Alonso, Martín. España, p. m. s. xvi – s. m. s. xvi. Letrado de la Casa de la Contratación.
Fue nombrado letrado de la Casa de la Contratación en sustitución del licenciado Castroverde, muerto en 1545, y así por carta real fechada en Madrid el 29 de enero de 1546 se ordenaba a los oficiales de la Casa que le pagaran el sueldo que le correspondía como asesor de ella.
Sirvió escaso tiempo esta comisión, pues quedó comprendido en la visita de la Casa de la Contratación, que en 1549 llevó a cabo el licenciado Hernán Pérez de la Fuente, y en el curso de ella el tesorero Francisco Tello y Juan de Almansa, como heredero del factor Baltasar de Almansa, le movieron pleito ante el visitador “sobre los ciento y veynte y nueve pesos y cinco tomines y seys granos de oro que estaban en la dicha Casa por bienes de francisco hernández vecino de la ciudad de braga difunto en la nueva españa diciendo averlos pagado y entregado por virtud de un auto por vos dado firmado de vuestro nombre como asesor de la dicha Casa a ciertas personas que las abian de aber y que después ellos abian sido condenados por el nuestro Consejo de las Indias a que los tornasen a dar y pagar a los verdaderos herederos del dicho francisco Hernández y que asi gelos avian dado y pagado de sus bienes y se les avia reservado su derecho contra vos...”, pleito que Pérez de la Fuente remitió al Consejo, respecto del cual se despachó en Valladolid el 24 de enero de 1551 una real provisión emplazándole para que acudiera a manifestar su derecho.
En la referida visita, además, se puso a los oficiales como cargo 24 de los generales, que: “Habiendo el licenciado Martín Alonso pronunciado un auto en dicho mandó que se le diesen tantos dineros, sin decir a quién, y viniendo la sentencia con esta incertidumbre la firmaron y pronunciaron y entregaron los dichos dineros a un Mateo Hernández y ahora al tiempo de las quentas, vista la falta, el asesor tornó a poner entre renglones al dicho Mateo Hernández y se salvó”.
Pero también se le pusieron los siguientes cargos particulares: en primer lugar “que después que le han llevado los pleytos los detiene mucho tiempo por sentenciar y siendo alguno para rescibir pruebas los detiene quatro y cinco y seys meses”, por el que se le puso culpa; en segundo lugar “que responde ásperamente a los negociantes y los trata mal de palabra”, por el que fue absuelto; en tercer lugar que resolvió en un pleito, teniendo interés en él, sobre lo cual se decidió despachar provisión al Consejo para su averiguación; y por último que en el citado proceso de Mateo Hernández, puso su nombre entre renglones para salvar su omisión en el auto, sobre lo que también se le puso culpa.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias (Sevilla), Indiferente General, 1963, l. 9, fol. 325r.-326v.; Patronato, 281, n. 1, r. 147; Patronato, 284, n. 1, r. 12.
E. Schäfer, El Consejo Real y Supremo de las Indias. Su historia, organización y labor administrativa hasta la terminación de la Casa de Austria, I, Sevilla, Universidad de Sevilla, 1935, págs. 83, 382.
Javier Barrientos Grandon
