Quijano Veas Bellón, Sebastián. Yeste (Albacete), s. XVIII - ¿Yeste (Albacete)?, 1776 post. Agricultor, propietario, autor de una memoria agraria publicada por la Sociedad Económica Matritense.
Nada sabemos acerca de la vida de este agricultor, al que suponemos con la cultura suficiente como para haber escrito la Memoria […], que se cita a continuación. Posiblemente sería un pequeño terrateniente que, desde luego, vivía cabe a sus tierras y las cultivaba personalmente y con esmero. El bibliógrafo J. P. Tejera y T. de Moncada (1922) dice que “nació a mediados del siglo XVIII”; parece que debió nacer antes, pues con veintiséis años no se puede tener la experiencia que demostraba tener en su bien escrita memoria.
En 1776, una época muy propicia a los interrogantes y las respuestas sobre el fomento de la agricultura patria, la Sociedad Económica Matritense convocó un concurso sobre “el problema de fomentar la Agricultura, A saber: Quales son los medios de fomentar solidamente La Agricultura en un Pais, sin detrimento de la cria de ganados, y el modo de remover los obstáculos que pueden impedirla”. Sebastián Quijano remitió una memoria redactada en sobrio estilo y con certeras observaciones que, si bien no mereció el galardón del primer premio, sí fue distinguida al objeto de publicar un extracto de la misma en el tomo I de las Memorias de la Sociedad Económica (1780).
Él mismo se encargó de remitir, junto a su Memoria…, un resumen de la misma y viene a decir (extractamos mucho): que en cualquier país florecerá la agricultura si los nobles hacendados o propietarios de las tierras residen y tienen su domicilio fijo y continuo en los pueblos de su hacienda; si éstos construyen puentes, componen caminos y proporcionan riegos a sus expensas; si los arrendamientos de tierras se hacen sin limitación de tiempo, estableciendo una ley que fije los casos en que el colono pueda ser lanzado; si se extinguen los vagos y ociosos que viven a costa del sudor del labrador; si los jueces son íntegros y rectos; si se educa y socorre a los labradores, modificándoles los usos y costumbres antiguas por las técnicas modernas; si no se imponen reglas obligatorias sobre qué y cómo se debe cultivar, porque lo más importante es que se cultive mucho no en una u otra provincia, sino en todo el reino; si los cuerpos literatos se dirigen a mejorar los cultivos con sabios discursos, que se publiquen con sencillez para entendimiento y uso de los labradores y, finalmente, lo recalca de nuevo, si los nobles hacendados y dueños poderosos se domicilian en sus pueblos y dan a los labradores su ejemplo, su aplicación, su estímulo al trabajo y su afán de superación en el cultivo de sus tierras. Como colofón, la propia Sociedad Económica, comenta que la Memoria […], escrita por el señor Quijano Veas “le califica de sólido letrado, aplicado labrador y verdadero hijo de la patria”.
El bibliógrafo J. M. Tejera y R. de Moncada (1922) sufre error al mencionar la página en que aparece la redacción de Quijano Veas, en el tomo I de las Memorias de la Sociedad Económica; dice que es en la “534”, cuando lo cierto es que está en las páginas 354 y 355.
Obras de: ~: “Sobre el Problema propuesto para el año de 1776 (…) Noticia de la Memoria del Señor Don Sebastián Quijano Veas Bellón”, en Memorias de la Sociedad Económica, Tomo Primero, Madrid, Antonio de Sancha, M.DCC.LXXX [1780], págs. 354-355.
Bibl.: B. Antón Ramírez, Diccionario de bibliografía agronómica y de toda clase de escritos relacionados con la agricultura[…], Madrid, Imp. y estereotipia de M. Rivadeneyra, 1865, págs. 673 y 916, nº 1.732; P. Díaz Cassou, Serie de los Obispos de Cartagena, Madrid, Establecimiento Tip. de Fortanet, 1895, pág. 208; J. M. Tejera y R. de Moncada, Biblioteca del Murciano, o Ensayo de un Diccionario biográfico y bibliográfico […], Madrid, Tip. de la Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos, MCMXXII [1922], pág. 651.
Fernando Rodríguez de la Torre