Ayuda

Josefa Durán y Ortega

Biografía

Durán Ortega, Josefa. Pepita de Oliva, la estrella de Andalucía, Condesa de West. Málaga, 1830 – Arcachón (Francia), 6.III.1872. Bailarina.

Oficialmente hija de Pedro Durán y de Catalina Ortega, aunque corrían rumores de que fue hija ilegítima de Francisco de Borja Téllez-Girón y Pimentel, X duque de Osuna. La familia vivía en Madrid en la calle de la Encomienda número 15, en condiciones muy humildes. Catalina Ortega, hija de un gitano que hacía sandalias en Málaga, había trabajado en un circo, y cuando nació Pepita se dedicaba a la venta de ropa vieja. Pedro Durán era un barbero de la calle del Puente. Además de Pepita tuvieron también a un niño, Diego, que marchó de soldado a Cuba. Catalina Ortega enviudó y comenzó a vivir con el zapatero Manuel López.

Como Pepita manifestaba dotes de bailarina, su madre la llevó al Teatro del Príncipe y pidió a su director, Antonio Ruiz, que organizase lecciones particulares para que la niña pudiese ingresar en el cuerpo de baile del teatro. Se designó a Pérez como maestro, pero no encontró en Pepita la calidad necesaria para poner en marcha un contrato. Quizá sea ésta la explicación de que Pepita no forme parte de la nómina de bailarinas boleras de la época, pues parece que en el escenario representaba una tradición del baile más popular y socialmente más baja.

No fue una bailarina de gran calidad para las exigencias españolas, quizá sí para el gusto europeo.

Así lo pensó Manuel Guerrero, director del Teatro Real, cuando ella, ya bailarina consagrada en Europa, le pidió un contrato para bailar en el Príncipe y éste no la ayudó.

Después de Pérez, el bailarín Juan Antonio Gabriel de la Oliva se encargó de las clases de Pepita. Había bailado en Madrid y en La Coruña y en aquel momento estaba contratado en el Teatro Español.

Oliva y Pepita contrajeron matrimonio en Madrid, en la Iglesia de San Millán, el 10 de enero de 1851. A los pocos meses el matrimonio se separó parece que por culpa de Catalina, quien años después intentó sin éxito que el matrimonio se reconciliara e incluso, cuando Oliva le resultó incomodo, no tuvo ningún reparo en encargar a su hijo Diego que lo asesinara, cosa que no hizo.

El primer contrato de Pepita fue para bailar en el Gran Teatro de Burdeos con gran éxito, de ahí pasó a Copenhague, donde bailó La Farsa Pepita. Bailó también en Viena; en Londres debutó en el Her Majesty’s Theatre el 22 de mayo de 1852 con la Madrileña, la Aragonesa y el Jaleo de Jerez; bailó en el intermedio de la ópera de Guecco La prova d’un Opera seria.

Tras su gran éxito en Londres; debutó en el Théâtre de Vaudeville de París en julio de 1852; donde fue presentada al público como la prémière danseuse du théâtre royale des princes à Madrid, dato falso. Su actuación causó furor y “desapareció literalmente bajo una lluvia de flores y fue aclamada por toda la sala que aplaudió con verdadero fervor”. En agosto añadió a su repertorio el olé y la asistencia a sus actuaciones superó a las de la primera bailarina de la Ópera de París de la época.

Fue ese año de 1852 cuando conoció en París a Lionel Sackville-West (Middlesex, 1827 – Knole, 1908), quinto hijo del quinto conde de la Warr, que pertenecía al cuerpo diplomático y era agregado de embajada en Sttutgart. Pepita vivía en el Hôtel de Bade y él fue a visitarla. Mantuvieron una relación que duró toda su vida. Sackville-West le consiguió un contrato para bailar en Sttutgart, donde fue muy aplaudida; también bailó con éxito en Fráncfort y en Berlín en el Frederick William Theatre; el público alemán la obligó a que se soltara la melena en el escenario porque no se creían que no fuera falso. Allí se hizo famosa y ganó mucho dinero, tanto que mantenía a toda su familia en España.

Actuó también en Viena, donde conoció a Petra Cámara. Josef Strauss le dedicó una polca, Pepita Polka, que se estrenó el 1 de agosto de 1853 en el Sperl. Su extraordinario éxito hizo que la bailarina vienesa Marie Geistinger copiase su estilo, se la llamó La falsa Pepita.

Corrieron muchos rumores sobre sus aventuras amorosas con destacados miembros de la aristocracia alemana. Fue amante del príncipe de Youssoupoff con el que vivió en Múnich.

En un viaje para ver a su familia recaló en Madrid; Rafael Guerrero le enseñó la manola en el Hotel Peninsular, donde residía.

Su primer hijo con Sackville-West, Maximiliano de la Oliva, nació en Granada el 20 de mayo de 1858; poco tiempo después Pepita se reunió con Lionel en Alemania, donde comenzaron a llevar una vida más doméstica en sus casas de Heidelberg y Hackenfeldt; se trasladaron después a Turín porque Lionel había sido nombrado secretario en la legación inglesa. El 23 de septiembre de 1862 nació en París su segunda hija, Victoria de Sackville-West, que contrajo matrimonio con su primo, el tercer barón de Sackville-West.

Destinaron a Lionel a Madrid y Pepita se quedó en Burdeos con sus dos hijos. Allí nació la tercera niña, Elisa Catalina en 1865; después de ese nacimiento Pepita renunció a su carrera de bailarina y se retiró a Arcachon y a su casa de París en la 200, Avenue d’Eylau. Se intituló condesa West. Tuvo todavía a Fleur de Marie, Amalia Albertina y Ernest Henri Jean Baptiste de Sackville-West. Murió en el parto en 1872.

Su vida fue contada en Pepita, de su nieta Vita Sackville- West. El relato está basado en hechos reales diligentemente recogidos por un abogado inglés al que se envió a Madrid para demostrar si realmente Pepita se había casado con Sackville-West. En aquellos tiempos el problema de la ilegitimidad de los hijos era vital para resolver cuestiones de herencia y, en este caso, la sucesión en un título inglés.

 

Bibl.: F. Cuenca, Teatro andaluz contemporáneo, La Habana, Mazo, Caso y Compañía, 1937; E. Pirchan, Marie Geistinger: Die Königin de Operette, Viena, Verlag Wilhelm Frick, 1947; V. Sackville-West, Pepita, Barcelona, Tusquets, 1989; J. Valera, Cartas a su mujer, Córdoba, Diputación Provincial, 1989; V. Sackville-West, Pepita, Barcelona, Tusquets, 1989; J. Valera, Cartas a Estébanez Calderón (1824-1905), Gijón, Libros del Pexe, 1996; C. Alvar, Historia de los espectáculos en España, Madrid, Castalia, 1999; G. Steingress, Y Carmen se fue a París: un estudio de la constitución artística del género flamenco 1833-1865, Córdoba, Editorial Almuzara, 2006.

 

Covadonga de Quintana Bermúdez de la Puente

Relación con otros personajes del DBE

Biografías que citan a este personaje

Personajes citados en esta biografía

Personajes similares