Ortega Alonso, Ambrosio. Brosio. Barruelo de Santullán (Palencia), 14.II.1925 – Palencia, 14.VII.2015. Pintor y escultor.
Ambrosio Ortega Alonso, Brosio, también conocido en el ambiente artístico como “Pintor de los mineros”, nació en Barruelo de Santullán (Palencia) el 14 de febrero de 1925, en el seno de una familia humilde.
Tanto su hermano Mariano, como su padre, eran trabajadores de la minería del carbón, actividad principal de la comarca y él mismo, tras un corto paso por la escuela, donde aprendió las primeras letras, y unos años de preadolescencia en los que ayudaba a su familia cuidando ganado, al cumplir los 16 entró a trabajar como ayudante minero en el famoso pozo Calero, una de las minas de carbón más peligrosas del país.
Ya entonces, recién terminada la Guerra Civil y con su hermano huido en el monte como responsable de una partida de maquis que operaba por la zona, Ambrosio Ortega, a la par que trabajaba en la mina, actuaba como enlace del grupo guerrillero de Mariano, hasta que, en 1947, huidos ambos, fueron detenidos en Bilbao, juzgados y condenados a muerte. A Mariano Ortega Alonso se le aplicaría el garrote vil en 1951. Sin embargo, a Brosio, recluido en el penal del Dueso, (Santoña), se le conmutaba la pena de muerte por veinte años de prisión.
Cumpliendo condena, protagonizaría en 1950 una sonada fuga, permaneciendo en libertad once días, hasta que fue atrapado y llevado de nuevo a la prisión, lo que trajo como consecuencia su traslado a la cárcel de Teruel y un nuevo cumplimiento de condena a partir de cero desde el momento de su captura.
Fue en el penal del Dueso, antes de su fuga, donde Brosio se incorporaría a la célula del Partido Comunista de España, que operaba clandestinamente en el interior de la prisión, al tiempo que para entretenerse comienza a dibujar y pintar de manera autodidacta, en un primer momento con lápiz y unas acuarelas que le regaló un compañero de celda. Sus primeros trabajos, según contaba, fueron copias de carteleras de cine y retratos de familiares de compañeros a partir de fotografías, que ampliaba por el sistema de cuadrícula.
Tras El Dueso y Teruel, un último traslado le llevará a la prisión de Burgos, donde se iniciaría en las técnicas del pastel y del óleo, y realizaría por encargo numerosos retratos, que cobraba a 15 pesetas para procurarse algún ingreso.
En Burgos conocerá a otros presos intelectuales como el poeta Marcos Ana y se incorporará a la eufemísticamente conocida como “Universidad de Burgos”, donde algunos internos ponían en común sus conocimientos y llevaban a cabo actividades culturales dirigidas a todo el conjunto. También formará con Marcos Ana y el conocido dirigente comunista Melquisedec Rodríguez Chaos, entre otros, parte de la denominada como “Tertulia de la Aldaba”, que editaba la revista clandestina Muro, en la que Ambrosio Ortega participaba como dibujante.
Y será en la prisión burgalesa donde Brosio terminará de desarrollarse como artista, especialmente como gran acuarelista con un estilo muy personal, que algunos críticos han calificado como “aerográfico” por la peculiar transición que consigue entre fondo y personajes, que le convertiría en uno de los acuarelistas más prestigiosos del país.
La temática de sus obras se limita fundamentalmente a cuatro líneas diferenciadas: retratos, escenas carcelarias, escenas mineras -la mayoría del interior de la mina- y labores del campo. Las más apreciadas, por la atmósfera expresionista y fantasmagórica que consigue gracias a su maestría con la acuarela, son las de carácter minero, llenas de personajes anónimos, alucinados y sombríos, y las de la cárcel, con personajes que se diluyen y producen una sensación de tiempo detenido y fatalismo, potenciada por el empleo de tonos fríos, que verdaderamente conmueve y sobrecoge.
