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Joaquín Rodríguez Espina y García del Real

Biografía

Rodríguez Espina y García del Real, Joaquín. Oviedo (Asturias), 19.VIII.1819 – Madrid, 10.VII.1887. Teniente general y caballero de la Orden de San Fernando.

En marzo de 1835 ingresó en el 2.º Batallón de Voluntarios de Castilla con el empleo de subteniente, con el que enseguida entró en operaciones contra los carlistas en la provincia de Santander.

Al año siguiente se le concedió el mismo empleo en el Regimiento de Voluntarios de Navarra, combatiendo en sus filas en Oteiza y Zubiri, y resultando herido de bala en la pierna izquierda en la acción de Puente la Reina, lo que no le impediría intervenir en las posteriores acciones de Arróniz y Montejurra.

Por su intervención en la acción de Aldeanueva de Ebro y Rincón de Soto (Logroño), el 1 de diciembre, fue recompensado con la Cruz de San Fernando de 1.ª Clase.

En 1837 tomó parte en la persecución a la expedición de don Carlos, a la que se enfrentó en las batallas de Huesca, Barbastro, Gra y Guisona, resultando en esta última herido en el cuello por bala de fusil. Meses después cayó prisionero en Herrera de los Navarros, consiguiendo fugarse.

Un año después luchó en las provincias de Castellón y Valencia, hallándose en la operaciones sobre Morella y asalto posterior, en el que intervino voluntariamente.

En ese mismo año fue ascendido a teniente por antigüedad.

En 1839 siguió combatiendo a los carlistas en la provincia de Valencia, recibiendo una segunda Cruz de San Fernando de 1.ª Clase por la acción de Yesa, el 25 de febrero; en ese mismo año fue trasladado a la Guardia Real de Infantería, perteneciente al Ejército del Norte, batiéndose en Villarreal de Álava y pasando más tarde al Bajo Aragón, donde se halló en el sitio y toma de los Castillos de Segura y Castellote, en las acciones de Cerollera, Peñarroya y Beceite, y en la toma de Morella y Berga.

En 1841 pasó a prestar sus servicios en la Corte, causando baja en el mes de octubre en la Guardia Real y quedando en la situación de excedente en la plaza de Valencia. Al año siguiente fue destinado al Regimiento de la Unión, con el que en 1843 se trasladó a Andalucía acompañando a Espartero, pasándose en Carmona al Ejército del marqués del Duero e interviniendo en la sofocación del levantamiento progresista de Granada, el 5 de octubre, por lo que obtuvo su tercera Cruz de San Fernando de 1.ª Clase.

Ascendido a capitán por gracia general, fue trasladado al Regimiento Inmemorial del Rey, con el que contribuyó en el mes de octubre a sofocar el levantamiento progresista de Granada. Los años siguientes los pasó prestando servicio de guarnición en Granada, interviniendo en 1847 en operaciones de guerra contra los carlistas en Barcelona y siendo en ese mismo año destinado al Batallón de Cazadores de Simancas, de nueva creación.

En 1848 se halló, entre otras acciones, en la del Coll de Santigosa y al año siguiente en las de las Planas, Tona, Seriñá y Finestrat, recibiendo una nueva Cruz de San Fernando de 1.ª Clase por la acción de San Esteban de Bas (Gerona), el 28 de abril. Terminada la guerra, en 1851 desempeñó el cargo de comandante militar de Santa Coloma de Farnés y al año siguiente pasó trasladado al Batallón de Cazadores de Tarifa, de guarnición en la Isla de Menorca.

En 1854 fue ascendido a segundo comandante por gracia general y causó baja en su Cuerpo, pasando a la situación de reemplazo, en la que se mantendría los siguientes dos años, interviniendo en 1856 en los sucesos del mes de julio de Madrid, por lo que fue agraciado con la Cruz de Carlos III, pasando más tarde destinado al Regimiento de Cantabria.

En 1860 luchó en la Guerra de África, interviniendo en la toma del Fuerte Martín y de la Aduana de Tetuán, resultando gravemente herido en el combate de los Llanos de Tetuán y ganando sobre el mismo campo de batalla el empleo de primer comandante.

Una vez recuperado, se encontró en la acción de Samsa y en la batalla de Wad Ras. Al término de la contienda permaneció de guarnición en Tetuán hasta 1862, año en que causó baja en su Regimiento por pase al Batallón Provincial de Toledo.

Ascendido a teniente coronel por antigüedad en 1864, pasó a servir en el Regimiento del Príncipe, del que poco después fue trasladado al de Isabel II, de guarnición en Madrid, donde en 1866 tomó parte en la sofocación de la sublevación del cuartel de San Gil.

En ese mismo año pasó al Colegio de Infantería como jefe del detall.

En el mes de junio de 1868 se le dio el mando del Batallón de Cazadores de Alba de Tormes, tomando parte tres meses más tarde en la batalla de Alcolea a las órdenes del marqués de Novaliches. Recompensado con el empleo de coronel por méritos de guerra, en enero del año siguiente se le dio el mando del Regimiento de San Fernando, con el que combatió en Cataluña a partidas republicanas, ganando en el mes de noviembre de 1869 el ascenso a brigadier.

Los años siguientes los pasó en situación de cuartel en Toledo, hasta que en 1872 fue nombrado gobernador militar de Seo de Urgel, luchando en aquella zona contra las partidas carlistas. En 1874 volvió de cuartel a Toledo y enseguida se le nombró jefe de una brigada del 3.er Cuerpo de Ejército, con la que formó parte del Ejército al mando del marqués del Duero, interviniendo en el levantamiento del sitio de Bilbao y ganando la Gran Cruz al Mérito Militar con distintivo rojo.

A finales de 1874 fue ascendido a mariscal de campo y se le encomendó la Capitanía General de Castilla la Vieja y en 1876 el mando del 1.er Cuerpo de Ejército, con el que tomó parte en diversas acciones de guerra en Navarra. Al término de la guerra regresó a Madrid acompañando a Alfonso XII como ayudante de campo.

En 1877 fue ascendido a teniente general y cesó en el anterior cargo de ayudante, siendo nombrado capitán general de Granada y posteriormente de las islas Baleares.

En 1883 se le encomendó la Capitanía General de las islas Canarias, pero no llegó a hacerse cargo de ella, pasando a Valencia en situación de cuartel.

En 1884 fue nombrado capitán general de Navarra y al año siguiente presidente de la 1.ª Sección de la Junta Consultiva de Guerra.

Poseía las Grandes Cruces de San Hermenegildo, Isabel la Católica y al Mérito Militar con distintivo rojo, así como la Cruz de Carlos III.

 

Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. R-1998.

J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando. Infantería, t. II, Madrid, Ministerio de Defensa, 2001.

 

José Luis Isabel Sánchez