Lixalde (o Lexalde o Lijalde), Francisco de. ?, p. m. s. xvi – 14.IV.1577. Pagador general del ejército de Flandes.
Aunque es un personaje muy tratado en la historiografía sobre la revuelta de los Países Bajos, nunca se hace mención a su fecha de nacimiento o lugar de origen.
La primera referencia sobre su persona aparece acerca de su intervención en la Tesorería de Felipe II, en Inglaterra, entre 1555 y 1560, cuando se ocupaba, sobre todo, de los sueldos y pensiones del personal de la casa del rey de Inglaterra. Merced a estos servicios, se le concedió el oficio de contino de Castilla el 1 de mayo de 1557, que mantuvo hasta su fallecimiento, aunque dejó de cobrarlo desde 1560.
Durante su estancia en Inglaterra y los años posteriores, Lixalde fue estrechando lazos con el duque de Alba y su entorno, lo que le valió para que se le propusiera, el 27 de diciembre de 1566, como pagador general del ejército que iba a marchar hacia Flandes con el gran duque para aplacar la rebelión. Lixalde ejerció dicho oficio desde 1567 hasta su muerte, diez años después. Durante los primeros seis años, su posición de poder estuvo consolidada ya que se encontraba asociado a Albornoz, secretario del gobernador, consiguiendo todos sus objetivos, como el de forzar la renuncia a su puesto del veedor general del ejército Galíndez de Carvajal, comendador de la Magdalena, en abril de 1569. Ello le haría quedar exento de críticas que le pasaron factura posteriormente.
Esta posición de preeminencia se vio alterada a finales de 1573 cuando el duque de Alba tuvo que salir de Flandes, y Requesens llegó allí como nuevo gobernador.
Los partidarios del antiguo gobernador desaparecieron de la escena política y Lixalde se vio constantemente hostigado, ya que el nuevo gobernador intentó borrar las huellas del pasado más cercano y de todo lo referente al duque de Alba. El 29 de noviembre de ese año, Requesens pidió al pagador que cerrara las cuentas del gobierno anterior y abriera un cuaderno nuevo para llevar las de su gestión. Sin embargo, Lixalde se mostró incapaz de revisarlas y Requesens demandó personas de confianza para ejercer dicho oficio. Reclamó, asimismo, que se realizara una visita para conocer lo que había sucedido con la Hacienda durante el gobierno de Alba pero tal amenaza no se llevó finalmente a cabo. Eso permitió a Francisco de Lixalde no ser condenado hasta 1612, cuando hacía ya treinta y cinco años que había fallecido, momento en que sus herederos fueron obligados a pagar 13.000 ducados por irregularidades en las cuentas y por haberse quedado con parte de la limosna para los hospitales que se deducía de las pagas de los soldados.
Fuentes y bibl.: Archivo de la Casa de Alba (Madrid), caja 41; Archivo General de Simancas, Contaduría Mayor de Cuentas, 2.ª época, legs. 1, 2, 4, 6, 9, 12, 14, 20, 25, 29, 31, 41, 44, 55, 63, 79, 88 143, 875 y 878; 3.ª época, legs. 941 y 3332; British Library, Additional, ms. 28366, fols. 127r.- 138v.
P. Génard, Les poursuites contre les fauteurs de la furie espagnole ou du sac d’Anvers de 1576, Amberes, Imprimerie J. Plasky, 1880, págs. 6-21; F. Rachfal, Le registre de Franciscus Lixaldius, trésorier général de l’armée espagnole aux Pays-Bas de 1567-1576, Bruxelles, Kiessling et Cie., 1902; A. W. Lovett, “Francisco de Lixalde: a Spanish Paymaster in the Netherlands (1567-1577)”, en Tijdschrift voor Geschiedenis, LXXXIV (1971), págs. 14-23; G. Parker, “Corrupción e imperialismo en los Países Bajos españoles: el caso de Francisco de Lixalde, 1567-1612”, en España y los Países Bajos, 1559-1659, Madrid, Rialp, 1986, págs. 205-221; J. Martínez Millán y S. Fernández Conti (dirs.), La monarquía de Felipe II: la Casa del rey, vol. II, Madrid, Fundación Mapfre-Tavera, 2005, pág. 251.
José Eloy Hortal Muñoz
