Ayuda

Vicente Jimeno y Carrá

Biografía

Jimeno y Carrá, Vicente. Madrid, 18.I.1796 – ?, 5.XI.1857. Pintor.

Hijo del también pintor José Antonio Jimeno y de María Carrá, y hermano del grabador Laureano. Comenzó sus estudios de pintura bajo la dirección de Mariano Salvador Maella y luego con Vicente López Portaña. Alumno de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid desde el año 1811, en 1812 fue uno de los ganadores del concurso abierto por el Ayuntamiento de la capital para los discípulos de la Academia con motivo de celebrar “el augusto nombre de S. M.”.

Su etapa de formación como pensionado del Rey corrió paralela a la del también pintor Inocencio Borghini Pectorelli. Y la relación de ambos con la Academia fue muy parecida: en 1821 el Ministerio de la Gobernación le pidió que informase sobre el sistema seguido en las pensiones para el extranjero y sobre quiénes las disfrutaban en el momento. La respuesta fue que no eran vitalicias, ni las concedidas por el Rey ni las de la Academia, y que sólo de manera extraoficial se sabía que en Italia estaban pensionados por el Monarca los pintores Inocencio Borghini y Vicente Jimeno, ambos discípulos del taller del pintor de cámara Vicente López. Se explicó además que en 1819 ambos habían solicitado del Rey una pensión para Roma, y que Vicente López facilitó informes favorables, pidiendo que se les eximiera de las pruebas de rigor dadas sus cualidades especiales (es decir, que los pensionara extraordinariamente). Por tanto, se sabe que Jimeno y Borghini gozaron de una pensión para estudiar en el taller de Vicente López a cuenta de la Mayordomía Mayor, al igual que los demás de su estudio particular, pero puesto que la pensión para Roma no podía salir de este fondo, el Rey les había concedido en 1819 una pensión de 6.000 reales anuales a cargo del Ministerio Plenipotenciario en Roma.

Posteriormente, a mediados de 1822, ambos pintores recibieron una notificación del encargado de negocios en Roma, José Narciso Aparici, comunicándoles de Real Orden que dejarían de percibir su pensión por dicho Negociado, y que la tendrían que reclamar del Ministerio de la Gobernación. Cuando lo hicieron, el Rey pidió de nuevo informes a la Academia y ésta respondió que no se había contado con ella al pensionarles, que en los más de tres años que llevaban en Roma no habían remitido ni una sola obra que permitiera juzgar sus progresos, y que en consecuencia nada tenían que informar.

En su estancia en Roma pintó un Edipo, que fue objeto de una crítica impresa laudatoria en 1828; y además un cuadro que dejó sin concluir que representa La vuelta de la caza, tema que luego repitió a menor escala en España por encargo del conde de Tepa. En 1830 se acordó aconsejar a Vicente Jimeno que regresase ya a España (dándole un plazo de cuatro meses para volver y una ayuda para el viaje). En 1832, y tras trece años de ausencia, el encargado de los Negocios en Roma opinaba que “tiene mucho genio para la pintura, y que considera que será muy útil en el Museo [Real de Madrid]”, pero no podía volver porque se le debían varios meses de la pensión y no le era posible organizar el viaje. Pero regresó a finales de 1836, y en 1837 solicitó de la Academia el título de académico de mérito, esgrimiendo como justificación principal el haber estado diecisiete años pensionado en Roma, y como no pudo mostrar ningún cuadro de su autoría se ofreció a realizarlo para la ocasión.

Con este motivo la Academia pidió poder examinar las obras suyas que existían en el Palacio Real, por lo que desde la Mayordomía Mayor de S. M. se dio la orden para que José Madrazo y Juan Antonio Ribera lo hicieran en su nombre. Allí examinaron el que pintó para el Rey titulado Los hermanos Etéocle y Polinice tenidos muertos en el campo de batalla, cerca de los muros de Thebas, por el que le consideraron acreedor al título de académico de mérito por la pintura de historia, que se le concedió en 1838. En 1840 pidió se le tuviera en cuenta para ocupar alguna plaza vacante de profesor, por lo que en 1843 fue nombrado ayudante del Estudio de Dibujo que la Academia mantuvo en la calle de Fuencarral, por fallecimiento de Luis Sempere, a quien venía sustituyendo por enfermedad desde 1840. En la exposición que celebró la Academia en el año 1842 estuvo presente con el cuadro titulado La destrucción de Numancia. En 1847 fue elegido para cubrir la plaza vacante de académico de número producida por fallecimiento de Benito Sáez. En 1856 fue nombrado pintor de cámara del duque de Parma. Y en 1857 profesor de Anatomía de los estudios elementales de Dibujo de la Escuela Especial de Pintura, Escultura y Grabado. Para el conde de Tepa realizó los siguientes cuadros: El descanso en Egipto, Homero contando su vida, dos asuntos de La Iliada, y el retrato del conde. El conde de Isla le encargó Bacantes guardando el sueño de Venus, y un retrato suyo. La Reina Gobernadora adquirió en 1838 un asunto heroico. Para la duquesa de Montpensier pintó La resurrección del hijo de la viuda. Además ejecutó una Trinidad, una Concepción, un San Rafael conduciendo a Tobías, y numerosos retratos, como el del marqués del Arco.

Su producción como dibujante y grabador se reflejó en La Iliada, y el poema Pelayo, además de orlas y documentos de crédito. Al temple ejecutó los techos de la casa del conde de Isla en donde representa La Virtud en medio de la Liberalidad y la Avaricia.

 

Obras de ~: Edipo, 1827; La vuelta de la caza, 1836; Los hermanos Etéocle y Polinice tenidos muertos en el campo de batalla, cerca de los muros de Thebas, 1837; La destrucción de Numancia, 1842; El descanso en Egipto; Homero contando su vida; Episodios de La Iliada; Retrato del conde de Tepa; Bacantes guardando el sueño de Venus; Retrato del conde de Isla; Asunto heroico; La resurrección del hijo de la viuda; La Trinidad; Inmaculada Concepción; San Rafael conduciendo a Tobías; Retrato del marqués del Arco; La Virtud en medio de la Liberalidad y la Avaricia.

 

Bibl.: M. Ossorio y Bernard, Galería biográfica de artistas españoles del siglo XIX, Madrid, Giner, 1975 (ed. facs. de la de 1884); E. Navarrete Martínez, La Academia de Bellas Artes de San Fernando y la Pintura en la primera mitad del siglo XIX, Madrid, Fundación Universitaria Española, 1999; J. L. Díez, Vicente López (1772-1850), Madrid, Fundación de Apoyo a la Historia del Arte Hispánico, 1999; E. Navarrete Martínez y M. P. García Sepúlveda, Relación de Miembros pertenecientes a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando.

 

Esperanza Navarrete Martínez