Ayuda

Manuel de Flórez Carrió

Biografía

Flórez Carrió, Manuel de. Marqués de Hinojosa (X), Marqués de Diezma (IX). Cádiz, 16.IV.1857 – Madrid, 10.VII.1920. Marino y político.

A edad muy temprana, en 1873, ingresó como aspirante en la Escuela Naval, obteniendo los nombramientos de guardia marina de 2.ª clase dos años después y el de 1.ª clase en 1878. Una vez finalizada su formación, pasó a servir en la Armada española, ascendiendo consecutivamente a los empleos de alférez de navío (1879), teniente de navío (1885), teniente de navío de 1.ª clase (1887), capitán de fragata (1908), capitán de navío (1912) y contraalmirante (enero de 1917); estuvo embarcado en una treintena de buques, asumiendo el mando de varios cañoneros, torpederos, del crucero Emperador Carlos V y del acorazado España, ocupando al mismo tiempo que este último mando el cargo de Jefe de Estado Mayor de la Escuadra, y navegó por los mares de Europa, Asia, África y América. Además, de 1875 a 1878 participó en la Guerra de los Diez Años de Cuba (1868-1878) y de 1911 a 1912 en la campaña del Rif, en ambas de forma destacada, recibiendo por ello diversas distinciones.

Pero aquellos no fueron los únicos puestos que desempeñó durante las casi cinco décadas que sirvió en la Armada, pues en tierra ejerció los de ayudante de la Mayoría General del Departamento de Cartagena, auxiliar de la Dirección del Personal del Ministerio de Marina, secretario del subsecretario de Marina, jefe del 3.er negociado de la Subsecretaría de Marina, jefe del 4.º negociado de la Dirección del Personal, jefe del 3.er negociado de la Subdirección de Asuntos Generales, jefe del 1.er negociado de la Sección de Personal del Estado Mayor Central, jefe del 1.er negociado de la Sección de Material del Estado Mayor Central, secretario del Estado Mayor Central y jefe de la 1.ª sección del mismo.

Casó con Josefa María Martínez de Victoria y Nestares, X marquesa de la Hinojosa y IX marquesa de Diezma, que como consorte usó Flórez a partir de 1915 en que sucedió en estas mercedes su esposa.

Pese a no participar activamente en la vida pública, por su tendencia conservadora y experiencia en el Ministerio de Marina, el 11 de junio de 1917 fue designado para ocupar la referida cartera ministerial del gabinete presidido por Eduardo Dato, coincidiendo con un momento de enorme inestabilidad política caracterizada por la crisis de los partidos dinásticos y la sucesión de gobiernos efímeros. Dato se vio obligado a hacer frente a una serie de graves problemas políticos, económicos y sociales, como la situación de neutralidad de España en la Primera Guerra Mundial, el triunfo de la Revolución Rusa, las presiones separatistas del regionalismo catalán, el aplastamiento militar de la huelga general de Barcelona de agosto y el pulso al poder civil de las Juntas Militares. Todos ellos, junto a la división interna del propio Partido Conservador y la falta de apoyo en unas Cortes hostiles, precipitaron su dimisión a principios de noviembre de aquel mismo año.

Flórez se marchó con Dato, reincorporándose en enero de 1918 a la Armada, siendo designado general jefe de la 2.ª división de la Escuadra de Instrucción, puesto que debió abandonar en mayo de 1919 al recibir un permiso de cuatro meses por enfermedad, aunque antes de finalizar esta baja regresó a la política activa, siendo nombrado por Real Decreto de 1 de junio de 1919 senador vitalicio.

Su vuelta a la vida pública coincidió con un agravamiento de la crisis del sistema canovista, al mantenerse divididos los conservadores y liberales, mientras las izquierdas se negaban a colaborar en la gobernabilidad del país. Este panorama acrecentó la debilidad parlamentaria del entonces presidente del Consejo de Ministros Antonio Maura, que se vio obligado a dimitir, formándose el 20 de julio de 1919 un gabinete encabezado por el conservador Joaquín Sánchez de Toca e integrado exclusivamente por datistas, ocupando de nuevo Flórez la cartera de Marina. Sin embargo, la presión de las Juntas Militares que amenazaban con un golpe de estado, unida a la reactivación de la conflictividad social en Barcelona, precipitaron la salida de Sánchez de Toca, siendo sustituido el 12 de diciembre de 1919 por el maurista Manuel Allendesalazar, quien organizó un gabinete de concentración nacional con representantes de las cinco facciones principales de los partidos dinásticos, continuando el marqués de Hinojosa como ministro de Marina.

No obstante, al no existir en las Cortes una corriente política con una mayoría clara, las controversias con el gobierno fueron continuas, en especial a la hora de aprobar los presupuestos generales, afectando una de ellas directamente al de Marina, pues la comisión del Congreso de los Diputados encargada de su revisión modificó la partida referida a la organización de la escala de tierra, aumentando el número de jefes y oficiales, y sus graduaciones, chocando de lleno con las ideas de Flórez, quien consideró que ese incremento era demasiado elevado y defendió la preferencia presupuestaria de los servicios en el mar con más fondos para personal, barcos y material, por lo que propuso la anulación del dictamen de la comisión a través de un proyecto de ley, siendo respaldado por el Consejo de Ministros. Pero la aprobación de la referida normativa suponía el ascenso inmediato de los tenientes generales comandantes de apostadero a almirantes, lo que conllevaba el suyo propio, por lo que presentó su dimisión como ministro el 17 de marzo de 1920, al no querer firmarla porque sería un acto de nepotismo consigo mismo, honrosa actitud que le fue reconocida por la prensa y las cámaras parlamentarias.

Tras su marcha del gobierno, permaneció desempeñando su escaño en el Senado, que compaginó con el cargo de vocal del Consejo Directivo de la Caja Central de Crédito Marítimo, siendo designado a principios de junio de 1920 consejero de Estado. Pero ni siquiera pudo tomar posesión al fallecer repentinamente poco más de un mes después, recibiendo como recompensa por sus significativos servicios al Estado el nombramiento de vicealmirante de la Armada.

Estuvo condecorado con las cruces blanca de 1.ª Clase del Mérito Naval, dos blancas de 2.ª Clase del Mérito Naval, roja de 2.ª Clase del Mérito Militar y roja de 3.ª Clase del Mérito Naval pensionada (1912), Cruz y Placa de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo, la Legión de Honor de Francia, las Medallas de Alfonso XIII y de la Campaña de Melilla y las grandes Cruces del Mérito Naval (1917), de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo (1918) y de la Orden del Mérito Militar (1920).

 

Fuentes y bibl.: Archivo Histórico del Senado, exps. personales, HIS-0224-04.

J. M. Cuenca y S. Miranda, El poder y sus hombres ¿Por quiénes hemos sido gobernados los españoles? (1705-1998), Madrid, Actas, 1998, págs. 522-525; J. R. Urquijo Goitia, Gobiernos y ministros españoles (1808-2000), Madrid, CSIC, 2001, pág. 214; M. C. Hall, Alfonso XIII y el ocaso de la monarquía liberal 1902- 1923, Madrid, Alianza Editorial, 2005, págs. 207-264.

 

Francisco Miguel Espino Jiménez