Navarro Miegimolle, Antonio. Zamora, 25.I.1905 – Marruecos, 23.IX.1925. Militar y caballero Laureado de San Fernando.
Fueron sus padres el coronel de Infantería Antonio Navarro Sánchez y María Miegimolle y Martínez Conde. Ingresó en la Academia de Infantería a los diecisiete años, siendo nombrado sargento galonista debido a su aplicación en los estudios. Al ascender a alférez, en junio de 1924, fue destinado al Regimiento de Toledo, marchando en agosto a Melilla, donde prestó servicios de campaña hasta el mes de diciembre en que regresó a la Península.
En 1925 fue destinado al batallón de Cazadores de Tarifa, al que se incorporó en Larache, pasando a continuación a Tenin. En el mes de abril de ese mismo año fue destinado a la 6.ª Bandera del Tercio, con la que intervino el 8 de septiembre en el desembarco de Alhucemas. Una vez ocupada la cabeza de playa, desde el amanecer del día 9 se recibió un intenso fuego desde las lomas que del monte Malmusi se extendían hacia el mar, dedicándose las tropas durante los días siguientes a consolidar las posiciones alcanzadas, sin que el enemigo dejase de hostilizarlas.
El día 20 se tomó la decisión de avanzar y el 22 se realizó un reconocimiento sobre el Malmusi, en cuya operación cayó muerto el capitán Miguel Rodríguez Bescansa que en esta campaña, ganaría dos laureadas de San Fernando. Al día siguiente se decidió ocupar Yebel Malmusi, formando el alférez Navarro en vanguardia de las tropas y al mando de la Sección de Fusiles Ametralladores de la 24.ª Compañía, teniendo que intervenir en apoyo de las fuerzas indígenas que constituían la extrema vanguardia, al ser éstas rechazadas y producirse momentos de indecisión.
Arengando a su sección, se lanzó al frente de ella al asalto de las estribaciones de Malmusi Alto, consiguiendo con su esfuerzo, energía y sereno valor que las fuerzas indígenas reaccionaran, alcanzando, no obstante haber sido gravemente herido en la región axilar, el objetivo señalado y arrojando al enemigo de sus posiciones en una impetuosa carga al arma blanca, causándole numerosas bajas, algunas que no pudo retirar por lo enérgico y rápido del ataque, recibiendo una nueva herida, esta vez en la cabeza, que le produjo la muerte cuando tan solo contaba veinte años de edad. En esta misma acción resultó también muerto y recompensado con la Cruz Laureada el teniente José Espinosa de Orive, perteneciente también a la 24.ª Compañía.
En 1926 se le concedió el ascenso a teniente por méritos de guerra y en 1928 la Cruz Laureada de San Fernando por Real Orden de 17 de abril. Sus restos reposan en la Galería Militar del cementerio de la Purísima Concepción de Melilla. El 20 de septiembre de 1998, oficiales y suboficiales del Tercio Gran Capitán costearon una nueva lápida para su sepultura, ya que la anterior era ilegible.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. N-40.
J. M.ª Gárate Córdoba (dir.), España en sus héroes: historia bélica del siglo XX, Madrid, Ornigraf, 1969; J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando. Infantería, t. I, Madrid, Ministerio de Defensa, 2001.
José Luis Isabel Sánchez