Aguerre, José de. Pamplona (Navarra), f. s. xvi – c. 1650. Alcalde de la Real Corte Mayor de Navarra y oidor del Consejo Real de Navarra.
Miembro de uno de los principales linajes navarros, cuyo palacio y solar está en Donamaría, dentro del partido judicial de Pamplona, que pasó a Gaztelú. De ambos lugares proceden las distintas ramas de este apellido.
Fue alcalde de la Real Corte Mayor navarra desde el 26 de enero de 1627 —en que sustituyó a Juan de Lizarazu— hasta el 22 de febrero de 1633, en que pasó al Consejo y fue sustituido en la Corte Mayor por Juan Donguillén. Contrajo matrimonio con Catalina de Ibero, hija del también oidor del Consejo Juan de Ibero.
Su nombramiento como oidor del Consejo Real de Navarra, por muerte de Bernardino Cruzat, está fechado el 24 de enero de 1633. Fue uno de los afectados por las censuras y excomunión dictada en 1636 por el obispo al virrey, al regente y a varios consejeros y alcaldes de Corte. El motivo sería la controversia suscitada al haber incensado antes al obispo que a las autoridades civiles en las vísperas del Corpus.
Tuvo una actuación destacada durante los conflictivos años de 1637-1638. En las Cortes reunidas en 1637, entró en la sala para pedir, en nombre del Rey, un servicio de hombres y dinero, requiriendo varias veces dos mil hombres y todas las rentas que se pudieran recaudar. Navarra lo concedió, aunque después de muchos problemas, y fue el encargado de reclutar a la gente para formar el tercio, ya que los navarros no podían ser obligados a luchar, salvo en caso de ver invadido el territorio foral. También se encargó de recaudar los donativos en metálico aportados por los pueblos. Peticiones similares presentó durante las Cortes de 1644, reiteradas en 1646, en las que fue consultor del virrey.
Tras pasar catorce años de su vida en este cargo, se jubiló en 1647, al otorgarle el Monarca una pensión eclesiástica y doscientos ducados, siendo sustituido por Martín Martínez de Daoíz el 30 de junio. No obstante, su jubilación no pudo hacerse efectiva hasta unos meses más tarde, ya que se le requirió para que votase los pleitos que había juzgado pero que estaban aún pendientes de sentencia.
Dejó unos Apuntamientos relativos al ceremonial que debía seguir el Consejo en las celebraciones de acontecimientos reales, cortes generales del reino, nombramientos de virreyes, regentes y ministros, etc., que en 1669 sirvió de base para un ceremonial que se encomendó al oidor Esteban Fermín de Marichalar.
Su hijo Luis ocupó plaza de oidor navarro entre 1687 y 1709. De este modo, tres generaciones ejercieron de jueces en el Alto Tribunal a lo largo del siglo xvii.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Navarra, Mercedes Reales, lib. 23, fols. 205r. y 215r.; lib. 27, fols. 147r. y 180r.; Actas de Cortes, t. II, fols. 250v., 253r., 256r. y 276r.; t. III, fols. 7r. y 80r.; Vínculo, leg. 1, carp. 47; Actas de Diputación, lib. 3, fols. 179v. y 180-180v.; Tribunales Reales, Archivo Secreto, tít. 1, fajo 1, n.º 43; tít. 10, fajo 1, n.º 16; secc. Tribunales Reales, subsección tercera, Libros de Gobierno y Administración, Autos Acordados, lib. 41, fol. 256r.; Archivo Histórico Nacional, Estado, lib. 66, fols. 64r., 183r. y 185r.
J. Goñi Gaztambide, Historia de los Obispos de Pamplona, vol. V, Pamplona, Eunsa-Gobierno de Navarra, Institución Príncipe de Viana, 1987, pág. 467; J. M.ª Corella, “Un altercado entre el virrey de Navarra y el Obispo de Pamplona en el año 1636”, en Pregón Siglo xxi (PSXXI), 20 (2002), págs. 9-14; M.ª D. Martínez Arce, “Los acontecimientos de 1636. Otros protagonistas del conflicto”, en Pregón PSXXI, 21 (2003), págs. 60-63; Aproximación a la Justicia en Navarra durante la Edad Moderna. Jueces del Consejo Real en el siglo xvii, Pamplona, Fecit, 2005, págs. 29, 82, 121, 123-124, 136, 158, 168, 172, 181, 194, 202, 203, 206 y 244.
María Dolores Martínez Arce
