Ayuda

Antonio Lizárraga Esquiróz

Biografía

Lizárraga Esquiroz, Antonio. Marqués de Zugarramurdi (I). Pamplona (Navarra), 22.I.1817 – Roma (Italia), 7.XII.1877. General carlista.

En la Primera Guerra Carlista se presentó a Zumalacárregui como soldado voluntario el 27 de diciembre de 1833. Sobre todo actuó en Navarra. Así, intervino en el desarme de los liberales del valle de Aézcoa, y en la toma de Orbaiceta, donde fue nombrado cabo 2.º. En 1834 ascendió a cabo 1.º por la acción de Gulina (18 de junio), y a sargento 2.º por la de Artaza (31 de julio), siendo herido en ambas. El 13 de enero de 1835 fue nombrado sargento 1.º. Durante este año tuvo una gran actividad, participando en el sitio de Maeztu, en las acciones de Arquijas y Larraga, el bloqueo de Ciga, la toma de Echarri-Aranaz, las acciones de Arróniz y Villafranca, y el sitio de Bilbao. Fue nombrado subteniente o alférez el 2 de septiembre de 1835. En 1836 estuvo a las órdenes del general Francisco García, y tomó parte en las operaciones de Puente la Reina, Larrasoaña, borda del crucero de Cilbeti, Arróniz y Allo (Navarra). En 1837 participó en la expedición real de don Carlos (V), ascendió a teniente de Infantería en la batalla de Huesca (24 de mayo), e intervino en las batallas de Barbastro y Guisona (Oristá), donde fue herido, actuando en agosto en la toma de Torrecilla. De nuevo en Navarra, en 1838 luchó en Carrascal, Allo, Dicastillo, Biurrun, Arróniz y Belascoain. Fuera de ella, en 1839 operó en Ramales, Guardamino, Arratia y Villarreal (Álava).

Tras el Convenio de Vergara (31 de agosto de 1839) siguió de teniente en el Ejército.

De 1840 a 1842 fue destinado al Bajo Aragón y Cataluña.

Luego participó en el pronunciamiento contra Espartero en Tarragona (1843) y operó contra los liberales radicales, por lo que ascendió a capitán con destino en Madrid. Años después, en 1847-1848 actuó contra los carlistas en Cataluña y el Maestrazgo.

En abril de 1854 pasó a Sevilla y, cuando la revolución de julio, fue ascendido a comandante, destinado al Regimiento de Asturias en octubre y a Málaga en 1855. Participó con un Tercio de Voluntarios Vascongados en la Guerra de Marruecos (1859-1860). En 1861 ascendió a comandante con cuartel en Madrid.

En enero de 1866 se enfrentó a las tropas sublevadas de Prim, y el 22 de junio a las tropas de Serrano en las calles de Madrid, obteniendo el empleo de teniente coronel. En octubre fue destinado a Murcia y luego a Madrid. En agosto de 1867 fue a sofocar la revolución en Lérida y Tarragona. Con ocasión de la Septembrina, sirvió al conde de Cheste, capitán general de Cataluña, a quien luego acompañó a Francia. No obstante, en 1868 el nuevo Gobierno le ascendió a coronel con destino en su Pamplona natal (23 de octubre).

Tras solicitar licencia absoluta del Ejército, ingresó en el ejército carlista de Carlos VII. Entre 1840 y 1868 recibió tres condecoraciones Tomó parte en el alzamiento carlista fallido en la primavera de 1872, y actuó en Navarra a las órdenes del general Carasa. Fue miembro de la Junta Militar Vasco-Navarra de Bayona, disuelta el 14 de agosto de 1872 por don Carlos (VII). Acompañó a este último de regreso a Francia tras el convenio de Amorebieta, firmado por los carlistas vizcaínos. Ascendido a brigadier por el general carlista Dorregaray en 1873, y con el cargo de comandante general de Guipúzcoa (1873-1874), el 6 de enero de 1873 regresó a España.

