Ochoa Urdangarín, Jerónimo. Goñi (Navarra), 28.II.1904 – Talavera de la Reina (Toledo), 25.VII.1936. Religioso de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OH), beato.
Era hijo del matrimonio formado por Francisco Ochoa Zubillaga e Ignacia Urdangarín Marticorena. Fue bautizado el mismo día de su nacimiento, por el sacerdote José María Sagués, abad de la parroquia de San Ciriaco. Recibió el sacramento de la Confirmación de manos del obispo de Pamplona, fray José López Mendoza, el 25 de octubre de 1905. Era hermano de fray Auspicio y primo de fray José de Calasanz Gorostieta, ambos fueron superiores provinciales de la Orden Hospitalaria. Siendo todavía muy niño, sus padres cambiaron de residencia, estableciéndose en el pueblo de Larumbre, en donde asistió a la escuela local y se vinculó mucho a la vida parroquial, participando en las Cofradías de la Santa Infancia y del Rosario; tenía una especial amistad con el párroco, de quien recibió orientación y apoyo moral y espiritual.
Estimulado por el ejemplo de su hermano mayor fray Auspicio, se incorporó a la Orden Hospitalaria en Ciempozuelos a los diecisiete años, el 10 de noviembre de 1921. En Carabanchel Alto vistió el hábito hospitalario el 2 de junio de 1922 con el nombre de fray Jerónimo, dando inicio al noviciado canónico. Al año siguiente de su noviciado, en la fiesta de san Juan Grande, 3 de junio, emitió la profesión de los votos temporales; la profesión solemne la hizo el 6 de marzo de 1928. Prácticamente su vida como hospitalario la desempeñó como responsable de la cocina.
Al abrirse la Escolanía Misionera Hospitalaria, de Talavera de la Reina, al principio del año 1935, fray Jerónimo fue destinado a ella. La situación de tensión y de inseguridad en Talavera crecía día a día desde el levantamiento militar de 1936. El 25 de julio unos milicianos de la izquierda obligaron a fray Jerónimo y a sus compañeros a subir a un camión y a la salida de Talavera, junto a la ermita de Nuestra Señora del Prado, los mataron. Trasladados los cadáveres al cementerio, el conserje les dio sepultura por orden de edad. El beato Jerónimo Ochoa tenía treinta y dos años de edad, y trece de profesión. Sus reliquias descansan en el sanatorio de Ciempozuelos de los Hermanos de San Juan de Dios. Abierta su causa de muerte como martirio en la Curia diocesana de Madrid (1952) y aprobada en Roma el 14 de mayo de 1991, fue beatificado el 25 de octubre de 1992, por el papa Juan Pablo II. Su fiesta litúrgica se celebra el 30 de julio como “Mártires de la Hospitalidad”.
Bibl.: O. Marcos Bueno, Violencias, profanaciones y asesinatos cometidos por los marxistas en los Establecimientos de San Juan de Dios: Ciempozuelos, Carabanchel Alto y Talavera de la Reina, Palencia, Editorial Hospitalaria, 1938; R. M. Saucedo Cabanillas, “Hasta el Cielo”, en Biografía y martirio de 54 Hermanos Hospitalarios de San Juan de Dios, Madrid, ARGES, 1952; O. Marcos Bueno, Testimonio Martirial de los Hermanos de San Juan de Dios en los días de la persecución religiosa española, Madrid, Editorial Hospitalaria, 1980; F. Lizaso Berruete, Testigos de la misericordia hasta el martirio, Madrid, Editorial Hospitalaria, 1992.
José Luis Martínez Gil, OH