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Salvador Valdés Barruso

Biografía

Valdés Barruso, Salvador. Madrid, 6.VIII.1810 – 20.II.1868. Mariscal de campo y caballero Laureado de San Fernando.

Se le concedió a los cinco años la gracia de guardia de corps de menor edad, siendo en 1827 promovido a subteniente y destinado al Regimiento Provincial de Toledo, del que en 1830 pasó a la Guardia Real Provincial con el empleo de alférez del 2.º Regimiento de Granaderos.

En 1834 participó en el desarme de los realistas de la villa de Madrid y provincia y al año siguiente se enfrentó a partidas carlistas en las provincias de Ciudad Real y Córdoba, hallándose en las acciones de Piedrabuena y Malagón (Ciudad Real), y en la de la sierra de los Pedroches (Córdoba), siendo recompensado por ello con la Cruz de San Fernando de 1.ª Clase.

En 1836 fue ascendido a capitán de Milicias y trasladado al Regimiento Provincial de Ronda, con el que combatió en Navarra al brigadier Basilio García, y al año siguiente formó parte de las tropas que persiguieron al pretendiente, interviniendo en la batalla de Chiva, el 15 de julio, en la que, a pesar de la inflamación que le había producido en el tobillo izquierdo una herida contusa de bala de fusil recibida durante la batalla, permaneció en su puesto, asistiendo posteriormente a la retirada del Horcajo, en la que, cubriendo la retaguardia, sostuvo a una compañía del Regimiento de la Princesa que el enemigo había puesto en peligro. Por todo ello fue recompensado con la Cruz de San Fernando de 2.ª Clase, Laureada. Posteriormente tomó parte en la toma de Linares de Mora (Teruel), el 22 de septiembre, en la que persiguió hasta entrada la noche a tres batallones carlistas que se hallaban en el pueblo, cargando varias veces a los grupos dispersos y resultando herido de bala en el muslo izquierdo, recibiendo en premio una segunda Cruz de San Fernando de 1.ª Clase.

Una vez restablecido de la herida, concurrió en 1838 a las acciones de Allo y Dicastillo, y Biurrun, en la que por su destacado comportamiento fue recompensado con el grado de comandante.

En 1839 estuvo presente en el sitio y toma de los fuertes de Ramales y Guardamino, ganando en esta acción el empleo de mayor de batallón, participando más tarde en las de Villarreal de Álava, San Antonio de Urquiola y Urdax, mereciendo en ellas una tercera Cruz de San Fernando de 1.ª Clase.

En 1840 se le concedió el empleo de comandante de Infantería y pasó destinado al Regimiento de la Princesa, con el que se halló en los sitios del fuerte de Castellote y Morella, y en la toma de Berga. Antes de finalizar el año fue trasladado a la Secretaría del Ministerio de la Guerra.

Tras obtener en septiembre de 1841 el empleo de teniente coronel, se opuso a la sublevación del 7 de octubre en la plaza de Madrid, acompañando más tarde a Espartero a las provincias Vascongadas y Cataluña formando parte de la Sección de Campaña del Ministerio de la Guerra. En 1842 se le concedió el empleo de oficial cuarto segundo de dicho Ministerio y al año siguiente el de coronel de Infantería.

Intervino en operaciones en la provincia de Albacete en 1843, asistiendo al sitio de Sevilla con la citada Sección de Campaña, acompañando posteriormente al general Espartero al exilio a Inglaterra.

En 1844 fijó su residencia en México, donde rehusó entrar al servicio de aquella República. Amparándose en el Real Decreto de 17 de octubre de 1846, al año siguiente se trasladó a La Habana, donde embarcó hacia la Península, llegando a Cádiz en el mes de junio de 1848, manteniéndose en los años siguientes en las situaciones de cesante y de cuartel y siendo en julio de 1852 promovido a brigadier con antigüedad de julio de 1843.

En 1854 volvió a su destino en el Ministerio de la Guerra, pasando de nuevo a la situación de cesante dos años después, para en 1858 ser nombrado secretario de la Dirección General de la Guardia Civil, permaneciendo en este puesto los siguientes cuatro años.

En 1862 fue ascendido a mariscal de campo y nombrado segundo cabo de la Capitanía General de Filipinas, de donde regresó a la Península en 1864 debido a su mal estado de salud.

Nombrado comandante general de la 2.ª División del Ejército de Castilla la Nueva en 1866, se halló al año siguiente en los sucesos del 22 de junio, volviendo poco después a la situación de cuartel para restablecer su salud. Poseía las Grandes Cruces de San Hermenegildo (1866) e Isabel la Católica (1860).

 

Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. B-224.

J. L. Isabel Sánchez, Caballeros de la Real y Militar Orden de San Fernando. Infantería, t. I, Madrid, Ministerio de Defensa, 2001.

 

José Luis Isabel Sánchez