Rodríguez González, José. Santa María de Bernés (Pontevedra), 25.X.1770 – Santiago de Compostela (La Coruña), 30.IX.1824. Matemático, geodesta, minerólogo.
Realizó sus primeros estudios en Monforte (Lugo), ingresando en 1787 en el Colegio de San Jerónimo, en la ciudad de Santiago. En 1790 obtuvo el grado de bachiller en Filosofía, continuando estudios de Teología.
Durante el curso 1798-1799 desempeñó la sustitución de la Cátedra de Matemáticas de la Facultad de Medicina, ganando dicha Cátedra por oposición en 1800. Entre 1801 y 1803 impartió la enseñanza desde su Cátedra al tiempo que estudiaba Botánica. Luego, habiendo solicitado permiso para ir a París, se trasladó a dicha ciudad, donde estudió Astronomía y Matemáticas en el Colegio de Francia, entablando relaciones con algunos científicos como Jean-Baptiste Biot, Laplace, Delambre y Arago. Probablemente el trato con estos autores despertó sus intereses por la geodesia.
En agosto de 1806 el Gobierno español le nombró, junto a José Chaix, comisario de las operaciones de la medida del arco de meridiano, a fin de que acompañase y ayudase a los comisarios franceses Jean-Baptiste Biot y François Arago. El objeto de estas operaciones era prolongar la medida, realizada por Pierre-François-André Mechain y Jean-Baptiste Joseph Delambre, del arco comprendido entre Dunkerke y Barcelona hasta la isla de Formentera.
En el nuevo proyecto de triangulación se incluyó el vértice Mola en la isla de Formentera, así como el denominado Camp Vell en la de Ibiza, este último en sustitución del proyectado por Mechain. Rodríguez quedó encargado del proyector instalado en Camp Vell. En marzo de 1807 Arago y Biot viajaron a Ibiza para encontrarse con Rodríguez y continuar las observaciones en el vértice Camp Vell. Rodríguez se trasladó a la isla de Formentera y dirigió la construcción del vértice Mola. Por primera vez se midió un gran triángulo geodésico sobre el mar.
La empresa se terminó en mayo de 1808, y “las circunstancias políticas no permitieron operaciones subsiguientes, como medio de comprobar los resultados, por la medición de una base que fuese independiente de la obtenida en Francia”, según observa el propio Rodríguez (Observaciones sobre la medición). Al parecer Rodríguez redactó un informe que se ha perdido.
En 1809 Rodríguez obtuvo un nuevo encargo del Gobierno español para que examinara en Inglaterra “los Establecimientos Científicos de aquella nación y en particular los destinados a la práctica y enseñanza de la Astronomía, y sus aplicaciones a la Geografía y Navegación”. Durante su estancia en Londres presentó la comunicación Observations on the measurement of three degrees of the Meridian, conducted in England by Lieutenant Colonel William Mudge, que fue leída ante la Royal Society por José de Mendoza y Ríos el 4 de junio de 1812.
Al final de dicho trabajo incluyó Rodríguez una nota, en la que puso en cuestión la pretendida asimetría del elipsoide terrestre a ambos lados de su ecuador, que había defendido, al menos indirectamente, el francés Lacaille como resultado de sus mediciones en Ciudad del Cabo, realizadas durante su viaje al cabo de Buena Esperanza a mediados del siglo XVIII. A mediados de este último año regresó a Galicia, reintegrándose a su cátedra. Enseñó Matemáticas Sublimes hasta 1814. Este año solicitó y obtuvo licencia para viajar a Alemania a perfeccionar sus conocimientos de Ciencias Naturales, especialmente Mineralogía. Residiendo en Alemania entabló relación, al parecer, con Abraham Gottlob Werner, iniciando probablemente entonces sus colecciones mineralógicas. Más tarde, en 1817, se trasladó a París, también en comisión de servicio, para completar su formación geológica allí y en Italia. En París conoció a René-Just Haüy, uno de los fundadores de la cristalografía, quien le regaló una colección formada por 1024 modelos representativos de todas las derivaciones posibles de los tipos cristalográficos.
Esta colección, años después de la muerte de Rodríguez, fue a parar a la Universidad de Santiago, siendo estudiada entre 1872 y 1874 por Augusto González de Linares y Laureano Calderón Arana. Durante su estancia en la capital francesa, Rodríguez González fue invitado a dirigir el Depósito Geográfico de Rusia, invitación que rechazó, trasladándose a Madrid para ocupar el cargo de profesor de Astronomía del Observatorio de esta ciudad, dependiente entonces del Museo de Ciencias Naturales, encomendándosele a la vez la reorganización de dicho Observatorio. De ideología liberal, durante el período 1821-1823 Rodríguez fue diputado a Cortes por Galicia, viéndose obligado en 1824 a exiliarse a Portugal, regresando este mismo año finalmente a Galicia, donde murió.