A finales de 1970, tras veintitrés años, seis meses y diez días de cárcel y con la salud muy quebrantada, Ambrosio Ortega es puesto en libertad, recuperándose poco a poco gracias a la ayuda de su amigo asturiano José Manuel Nebot, conocido fotógrafo y militante comunista que lo acoge en su casa de Oviedo y le facilitará su primera y exitosa exposición en la mítica galería Tassili de esa ciudad. La muestra tuvo lugar entre el 7 y el 20 de abril de 1972 y la buena acogida que obtuvo le sirvió para exponer, en 1974, en la galería Península de Madrid con críticas muy positivas, de las que se hicieron eco numerosos medios nacionales. La proyección de Brosio parecía entonces imparable. Las exposiciones, tanto individuales como colectivas se sucedían. El poeta Blas de Otero le dedica un largo poema titulado Al pintor Brosio, impresionado por su vida y su obra y el prestigioso fotógrafo Alberto Schommer le hará un retrato que, junto a un texto manuscrito del propio Ambrosio Ortega formará parte de la exposición itinerante de este autor sobre personajes relevantes del momento y el libro titulado Las fotos Psicológicas, publicado en 1975.
En paralelo a su actividad artística, Ambrosio Ortega seguirá desde su salida de prisión con su militancia política, empeñado en la organización del Partido Comunista en Palencia, del que sería número dos en la lista al Congreso por esta provincia para las elecciones democráticas de 1979. Pasa el tiempo y debutará como escultor con su única obra de esta disciplina: el Monumento a los mineros, erigido en la localidad de Villablino (León), el 4 de diciembre de 1983, en tanto que su fama como pintor sigue creciendo conforme se suceden exposiciones, siendo el único artista no vasco en recibir el encargo de pintar cinco obras de gran formato para los Arcos de la Ribera de Bilbao. El conjunto, que lleva por título Haciendo país, fue terminado por Brosio en 1989.
Una última exposición en 2002 en la galería Ármaga de León y una nueva propuesta para exponer en el Javits Convenction Center de Manhattan (Nueva York), dentro de la Artexpo New York de 2003, nuevamente frustrada por su precario estado de salud, harán que en adelante Brosio apenas pueda volver a pintar y su persona y su obra empiecen a caer en el olvido, hasta que en 2007, por el empeño de muchos de sus amigos, se le rinda en su localidad natal un gran homenaje con exposición incluida -a la que Brosio acudirá casi ciego- y que será el principio de una efímera resurrección artística al ser seguida por una gran muestra antológica en Palencia y León. Finalmente, gracias al esfuerzo del Museo de la Minería de Sabero (León), una última exposición mucho más amplia, permanecería abierta entre el 9 de abril y el 14 de agosto de 2011, volviendo a reivindicar públicamente la obra de Ambrosio Ortega Alonso que, cada vez más quebrantado físicamente, fallecía en Palencia el 14 de julio de 2015 dejando como legado su obra y unas memorias de sus años de guerrilla y cárcel aún inéditas.
Obras de ~: Pintura: Retrato de Rosana, s/f; Durmiendo en la celda, c. 1972; Mitin en el pozo Calero, c. 1974; Picadores en la mina, c. 1976.
Pintura mural: Haciendo país, bóvedas de Los Arcos de la Ribera, Bilbao, 1989.
Escultura: Monumento a los mineros, Villablino (León), 1983.
Bibl.: A. Schommer, Las fotos psicológicas, Madrid, Editorial Nueva Lente, 1975; VV. AA. Brosio, cat. exp., Palencia, Galería Medici’s, 1976; A. Sorel, La guerrilla antifranquista: la historia del Maquis contada por sus protagonistas, Tafalla (Navarra), Editorial Txalaparte, S.L., 2002; J. C. Aparicio Vega, “Galería Tassili (1970-1979)”, en I Congreso de Estudios Asturianos, t. V, Oviedo, Real Instituto de Estudios Asturianos (RIDEA), 2007; A. Ortega Alonso, INDÓMITUS. Los años sin luz, (libro de memorias inédito), Palencia, 2011; VV. AA., Brosio el pintor de los mineros, cat. exp., Sabero (León), Museo de la Siderurgia y la Minería de Castilla y León, 2011; B. de Otero, Obra completa (1935 – 1977), Madrid, Editorial Galaxia Gutemberg, 2013; J. Alonso, Brosio. “El pintor invisible”, en Arte Político (actas del congreso), Madrid, Asociación Española de Críticos de Arte, 2015; F. Tundidor Diaux, Rebelde con causa. La lucha antifranquista 1950-1968. Una mirada crítica y acusadora, Lleida, Milenio Publicaciones, S.L., 2016; M. Tauziet, Etude de l’artiste espagnol Ambrosio Ortega Alonso “Brosio”. Engagement communiste et création sous la dictature franquiste, Memoria de M1 Historia del Arte bajo la dirección de Marie Gispert., París, Université París 1 Panthéon Sorbonne, 2020.
Julián Alonso Alonso