El 16 de enero inició el levantamiento en Guipúzcoa, organizó el batallón de Cazadores de Azpeitia, y el día 29 atacó esta villa. Luchó en Amézqueta (12 de abril) y Abalcisqueta (13 de abril). Participó en las victorias de Erául (5 de mayo) y Udabe (26 de junio), y después luchó en Azpeitia y Lecumberri. Recibió a Carlos (VII) cuando entró en España por Arizcun el 16 de julio, a quien acompañó en la toma de Ibero.

El 15 de agosto de 1873, tras apoderarse de Mondragón y Vergara, destruyó en esta villa, simbólica y públicamente, el documento del Convenio de Vergara.

En quince días redujo a diez el total de treinta y siete reductos armados que los liberales tenían en Guipúzcoa.

A continuación bloqueó Tolosa (29 de septiembre) y participó en la batalla de Velabieta (11 de diciembre).

Tuvo desavenencias con el cura Santa Cruz por la forma de hacer la guerra, pues éste le tachaba de irresoluto y de querer anular su partida, llegando a sofocar esta insubordinación el 7 de diciembre de 1873. Por dominar casi completamente Guipúzcoa, en 1874 fue ascendido a mariscal de campo, recibiendo la Gran Cruz del Mérito Militar. También se debe a él la creación de la maestranza y fundición de Azpeitia. A comienzos de 1874, Dorregaray le nombró comandante general de Aragón. No obstante, se presentó en Vizcaya para las batallas de Somorrostro (25 de febrero) y San Pedro de Abanto (25 a 27 de marzo), con el batallón de Almogávares del Pilar y un escuadrón. Tomó parte del cuarto sitio de Bilbao del 22 de enero al 2 de mayo. A mediados de junio de 1874 fue nombrado jefe de Estado Mayor General del ejército del Centro y Cataluña. El 27 de junio entró en Cataluña, se repartió el mando militar con Tristany por indicación del marqués de Valdespina, y el 4 de agosto asistió al ataque de Teruel. Del 6 de diciembre de 1874 hasta el 17 de enero de 1875 fue nombrado interinamente capitán general del ejército real del Centro. Como tal extendió la influencia de las armas carlistas, perdió Cantavieja, y entregó el mando a Dorregaray en enero de 1875, pasando luego a Cataluña a las órdenes de Savalls. El 16 de julio don Carlos (VII) le nombró marqués de Zugarramurdi.

Dirigió la heroica defensa de la plaza de Seo de Urgel desde el 22 de julio, rindiéndola a Martínez Campos el 26 de agosto tras una prolongada resistencia, realizada con una gran inferioridad de elementos. Fue hecho prisionero, llevado a Madrid y canjeado. Luego regresó al ejército del Norte. El 3 de diciembre de 1875 declaraba como testigo en la causa formada a Dorregaray. Ya en Navarra, se le encomendó la defensa de Estella y ascendió a teniente general. El 17 de febrero de 1876 participó en el Consejo de Generales en Beasaín, convocado por don Carlos, y el día 23 tomó posesión como jefe del Estado Mayor General del ejército real del Norte, realizando las últimas operaciones militares.

Al finalizar la guerra y desde Valcarlos, el 27 de febrero pidió hospitalidad al Gobierno francés para don Carlos, a quien acompañó el día 28 a Francia. Tras la guerra, y a raíz de la Junta creada en Londres el 30 de marzo de 1876, fue uno de los once generales a los que don Carlos encargó combatir al régimen alfonsino, aunque éste suprimiese dicha Junta desde París en septiembre. Emigró a Roma, viviendo en la pobreza de un asilo hasta fallecer. Fue emprendedor y disciplinado, muy querido, y un católico ejemplar.

