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Diego de Mendoza

Biografía

Mendoza, Diego de. Guadix (Granada), ú. t. s. XV – Río Luján (Argentina), 15.VI.1536. Conquistador, marino, almirante.

Miembro de una de las más ilustres familias nobiliarias de Castilla, bisnieto del I duque del Infantado. Muy cercano a la corte de Carlos I, militar de carrera, participó en varias de las guerras europeas y contra los turcos del Emperador. Su hermano, el adelantado del Río de la Plata Pedro de Mendoza, lo nombró almirante de la Armada que partió desde Sanlúcar el 24 de agosto de 1535 con el objetivo de colonizar los territorios rioplatenses.

Diego de Mendoza estaba al frente de los once barcos, más tres que se unieron en las Canarias, y como almirante de la flota debía trazar la travesía hasta América y determinar el punto más adecuado donde atracar la flota una vez dentro del estuario. Al poco de abandonar las Canarias sufrieron una fuerte tormenta que dispersó los barcos y obligó a detenerse de nuevo para reagruparlos en unas islas cercanas a la costa brasileña. Posteriormente la armada ancló en la bahía de Río de Janeiro, donde hicieron aguada y se abastecieron de víveres. Estando en Río se produjo el incidente que terminó con la vida de Juan Osorio, maestre de campo de la expedición, con quien Diego de Mendoza había tenido varias discusiones. Entre Diego y Juan Osorio hubo encono y rivalidad desde que partieron de España, pues ambos pugnaban por el poder militar de la expedición. Era muy evidente que el adelantado Pedro de Mendoza, mayor y enfermo de sífilis, no aguantaría mucho tiempo la conquista de las tierras australes, y la lucha por su sucesión se desató sin ni siquiera desembarcar. En Río de Janeiro, el almirante Diego de Mendoza firmó una orden de detención por traidor contra Juan Osorio.

En el momento de ser detenido, Osorio opuso cierta resistencia y fue vilmente asesinado.

Una vez abastecidos los barcos, partieron de Río hacia el sur. Diego se adelantó y penetró primero por el estuario del Plata hasta encontrar el lugar más adecuado para el desembarco. Primero, Diego hizo un atraque en las islas San Gabriel (frente a la actual Colonia, Uruguay). Allí se le reunió Pedro de Mendoza en enero de 1536. Construyeron unos barcos especiales para ríos bajos, y enviaron algunos bergantines con unos prácticos del río, veteranos de la expedición de Caboto, a fin de que eligieran el mejor lugar para levantar una población. El sitio elegido era un pequeño abrigo natural, formado por la desembocadura de un río, bautizado como riachuelo de los Navíos. Allí se instaló el campamento para los soldados y colonos, al que se nombró Ciudad de Santa María de los Buenos Aires.

Según cuentan las crónicas del viaje, principalmente la del alemán Ulrico Schmidel, los indios recibieron bien a los españoles, les ayudaron en la construcción de sus cabañas y les proporcionaron alimentos y agua.

Sin embargo, pronto se refugiaron en el interior y comenzaron a hostigar a las expediciones de reconocimiento.

Los indios querandíes no permitían que se adentrasen mucho en sus tierras, y, tras el hostigamiento de una patrulla española, el adelantado Pedro de Mendoza pidió a su hermano Diego que organizara una partida de castigo.

El 15 de junio de 1536, día del Corpus Christi, Diego de Mendoza marchó al frente de trescientos soldados y treinta caballos, todos bien pertrechados para el combate, con la intención de desalojar e los indios de los alrededores del campamento y provocar una matanza de castigo. Mas los españoles se vieron sorprendidos por un ejército de más de cuatro mil querandíes. La batalla fue sangrienta y, aunque los españoles pudieron desalojar a los nativos, el precio fue muy alto. El caballo de Diego de Mendoza fue derribado por una boleadora (bolas de piedra atadas por una cuerda) y, una vez en el suelo, el almirante fue atravesado por una lanza nativa. Desde entonces, este lugar en los márgenes del río Luján fue conocido por los españoles como “pago de la matanza”.

 

Bibl.: P. Lozano, Historia de la Conquista del Paraguay, Río de la Plata y Tucumán, Buenos Aires, Imprenta Popular, 1873; P. Groussac, Mendoza y Garay. Las dos fundaciones de Buenos Aires, Buenos Aires, Academia Argentina de las Letras, 1949; M. Martínez Molina, Accitano Pedro de Mendoza y Luján: primer fundador de Buenos Aires, Granada, Diputación, 1988; U. Schmidel, Relatos de la conquista del río de La Plata y Paraguay 1534-1554, Madrid, Alianza Editorial, 1989; J. M.ª González Ochoa, Quién es quién en la América del Descubrimiento, Madrid, Editorial Acento, 2003.

 

José María González Ochoa