Lozano Bacaicoa, Jesús. Logroño, 14.VI.1912 – 17.IX.2002. Pintor, cartelista.
Formado como pintor en la Escuela Superior de Pintura, Escultura y Grabado de San Fernando de Madrid entre 1930 y 1934, donde recibió enseñanzas de profesores consagrados en el mundo del arte, como los pintores Daniel Vázquez Díaz, Aurelio Arteta y Errasti y Manuel Benedito Vives o el grabador y dibujante Francisco Esteve Botey, entre otros. Durante su estancia en la Escuela participó en la exposición de la Asociación de Alumnos de Bellas Artes (1933) y en el Certamen de Pintura del Ministerio de Instrucción Pública (1934).
Al finalizar sus estudios en Madrid y tras realizar el servicio militar en Getafe, se trasladó a Arévalo (Ávila), donde trabajó durante un año como profesor de Dibujo en el instituto de dicha localidad.
Con su amigo y pariente el escultor Alejandro Rubio Dalmati, realizó en 1935 su primera exposición en Logroño en el salón de actos de la Escuela de Artes y Oficios de Logroño. Un año más tarde participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes en Madrid, a la que acudió con dos obras, un Retrato al óleo y un aguafuerte titulado El puente de San Martín de Toledo, que fueron expuestas en el Palacio de Exposiciones del Retiro. Después de esta fecha, Lozano abandonó definitivamente la técnica del grabado.
Durante la Guerra Civil, se asoció en la Alianza de Intelectuales Antifascistas, donde conoció a León Felipe, Wenceslao Fernández Flórez y María Teresa León, compañera de Rafael Alberti, entre otros. También colaboró con el Ministerio de Propaganda de la República, realizando carteles y fotomontajes con la información que llegaba del frente.
Tras el asedio a Madrid, el Ministerio se trasladó a Valencia y con él Jesús Lozano, que siguió trabajando como cartelista, al tiempo que realizaba retratos por encargo. Ante la inminente creación del periódico Sur, fue enviado a Úbeda y luego a Jaén, donde colaboró en la ilustración del citado diario en los últimos meses de la contienda.
Regresó a Logroño finalizada la guerra y comenzó a trabajar en el negocio familiar, actividad que compaginó durante catorce años con la de profesor en las clases nocturnas de Dibujo Artístico de la Escuela de Artes y Oficios de Logroño.
Durante la posguerra comenzó a pintar cuadros de flores, de gran demanda en el momento, para la galería Cano de Madrid, situada en la carrera de San Jerónimo. Empezó a labrarse un nombre en el panorama artístico regional y su fama de buen retratista le llevó a recibir un importante número de encargos tanto de particulares como de instituciones. En 1940, por iniciativa municipal, pintó a D. Antonio Sagastuy Olarte, concejal del Ayuntamiento de Logroño desde septiembre de 1936 hasta su fallecimiento el 9 de octubre de ese mismo año.
En el verano de 1944, buscando un nuevo motivo de inspiración, se trasladó a Ansó (Huesca). También viajó a Cataluña invitado por el pintor Jaime Masip y expuso en la galería Syra de Barcelona, dando a conocer al público catalán alguno de los lienzos pintados en Huesca (Hilandera Ansotana), sus paisajes (Paisaje de Islallana) y sus afamados lienzos de flores.
En 1946 se casó con Carmina, que falleció en 1960 dejándole solo a cargo de sus seis hijos. Cuatro años después contrajo matrimonio con Josefina, con quien tuvo tres hijas más. Su trabajo como empresario y la atención a su numerosa familia no le impidió, aunque con altibajos, continuar con su gran vocación. Expuso en el Salón Arte de Bilbao (1944 y 1946), en el Círculo Cultural Guipuzcoano de San Sebastián (1949), Sala Rivas de Logroño (1949) y en el Portalón de Vitoria (1955), entre otros; asistió a la Bienal de Pintura de Barcelona (1952) y fue jurado en diversos certámenes.
Entre 1970 y 1974 abandonó los pinceles, retomando plenamente el oficio de pintor tras su jubilación.
Sin abandonar el mundo del paisaje y el bodegón, comenzó a plasmar en sus lienzos escenas infantiles, siendo fuente de inspiración sus hijas y sus pequeños nietos. En 1976, tras años de ausencia en el mundo de la pintura, realizó una exposición en Logroño, en el Instituto de Estudios Riojanos, y en 1979 volvió a Madrid con una muestra en la Sala Goya del Círculo de Bellas Artes de Madrid. En 1984 acudió al Salón de las Naciones de París, que se celebró en el Centro Nacional de Arte Contemporáneo, donde expusieron también Jesús Infante y Enrique Blanco Lac. Invitado por la embajada española de Londres en 1992, colgó en el Spanish Institute of London, una treintena de obras: bodegones, retratos, paisajes de todas las épocas y los últimos desnudos. Ese mismo año colaboró con la Comunidad Autónoma de La Rioja prestando tres óleos para decorar el pabellón riojano de la Expo-92 de Sevilla.
Su andadura como pintor se vio gratamente recompensada con la imposición de la Medalla de Oro de La Rioja en 1993 y con la entrega del Mazacote de Oro del Ayuntamiento de Alberite en 1996.
Obras de ~: Mi abuela, 1933; Modelo de escuela, 1934; Retrato de D. Francisco Zuazo Quintanilla, 1934; El puente de San Martín de Toledo, 1935; Retrato de D. Antonio Sagastuy Olarte, 1940; Cenicero (La Rioja), 1940, Naturaleza muerta, c. 1943; Hilandera Ansotana, 1944; Autorretrato, 1946; Mi madre, 1948; Capea en Clavijo (La Rioja), 1958; Tierras de Soria, 1961, Tierras de Ayllón (Segovia), 1964; Leza de Río Leza (La Rioja), 1976; Nietas, 1987; Montes de Aguilar del Río Alhama (La Rioja), 1990.
Bibl.: Catálogo de la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1936, Madrid, Blass, 1936, págs. 37 y 65; L. Cerrillo Rubio e I. Cerrillo Rubio, “Arquitectura, escultura y pintura de los siglos xix y xx en La Rioja”, en Historia de La Rioja, vol. III, Logroño, Caja de Ahorros de La Rioja, 1983, págs. 340-357; I. Gil-Díez Usandizaga, Las artes plásticas en La Rioja (1939-1980), Logroño, Instituto de Estudios Riojanos, 1990, págs. 48-55 y 86-89; VV. AA., Personas y personajes: 150 aniversario del Instituto de Bachillerato “Práxedes Mateo Sagasta”, Logroño, Instituto de Bachillerato Práxedes Mateo Sagasta, 1994, págs. 169-170; J. L. Labandíbar García, El arte en La Rioja, 1950-1985, Logroño, Consejería de Cultura, Deportes y Juventud, 1994, ts. I y II, págs. 367-371; M. C. Navarro Bretón, Jesús Lozano, antológica, Logroño, Cultural Rioja- Ibercaja, 1996; VV. AA., Arte Riojano para el 2000. La Rioja como paisaje, Logroño, Cultural Rioja, 1998, págs. 21-26.
María Cruz Navarro Bretón
