Velarde Gil de Lamadrid, Cristina Ana María. Santander (Cantabria), 9.IV.1925 – Galapagar (Madrid), 9.III.2021. Fundadora del Instituto religioso Hijas de Santa María del Corazón de Jesús.
Nació un Jueves Santo en el seno de una familia acomodada y profundamente religiosa. Era la menor de los cuatro hijos de Prudencia Gil de Lamadrid y de Calixto Velarde. Recibió el bautismo el 20 de abril en la iglesia de San Francisco; la confirmación de la mano de José Eguino y Trecu, conocido como el obispo bueno, en la iglesia de Santa Lucía, el 17 de marzo de 1930; y el 21 de mayo de 1933, día de la Ascensión, recibió la Eucaristía por primera vez en la parroquia de Santiago de Madrid.
Durante la Guerra Civil Española, vivió en Madrid; pasó la adolescencia y juventud en Barcelona, donde estudió el bachillerato y la carrera de Filosofía y Letras, sección de Historia. Obtuvo Premio Extraordinario de licenciatura en junio de 1951. Entonces, cuando le sonreía un futuro brillante en la sociedad, ante la sorpresa de sus compañeros y amigos, lo dejó todo para entregarse a Dios a los veintiséis años de edad.
Ingresó el 26 de octubre de 1951 en el noviciado de la Congregación de Hijas de Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús, de Sant Cugat del Vallés. Se trataba de una fundación muy reciente y muy pobre, en la que tampoco existían miras apostólicas inmediatas para poder ejercer su carrera universitaria; pero el alma de la maestra de novicias, la madre María del Carmen Altimiras (1898-1991), la cautivó por su espíritu de fe, su sencillez y su entusiasmo. Al ingresar en la Comunidad tomó el nombre de hermana María de Jesús. Por su especial visión de futuro, pronto pasó a convertirse en el principal apoyo de la madre María del Carmen, bajo cuya dirección fundó la primera obra apostólica, el Colegio El Pinar de Nuestra Señora en Valldoreix. En 1954 era ya directora de este centro docente y responsable de la comunidad.
El ideario educativo que la madre María de Jesús escribió para El Pinar, cuyo objetivo fundamental era dar una formación integral, armónica y coherente con la personalidad de sus alumnos, basada en el humanismo cristiano y en las normas definidas por el magisterio de la Iglesia católica, es el que ha pervivido tanto en los centros de enseñanza como en las fundaciones apostólicas de la Congregación. Es autora también de la letra y la música de numerosos cánticos usados en las celebraciones litúrgicas.
En 1960 las fundaciones de España fueron erigidas como viceprovincia y en 1972 como provincia, y la madre María de Jesús fue nombrada superiora provincial.
De 1981 a 1987 fue primera consejera general en Roma, y después volvió a ser elegida superiora provincial en España. En el Año Santo de 1983 fundó el movimiento DOYMAR (Discípulos Orantes y Mariano- Apostólicos de la Redención), en respuesta a la llamada de Juan Pablo II a la juventud, se ha extendido también en América.
En sus visitas como primera consejera a las distintas provincias de la Congregación, pudo observar el enorme cambio que se estaba produciendo en la interpretación del carisma primigenio —que tiene como fundamento una vida de oración contemplativa centrada en el Corazón de Jesús y en la Eucaristía, con María como madre y maestra para mejor manifestar en la misión apostólica el amor misericordioso de Dios revelado en Cristo—, el cual se conservaba con la inquebrantable fidelidad en la provincia de España, enriquecido con la espiritualidad de la mística española y la doctrina de Juan Pablo II sobre la vida consagrada. De 1993 a 1998, con especial insistencia, pidió a la Santa Sede que la provincia española fuese constituida como nuevo instituto nacido del carisma del padre Julio Chevalier (1824-1907) y de la madre María Luisa Hartzer (1837-1908), fundador y cofundadora de las Hijas de Nuestra Señora del Sagrado Corazón, de Issouden (Francia). El 8 de septiembre de 1998 la Iglesia reconoció el nuevo Instituto de Derecho Pontificio de Hijas de Santa María del Corazón de Jesús, y el 4 de octubre del mismo año María de Jesús fue elegida madre general, que, como fundadora, redactó las Constituciones del Instituto, aprobadas por la Santa Sede el 25 de diciembre de 1998. Ella fue también la fundadora de la treintena de comunidades apostólicas (docentes, pastorales, misioneras y asistenciales) que tiene el Instituto en España, Perú, Guatemala, El Salvador, México y Roma.
Obras de ~: Estatutos de la Provincia “Sancta Maria Cordis Iesu”, Madrid, Cipsa, 1997; Constituciones del Instituto Hijas de Santa María del Corazón de Jesús, Madrid, Cipsa, 1999; “Yo aposté mi vida por un Rey condenado a muerte”, en Alfa y Omega (Madrid), 7 (1994); “Cómo pasar de 22 monjas a 425 en 40 años”, en La Razón, 4 de febrero de 2004; Cartas dirigidas a las Hermanas del Instituto (en prensa).
Bibl.: “Velarde Gil de Lamadrid”, en VV. AA., Gran Enciclopedia de Cantabria, t. XI, anexo 3, Santander, Cantabria, 2002.
Marina Escanilla Lorenzo
