVIII. Coronel e ingeniero en jefe.
Era nombrado ingeniero delineador el 19 de octubre de 1754 y el 3 de noviembre de 1767 ascendía a capitán. A finales de 1768 se le comisionaba desde Melilla (a donde había sido destinado para iniciar las obras de la muralla de la plaza) para dirigir las obras de fortificación de Cartagena, acompañado del delineante Ignacio Imperial Digueri. En 1769, después de realizar levantamientos, emitía un informe denominado, Declaración sobre la Plaza de Cartagena.
Melilla fue uno de los sitios donde se llevó a cabo con más claridad la “Guerra de Minas” (acciones de minado y contraminado), ciudad a la que puso sitio el sultán de Marruecos, desde diciembre de 1774 hasta mayo del siguiente año, momento en el que levantaría el bloqueo a causa de la efectividad de las contraminas españolas dirigidas por D. Antonio Ladrón de Guevara, comandante de Ingenieros de la plaza. Estas contraminas fueron tan eficaces que no solamente neutralizaron las minas de los moros, sino que, además, “el principal freno para haber contenido su designio ha sido el insoportable progreso de nuestras minas, con el cual operaban tan tímidos que no se consideraban seguros en ataques, trincheras, ni aún en baterías […]”.
En 1778, Guevara era ingeniero ordinario, destinado en Indias, en la zona de Cuba y Santo Domingo. En esta última isla realizaba un plano de la plaza del río Jaima, y sus fortificaciones de campaña, además del plano topográfico de las inmediaciones de dicha plaza. Santo Domingo únicamente albergaba dos miembros del cuerpo: Álvarez Barba, con el rango de ingeniero jefe, y el ingeniero ordinario, Antonio Ladrón de Guevara y Percaz.
El 21 de septiembre de 1783 realizaba el proyecto de un almacén de explosivos para seiscientos quintales de pólvora, situado a una legua de la ciudad de Santo Domingo y en la otra banda del río. En este caso, proponía un almacén con su cerca, totalmente separado de lo que sería el cuerpo de guardia y las cocinas. Añadía al proyecto un informe y un presupuesto. En ese mismo año, el 10 de noviembre, firmaba un Plano de las baterías en las playas de Hayna distantes dos leguas y media de la Plaza de Santo Domingo, capital de la Ysla Española.
En noviembre de 1785, Guevara firmaba el Plano de las montañas de Baoruco, que, en el partido de la Villa de Neyba sirve de abrigo a los esclavos desertores de España y Francia en esta Ysla Española de Barlovento.
En Santo Domingo, el Hospital de San Nicolás de Bari, uno de los edificios más importantes de Santo Domingo, estaba en ruina. Después de varios proyectos, el plano definitivo es del año 1786, firmado por Ladrón de Guevara. Dibujado en color, fue remitido por el arzobispo acompañado de un informe. Aún realizaba otro plano del hospital y edificios anejos, también remitido en 1786, incluyendo el cementerio y la iglesia de San Nicolás.
Vuelto a la Metrópoli, el 24 de enero de 1789, siendo coronel, era destinado como ingeniero en jefe a la plaza de Orán, con residencia en Valencia. El 19 de marzo del mismo año presentaba un Plano y perfiles de una torre para dos cañones de a ocho que se propone executar en la Ysla Plana o Nueva Tabarca, fuera de la Plaza de San Pablo para el resguardo y defensa de las playas y costa de la parte del…de dicha Ysla, en virtud de R.O. de 5 de octubre de 1785. El citado plano iba acompañado de un documento denominado, Cálculo prudencial del importe a que se considera podrá ascender la constitución de la torre que se propone executar en la Ysla Plana o Nueva Tabarca.
En octubre de 1790 pasaba a la situación de retirado.
Fuentes y bibl.: H. Capel et al., Los Ingenieros Militares en España. Siglo XVIII. Repertorio biográfico e inventario de su labor científica y espacial, Barcelona, Publicaciones y ediciones de la Universidad de Barcelona, 1983; A. Bravo Nieto, Ingenieros Militares en Melilla. Teoría y práctica de Fortificación durante la Edad Moderna. Siglos XVI al XVIII, Melilla, Servicio de Publicaciones de UNED de Melilla, 1991; M. G. Cano Révora, Cádiz y el Real Cuerpo de Ingenieros Militares (1697-1847). Utilidad y Firmeza, Cádiz, Servicio de Publicaciones de la Universidad de Cádiz, 1994; G. Jori, “El Ingeniero Militar Antonio Álvarez Barba y su proyecto de construcción de una casa para alojamiento de la Marina y de una nueva población en la Bahía de Ocoa (1771)”, en Revista Bibliográfica de Geografía y Ciencias Sociales (Serie documental de Geo Crítica), XII, 710 (10 de marzo de 2007); G. M. Viñuales Conicet, “Almacén de pólvora del Cusco”, en Atrio Revista de Historia del Arte, 10, 11 (2005), págs. 57-64; C. Laorden Ramos, Obra Civil en Ultramar del Real Cuerpo de Ingenieros, Madrid, Ministerio de Defensa, 2008, 2 vols.; J. Carrillo de Albornoz y Galbeño, “La edad de Oro de la Fortificación Abaluartada en España y Ultramar, Los ingenieros militares en la historia de España. III Centenario de la creación del Arma de Ingenieros”, en Revista de Historia Militar, I, núm. extraordinario (2012), págs. 33-97; J. A. Martínez López, “Cartagena Ilustrada. La nueva fortificación urbana a través de las colecciones cartográficas de los Ingenieros Militares”, en P+C, proyecto y ciudad. Revista de temas de arquitectura, 6 (2015), págs. 33-50.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
