Iulius Possessor, Sextus. Sextus Iulius Sex(ti) f(ilius) Quir(ina tribus) Possessor. Maktar (antes Mactaris, Túnez), c. 128-133 – ?, ¿f. s. II? Funcionario financiero de alto rango en la Hispania romana.
Por una inscripción de Mactaris que dedicó a Apolo, se sabe que fue originario de esa ciudad situada a 150 kilómetros al sur de Cartago, aunque desarrolló su labor entre los gobiernos de Antonino Pío (138-161) y Marco Aurelio (161-180) en Dacia, Capadocia, Roma, Hispania y Egipto. Fue padre de Iulia Frugilla y suegro del procurador Tiberius Plautus Félix Ferruntianus. El texto de Mactaris y un epígrafe honorífico de Hispalis (Sevilla) permiten conocer su carrera (CIL, II, 1180).
Comenzó sus milicias ecuestres al mando de una unidad auxiliar de infantería, la cohors II Gallorum, en la provincia danubiana de Dacia inferior; en la misma provincia dirigió una unidad de arqueros y un ala auxiliar de caballería (praepositus numeri Syrorum sagittariorum item alae primae Hispanorum); en Romula Malvensis (Resca, Rumanía), lugar en que estuvo acantonada la segunda de las unidades citadas, fue responsable del control financiero de la ciudad hacia el año 160. Su tercera milicia fue el tribunado de la legión XII Fulminata en Capadocia, y en la colonia de Arca en esta misma región repitió su función como responsable del control económico.
A comienzos del gobierno conjunto de Marco Aurelio y Lucio Vero (161-169) fue admitido en las decurias judiciales de Roma, de las que se seleccionaban los jueces que entendían las causas, y con ello entró en la Administración civil.
Desde ese momento su carrera se orientó hacia el servicio de la annona, entrando inicialmente como adjunto al servicio del prefecto Ulpius Saturninus, aún en vida de Lucio Vero, es decir, antes de enero-febrero del año 169; la denominación oficial de este puesto, seguramente sexagenario (retribuido con 60.000 sestercios al año), figura en la inscripción de Hispalis como adiutor Ulpii Saturnini praefecti annonae (LX) ad oleum afrum et Hispanum recensendum item solamina transferenda item vecturas naviculariis exsolvendas, mientras que en la de Mactaris se dice adiutor praefecti annonae ad horrea Ostiensia et Portuensia; su trabajo consistía en controlar la importación marítima del aceite hispano y africano para Roma, gestionar su almacenamiento y atender los gastos que ello suponía, lo que implica su residencia durante esos años en Roma u Ostia.
Todavía antes de enero-febrero del año 169, Sextus Iulius Possessor fue enviado a la Baetica como procurator Augustorum ad ripam Baetis, otro puesto sexagenario que Remesal vincula al control administrativo de la exportación a través del Guadalquivir, aunque pudo ocuparse también del mantenimiento de las infraestructuras y de la red de canales; durante esa estancia se le erigió el pedestal hispalense coronado por su estatua.
Tras su paso por Hispania, en la última década del gobierno de Marco Aurelio y, en todo caso, después de enero-febrero del 169, volvió al puerto de Ostia como procurator Augusti ad annonam, es decir, vinculado de nuevo al control de las importaciones pero esta vez no como adjunto sino ya como procurador; su último destino conocido le sitúa en Alejandría (Egipto) como procurator ad Mercurium, también vinculado a las exportaciones de grano desde aquella provincia, aún en tiempos de Marco Aurelio. Sextus Iulius Possessor es el prototipo de funcionario medio especializado en la exportación e importación de alimentos, con una amplia experiencia en el control del tráfico portuario y en el almacenamiento de víveres.
Bibl.: E. Hübner, Corpus Inscriptionum Latinarum, vol. II (CIL, II), Berlin, Academia Litterarum Regia Borussicae, 1869, n.º 1180; H.-G. Pflaum, Les carrières procuratoriennes équestres sous le Haut-empire romain I-IV, Paris, Geuthner, 1960-1961, n.º 185; H. Nesselhauf, “Sex. Iulius Possesor”, en Madrider Mitteilungen, 5 (1964), págs. 180-184; G. Ch. Picard, “Un témoignage sur le commerce des objets d’art dans l’Empire romain: la statue de bronze de l’Apollon de mactar, offert par S. Iulius Possessor”, en Revue Archéologique (1968), págs. 297-314; H. Devijver, Prosopographia militiarum equestrium quae fuerunt ab Augusto ad Gallienum, I-VI, Lovaina, Universitaire Pers Leuven, 1976-2001, págs. 474- 476, 1409-1410 y 2144-2145, n.º I 99; J. M.ª Blázquez, “La exportación del aceite hispano en el Imperio romano. Estado de la cuestión”, en VV. AA., Producción y comercio del aceite en la antigüedad. Primer Congreso Internacional, Madrid, Universidad Complutense, 1980, pág. 34; S. Dardaine y H. Pavis d’Escurac, “Le Baetis et son aménagement: l’apport de l’épigraphie (CIL, II, 1183 y 1180)”, Ktèma, 8 (1983), págs. 307-315; P. Le Roux, “L’huile de Bétique et le prince sur un itinéraire annonaire”, en Revue des Études Anciennes, 88 (1986), págs. 247-271; C. C. Petolescu, “Quatre contributions à la prosopographie des milices équestres”, en Dacia, 31 (1987), págs. 164-171; J. Remesal, “Sextus Iulius Possessor en la Bética”, en VV. AA., Alimenta. Estudios en Homenaje al Dr. Michel Ponsich, Madrid, Universidad Complutense, 1991, págs. 281-295, con el resto de la bibliografía; M. Ojeda, El servicio administrativo imperial ecuestre en la Hispania romana durante el Alto Imperio, I. Prosopografía, Sevilla, Kolaios, 1993, págs. 62-66, n.º 8; S. Lefebvre, “Procurateurs en Hispanie. Les Fastes procuratoriennes des Hispaniae: bilan des recherches depuis H.G. Pflaum”, en H.-G. Pflaum. Un historien du XXe siècle, Génève, Droz, 2006, págs. 258 y 277.
Juan Manuel Abascal
