Spínola, Ambrosio. Génova (Italia), p. m. s. XVI – Madrid, III.1615. Banquero y asentista, diputado del Medio General de 1598.
Ambrosio era hijo de Francisco Spínola. Se sabe que tuvo al menos cinco hermanos: Luis, el mayor de todos; Pablo; Agustín, que se casó con Magdalena Centurión; Francisco, y Vicencio. Agustín sirvió también al Rey de España con diversos asientos de dinero.
Ambrosio contrajo matrimonio con Aurelia Doria, hermana de Jerónimo Doria, su socio en muchas operaciones financieras. Su mujer murió antes que él y fue enterrada provisionalmente en una casa profesa de los jesuitas en Valladolid. En su testamento, Ambrosio pidió a sus albaceas que tanto su cuerpo como el de su mujer fuesen llevados a Génova y enterrados en el monasterio de las carmelitas descalzas que había fundado su cuñada, Magdalena Centurión. El matrimonio tuvo en total seis hijos, tres de ellos varones. Dos de sus hijas se casaron antes de morir su padre: Blanca, convertida en condesa, y Verónica. Magdalena acabó estableciéndose en Génova. El hijo mayor de Ambrosio y, por tanto, heredero de su mayorazgo, fue Agustín Spínola, esposo más tarde de María de Bañuelos. Sus hermanos fueron Francisco, caballero de la orden de Alcántara, y Nicolás.
Ambrosio Spínola fue un importante banquero de los reyes Felipe II y Felipe III, pero casi siempre se le ha confundido con su compatriota, el famoso marqués de los Balbases, con quien no guardaba ningún parentesco directo. Tampoco su hermano Agustín fue el que fundó el famoso banco que abrió sucursales en régimen de monopolio en Madrid y Sevilla desde 1605.
Ambrosio colaboró con la Corona con dos tipos de asientos, siguiendo los pasos de su hermano Agustín.
Los de dinero, proveyendo fondos en Flandes, y los de galeras. Se comprometió a sostener cuatro galeras en la escuadra de Génova, siendo él mismo el propietario de las embarcaciones. Para este servicio contó con la colaboración de Lucian Centurión y de su hermano Agustín Spínola. Entre sus asientos de dinero destaca el de 1590 por el que ofreció 2.500.000 escudos en Flandes en un solo contrato.
Residió habitualmente en Madrid, y en Valladolid mientras fue temporalmente la Corte del Rey de España.
En los asientos que firmó en esta última ciudad cedió participaciones a Lázaro Spínola, con quien terminó pleiteando en los tribunales por discrepancias en la liquidación de esas cuentas. Algunos de sus socios fueron Jerónimo Doria y el banco de Juan Francisco Galetto. En Génova también trabajó con Pablo Doria, en las ferias con Juan Jácome y Domingo Doria, en Sevilla con Juan Bautista Ponzón, en Madrid con Juan Jorge Passero y en Valladolid con Francisco Crema, citando sólo algunos de sus contactos más destacados. Su cajero y empleado de mayor confianza desde 1596 fue Juan de Yrastrosa.
Ambrosio fue también uno de los diputados del Medio General de 1598, y antes de morir nombró como sustituto a Juan Jorge Passero para que atendiese sus negocios pendientes. Dados los múltiples pleitos y litigios que tuvo al final de su vida, desde 1609 contrató como abogado a Baltasar Álamo de Barrientos, abonándole 1000 ducados anuales.
Ambrosio murió en marzo de 1615. Sus albaceas fueron su cuñado y socio, Jerónimo Doria, y sus hijos, Agustín y Francisco Spínola. Su hijo Agustín, además de heredar su mayorazgo, continuó junto a su tío Jerónimo con el asiento de galeras.
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Nacional, Consejos, 4418; Archivo Histórico de Protocolos Notariales de Madrid, Protocolos 1367, 1379, 1380, 5517, 5457 Archivio di Stato di Genova, Notai Antichi, 5336.
A. Domínguez Ortiz, Política y Hacienda de Felipe IV, Madrid, Edit. de Derecho Financiero, 1960, pág. 87; F. Ruiz Martín, “Las Finanzas españolas durante el reinado de Felipe II”, en Cuadernos de Historia. Anexos de la revista Hispania 2, Madrid, CSIC, (1968), págs. 165 y 168; M. Ulloa, La Hacienda Real de Castilla en el reinado de Felipe II, Madrid, Fundación Universitaria Española, Seminario Cisneros, 1977, págs. 568 y 811-813; V. Vázquez de Prada, “Gliuomini d´affari e i loro rapporti con la Corona spagnola nelle Fiandra (1567-1597)”, en A. Maddalena y H. Kellenbenz, (eds.), La Repubblica internazionale del denaro tra XV e XVII secolo, Bologna, Il Mulino, 1984, págs. 262, 263 y 272; I. Pulido, La Real Hacienda de Felipe III, Huelva, Artes Gráficas Andaluzas, 1996, pág. 165; J. E. Gelabert, La bolsa del rey. Rey, reino y fisco en Castilla (1598-1648), Barcelona, Crítica, 1997, pág. 23; C. Álvarez Nogal, “Las compañías bancarias genovesas en Madrid a comienzos del siglo XVII”, en Hispania LXV/1, n.º 219, 2005, pág. 71.
Carlos Álvarez Nogal