 

Bibl.: R. Brea (seud. B. de Artagan), Cruzados modernos, Barcelona, La Bandera Regional, s. f., págs. 137-141; Victorias de Carlos VII y de Cruzados modernos. Años 1873 y 1874. Odisea Republicana, Valencia, s. f., págs. 91-110 y 169-215; J. Botella Carbonell, La guerra civil en España de 1872 a 1876 [...], t. I, Barcelona, Librería de Juan Oliveres, 1876; F. Hernando, Recuerdos de la guerra civil. La Campaña Carlista (1872-1876), París, Jouby y Roger, 1877; F. de P. Oller (seud. D. F. de P. O.), Album de personajes carlistas con sus biografías, t. II, Barcelona, La Propaganda Catalana, 1888, págs. 158-165; A. Pirala (...), vols. II y III, Anales desde 1843 hasta el fallecimiento de don Alfonso XII, Madrid, Felipe González Rojas, 1895 y 1907, respect.; Bibliotec a Popular Carlista, Barcelona, Imprenta La Hormiga de Oro, t. IX (marzo de 1896), págs. 29 y 72; t. XIV (agosto de 1896), págs. 52-57; t. XVI (octubre de 1896), págs. 67-72; t. XVII (noviembre de 1896), págs. 62- 67; t. XVIII (diciembre de 1896), págs. 39 y 66-69; t. XXVI (agosto de 1897), págs. 69-75; t. XXX (diciembre de 1897), págs. 71-78; A. Brea, Campaña del Norte de 1873 a 1876, Barcelona, Biblioteca Popular Carlista, 1897, págs. 16, 48-53, 74-87, 94, 104, 107, 149-153 y 513; M. Polo y Peyrolón, Autógrafos de Don Carlos [...], Valencia, Tipografía Moderna, 1900, pág. 186; E. Echave-Sustaeta, El Partido Carlista y los Fueros [...], Pamplona, Imprenta El Pensamiento Navarro, 1915, págs. 209-210 y 254-256; J. Olazábal Ramery, El Cura Santa Cruz, guerrillero, Vitoria, Imprenta Montepío Diocesano, 1928, págs. 117 y 120-612; El Pensamiento Navarro (Pamplona), n.º 12.533 (9 de mayo de 1938), y n.º 12.663 (9 de octubre de 1938); R. Oyarzun, Historia del carlismo, Madrid, Editora Nacional, 1944, págs. 297-317, 323-329, 355-358, 379-384, 389-392 y 425-428; J. Ibarra, Biografías de los ilustres navarros del siglo xix y parte del xx, vol. IV, Pamplona, Imprenta Jesús García, 1953, págs. 218-222; J. del Burgo, Bibliografía de las guerras carlistas [...], vol. II, Pamplona, Gómez y D. F. de N., 1954, pág. 615; M. Ferrer, Historia del Tradicionalismo Español, t. XXVII, Sevilla, Editorial Católica Española, 1959, págs. 184-189, 194-204 y 252-257; t. XXVIII, vol. I, pág. 10; t. XXVIII, vol. II, pág. 256; J. Larrayoz Zarranz, Dorregaray, el general enigmático (Historia de un sumario), Pamplona, Aranzadi, 1978, págs. 32-33, 37, 79- 80, 177-189 y 302-303; X. Azurmendi, El cura Santa Cruz, Bilbao, Idatz Ekintza, 1986; J. del Burgo, en Gran Enciclopedia Navarra, vol. VII, Pamplona, CAN, 1990, págs. 90-91; Historia General de Navarra, vol. III, Madrid, Rialp, 1992, págs. 751-754 y 764; Carlos VII y su tiempo, Pamplona, Gobierno de Navarra, 1994, págs. 227, 235-236, 241, 252, 257 y 285; VV. AA., Gran Enciclopedia de España, vol. XII, Barcelona, Enciclopedia de España, 1998, pág. 5807; E. Roldán González, Estado Mayor General Carlista en las tres guerras del siglo xix, Madrid, Actas, 1998, págs. 163-164.

 

José Fermín Garralda Arizcun