Pérez Padilla, Florencia. Rosario. Sevilla, 11.XI.1918 – Madrid, 24.I.2000. Bailaora de flamenco y bailarina de español.
Debe su nombre artístico a un apelativo familiar. Se inició en la academia del Maestro Realito, donde conoció al bailaor y bailarín Antonio, formando pareja bajo la denominación de Los Chavalillos Sevillanos, siendo una de sus primera actuaciones, en 1928, en la Exposición Internacional de Lieja (Bélgica). En 1931, debutaron en Madrid y fueron contratados por la empresa Vedrines para recorrer los escenarios españoles y portugueses. De vuelta a Madrid, se presentaron en la Sala Lido. En 1936, al producirse la Guerra Civil, se trasladaron a Francia, donde bailaron para los exilados, y el empresario internacional Marquesi les contrató para actuar en América, presentándose en primer lugar en el Teatro Maravillas de Buenos Aires (Argentina), en 1938. Regresaron a España, en 1949, reapareciendo en el Teatro Fontalba madrileño, con gran repercusión de público y crítica. A partir de esta fecha no cesaron sus giras españolas y mundiales, estrenando numerosas coreografías, tanto sobre estilos flamencos como sobre obras sinfónicas de Albéniz, Falla, Granados y otros compositores. En 1953, se separaron y Rosario creó su propia compañía, con la que triunfó en los teatros y festivales españoles y extranjeros.
A partir de la década de 1960, alternó sus recitales con la enseñanza de su arte. Entre las distinciones en su haber destacan las siguientes: Copa de Plata a la Popularidad de Nueva York 1946; Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid 1952; Primer Premio Internacional de Interpretación Coreográfica 1955; Premio de las Castañuelas de Plata de la Asociación de Amigos del Arte 1956; Premio Nacional de Coreografía 1957; Medalla de Oro de las Festivales Internacionales de Danza 1958, y Medalla de Oro de las Bellas Artes del Ministerio de Cultura 1994. El estudioso de la danza española Vicente Marrero, escribió el siguiente comentario (Diario Informaciones, 20 de abril de 1953): “Es Rosario una auténtica, una gran bailaora, de fuste, castiza, de estampa cortijera, con mucho nervio y mucha sal, que hoy continúa en nuestras danzas la vieja tradición de nuestras grandes figuras flamencas. Acompaña a su gran experiencia sobre las tablas, un gusto exquisito y un elogiable talento de coreógrafa”.
Bibl.: J. Blas Vega y M. Ríos Ruiz, Diccionario Enciclopédico Ilustrado del Flamenco, Madrid, Cinterco, 1988; R. Salama Benarroch, Rosario, aquella danza española, Granada, Mangua, 1997; A. Álvarez Caballero, El baile flamenco, Madrid, Alianza Editorial, 1998.
Manuel Ríos Ruiz
