Hernández Orgaz, Simón. Móstoles, 28.X.1743 – 18.XII.1818. Alcalde.
Fueron sus padres Fernando Hernández y María Orgaz. Simón Hernández dedicó toda su vida a las labores del campo, labrando sus tierras, unas propias por herencia y otras arrendadas.
El primero de enero de 1808, reunido el concejo de la villa de Móstoles en la Ermita de Nuestra Señora de los Santos para renovar los cargos municipales, Simón Hernández Orgaz, de sesenta y cuatro años de edad, fue elegido alcalde de la villa por el Estado General. Por su parte, Andrés Torrejón, de setenta y dos años, fue elegido —en calidad de depósito, esto es, con carácter interino— alcalde ordinario de Móstoles por el Estado Noble, pese a ser labrador pechero, pues los hijosdalgo habían rechazado ser insaculados.
Cinco meses después de su elección, el 2 de mayo de 1808, ambos firmaron el bando y proclama de alerta sobre la toma de Madrid por las tropas napoleónicas, que llamaba al auxilio de la capital por parte de los pueblos a lo largo del Camino Real de Extremadura, que unía Madrid con Badajoz. El parte era, pues, un “aviso [...] a las provincias del mediodía” (Toreno, ed. de 2008: 961).
Según narración del conde de Toreno en sus principales líneas, parece que todo fue iniciativa de Esteban Fernández de León y de Juan Pérez Villamil. A primera hora de la mañana del 2 de mayo —“a las diez y tres cuartos” (N. Pérez Jiménez, 1908: 159)—, Fernández de León salió de Madrid huyendo de los sangrientos sucesos que se sucedían. En Móstoles, se encontró con Juan Pérez Villamil, secretario del Almirantazgo y fiscal togado del Consejo de Guerra entonces —lo era desde septiembre de 1798—, que el día anterior había celebrado en su casa de Móstoles (en la calle Navalcarnero) su cincuenta y cuatro cumpleaños. Muñoz Maldonado dice, en cambio, que Villamil estaba accidentalmente en una casa de campo recuperando su salud; casa que legó a su muerte a la Universidad de Oviedo para crear una cátedra de “Vera Religione”.
Escuchada de Fernández de León la narración de los hechos, Pérez Villamil decidió convocar el pleno del ayuntamiento y a toda la población y dictó el texto del oficio al escribano Manuel de Valle Llano. Este texto parecía haberse perdido; historiadores como Muñoz Maldonado, Lafuente o el conde de Toreno defendieron distintas versiones del texto, algunas de las cuales pudieran más bien responder a un posible bando más breve —para mayor entendimiento y destinado a ser colocado en los caminos y lugares de reunión— que pudo redactarse también ese mismo día 2 de mayo.
Coincidiendo con el primer centenario del conflicto, en 1908 el cura párroco halló en el Archivo Parroquial de Cumbres de San Bartolomé (Huelva) una versión del texto hoy custodiada en el Archivo Municipal con el número 27 del “Inventario adicional”. Era el único ejemplar o copia salvada de cuantas circularon cien años antes por todo el mediodía español.
Pero fue en 1940 cuando Antonio Rumeu de Armas dio a conocer el documento definitivo hallado en el Archivo Municipal de Talavera de la Reina, ciudad a la que a últimas horas de la noche del día 2 de mayo de 1808 llegó el postillón andaluz, Pedro Serrano, en su afán de difundir copias del documento de Móstoles. El hallazgo de Rumeu es un oficio dirigido al corregidor y justicia mayor de Talavera, José Galilea, y enviado desde Móstoles por el propio Manuel de Valle con fecha de 13 de octubre de 1808. En él se solicita copia del texto original, pues no se quedó con una “por la celeridad y su pronto despacho”, y queda descrito lo que Rumeu denomina el “parte verdadero” (Rumeu de Armas, 1940: 11).
Simón Hernández se había casado en 1771 con Isabel María Martín, natural de Getafe, y tuvo al menos tres hijos: Pedro, Antonio y Luciana.
En 1814, tras la supresión del ayuntamiento constitucional y el regreso del absolutismo, Simón Hernández repitió en el cargo de alcalde ordinario.
Hizo testamento el 11 de junio de 1812, ante el escribano real de Madrid Juan Antonio de Mata y falleció seis años después, el 18 de diciembre de 1818, siendo enterrado en el cementerio –hoy desaparecido– anejo a la iglesia parroquial.
Bibl.: J. Muñoz y Maldonado, Conde de Fabraquer, Historia política y militar de la Guerra de la Independencia de España contra Napoleón Bonaparte desde 1808 a 1814, t. I, Madrid, Palacios, 1833, pág. 148; Conde de Toreno, José María Queipo de Llano Ruiz de Saravia, Historia del levantamiento, guerra y revolución de España, Madrid, Tomas Jordán, 1835-1837, 5 vols. (ed. con est. prelim, de Richard Hocquellet, Madrid, Urgoiti Editores, 2008); J. Pérez de Guzmán, El Dos de Mayo de 1808 en Madrid. Relación histórica documentada, Madrid, Tip. Sucesores de Rivadeneyra, 1908, pág. 480; J. Ocaña Prados, Apuntes para la historia de la villa de Móstoles, Madrid, Emilio Minuesa de los Ríos, 1908; N. Pérez Jiménez, “El bando del Alcalde de Móstoles y D. Esteban Fernández de León” (Continuación de la serie “Los extremeños de tierra de Serena en la Guerra de la Independencia”), en Revista de Extremadura. Ciencia y arte (Cáceres), núm. CVI (abril de 1908), págs. 155-163; A. Rumeu de Armas, El bando de los alcaldes de Móstoles (Nueva aportación documental), Toledo, Tall. Gráficos Rafael Gómez- Menor, 1940; J. Vega y R. Ezquerra, “Torrejón, Andrés”, en G. Bleiberg (dir.), Diccionario de Historia de España, vol. III, Madrid, Alianza, 1981, págs. 791-792; A. Peris Barrio, Móstoles: de pequeña aldea a ciudad populosa, Madrid, Caja de Madrid, 1990; F. Andújar Castillo, Consejo y consejeros de Guerra en el siglo XVIII, Granada, Universidad, 1996, pág. 252; D. Martín del Hoyo y J. Rodríguez Morales, El bando de los alcaldes de Móstoles del Dos de Mayo de 1808 y su influencia en el comienzo de la Guerra de la Independencia (http://www.centotredicesimo.org/wp-content/uploads/2015/11/BANDO-DEL-2-MAYO-DE-1808-libre.pdf).
Diccionario Biográfico Español