Aparte de algunos almanaques elaborados durante el período en el que fue profesor del Observatorio de Madrid, la única obra impresa de Rodríguez que se conoce es la comunicación arriba citada, Observations on the measurement [...]. El objeto principal de este trabajo es analizar los resultados obtenidos por William Mudge en la medición del arco de meridiano comprendido entre Clifton y Dunnose (Inglaterra).
Rodríguez, con los datos publicados por Mudge y empleando el método y las fórmulas de Jean-Baptiste Joseph Delambre, realizó de nuevo todos los cálculos, poniendo de relieve los errores de observación cometidos por el geodesta inglés —en particular los relativos a la latitud de la estación intermedia situada en Arbuny-Hill— y, de este modo, lo equivocado de las conclusiones de dicho autor acerca de la forma del arco de meridiano. El error denunciado por Rodríguez desató la polémica en la comunidad científica inglesa. Las líneas maestras de la solución del problema no llegarían hasta el siglo XIX, con las novedosas ideas de Gauss y la consideración de una nueva superficie de referencia: el geoide, y a sustituir el método de los arcos por el de las áreas al estudiar la figura de la Tierra. Por ello, las coordenadas de Aubry, deducidas por Rodríguez o Delambre eran geodésicas y en consecuencia no coincidir con las astronómicas.
En la misma memoria, Rodríguez, valiéndose de otras mediciones realizadas por diversos autores, efectuó varias comprobaciones de la forma de la tierra, descubriendo en particular el error de 200 toesas para el grado de paralelo cometido por William Lambton a partir de sus trabajos geodésicos en la India. Delambre, en la Connaisance des Temps para 1816 (1813: 256), publicó un extracto de la comunicación de Rodríguez y en su obra Grandeur et Figure de la Yerre (1912) dice, a propósito de las críticas del autor español a Lambton: “Pero Rodríguez dice haber hallado 200 toesas de error en esta medida, o en este número.
Efectivamente, con esta corrección (P=57094 toesas, M=56763 toesas) hallamos 1:328,31 que se aproxima mucho a las ideas hoy extendidas” (P significa la longitud lineal de un arco de paralelo y M la de uno de meridiano, ambos de un grado, y a la latitud norte de 12º 32’ 37’’). Otros autores, como Franz Xaver von Zach comentaron el trabajo de Rodríguez, conviniendo en lo justo de sus conclusiones.
Obras de ~: “Observations on the measurement of three degrees of the Meridian, conducted in England by Lieutenant Colonel William Mudge”, en Philosophical Transactions (4 de junio de 1812) (vers. esp. R. M. Aller, Memoria de Rodríguez que se conserva en la Universidad de Santiago y que, según Aller, coincide exactamente con la comunicación a la Royal Society).
Bibl.: R. M. Aller, “D. José Rodríguez Gonzáles (O matemático de Bernés)”, en Arquivos Seminario Estudios Galegos, 3 (1929), págs. 15-95; J. R. Carracido, “La cristalografía en España”, en Estudios histórico-críticos de la ciencia española, Madrid, 1917 (2.ª ed.), págs. 265-278; A. Echarri, “Desarrollo de las matemáticas y la física en España durante el siglo XVIII y algunas causas de la decadencia en el siglo XIX: correcciones a algunos tópicos totalitarios”, en Comunicación a la 12ª Reunión Anual de Matemáticos Españoles, Málaga, Universidad, 21-24 de abril de 1976 (ms.); V. Navarro, “José Rodríguez González”, en J. M. López Piñero, T. F. Glick, V. Navarro Brotóns y E. Portela Marco, Diccionario Histórico de la Ciencia Moderna en España, Barcelona, Península, 1983, págs. 249-251, 2 vols.; A. Ten, Medir el Metro, Valencia, Universidad, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Instituto de Estudios Documentales e Históricos sobre la Ciencia, 1996; M. Ruiz Morales y M. Ruiz Bustos, “Los trabajos geodésicos de D. José Rodríguez González”, en Topografía y Cartografía, 17 (2000), n.º 96, págs. 2-13, y n.º 97, págs. 6-21.
Víctor Navarro Brotons