Valls Pascual, Isidro Esteban. Sallent (Barcelona), 1.III.1822 – Gerona, 11.IX.1877. Canónigo, archivero, obispo de Gerona, jurista, teólogo, conciliarista.
Era hijo de Sebastián Valls Vilaseca, que fue alcalde de Sallent en el trienio liberal y a la vez era coopropietario de una fábrica de hilados de algodón, y de Ignacia Pascual. Valls Pascual era sobrino del canónigo Isidre Valls Vilaseca, que orientó y marcó profundamente su formación intelectual y su vida eclesial.
Valls Pascual, durante tres cursos académicos, 1837-1838, 1838-1839 y 1839-1840, hizo estudios de Filosofía en la Universidad de Barcelona. Cursó también Derecho, coincidiendo con su hermano José Esteban Valls Pascual, luego incorporado a la vida académica de la Universidad de Barcelona en calidad de docente de diversas materias entre ellas Derecho Natural y de Gentes y también Tratados y Relaciones Diplomáticas de España. Isidro Valls alcanzó el grado de bachiller en Jurisprudencia a claustro pleno el 4 de septiembre de 1844. Durante el año académico 1844-1845 superó el Derecho Político y la Economía Política y en el curso 1845-1846 terminó el séptimo año de la carrera de Jurisprudencia. Los ejercicios del grado de licenciado los llevó a cabo el 10 de julio de 1846 y el 13 de julio de 1846. En 1848 consiguió el grado de Regente de Religión y de Moral. Lograría con ulterioridad el grado de Bachiller en Filosofía, tras acreditar su formación académica filosófica precedente.
Sería ordenado presbítero. Pertrechado de su formación académica en sede universitaria, sus superiores vieron en él a un posible profesor del Seminario de Barcelona de diversas asignaturas, en particular de las relacionadas con el Derecho Canónico. En esa propia diócesis de la ciudad condal fue igualmente Fiscal del Tribunal Castrense y Defensor del Vínculo Matrimonial en el Tribunal Eclesiástico. Enseñó en la Escuela Normal de Barcelona Religión y Moral. Opositó con éxito a una canonjía de la catedral de Gerona, y el 28 de diciembre de 1854 fue nombrado arcipreste de la catedral de Lérida. En la diócesis ilerdense sería más tarde nombrado administrador diocesano y archivero de la catedral.
Estuvo en Roma con ocasión del Concilio Vaticano I, pero no sabemos en qué consistió su participación. Para algo debió de servirle su estancia romana pues fue preconizado obispo de Gerona el 17 de septiembre de 1875. Valls fue consagrado en la catedral de Barcelona el 9 de enero de 1876, tomando posesión oficial de la diócesis el 14 de enero. Intervino en la restauración económica de la diócesis en relación a medidas desamortizadoras y expropiatorias llevadas a cabo durante el sexenio liberal, haciendo las correspondientes reclamaciones patrimoniales al Estado con energía y se mantuvo al frente de su diócesis hasta su fallecimiento. Protestó, junto al resto de obispos catalanes, el vicario capitular de Solsona y el gobernador eclesiástico de Urgell, contra el proyecto del Ministerio de Fomento sobre la Instrucción Pública, en escrito dirigido tanto al Congreso de los Diputados como al Senado, ya que para Valls “la enseñanza, organizada conforme a las bases del proyecto, en las que se descarta paulatinamente el elemento católico, a proposición que se supone más ilustrada la inteligencia de los alumnos, podrá producir generaciones que tengan mayores o menores conocimientos científicos que la actual, pero no elevará nunca el nivel religioso de las mismas; condición esencialísima para que los pueblos progresen con paso seguro por las sendas de la verdad y de la justicia. Es preferible la ignorancia a la mala ciencia, ha dicho una persona tan poco sospechosa como Victor Hugo y para atajar estos dos males no hay otro antídoto que el de la ciencia ilustrada por la fe, que es la única y verdadera ciencia” (Boletín oficial eclesiástico del Obispado de Gerona, 16 de agosto de 1877, pág. 317).
Valls Pascual murió joven, con tan sólo 55 años, de una enfermedad aparentemente leve que le aquejó desde el 6 de septiembre de 1877, falleciendo cinco días más tarde. Fue enterrado el viernes 14 de septiembre de 1877 en la catedral de Gerona. En 1990 el obispo de Gerona Jaume Camprodon, refiriéndose a su persona, no dudaba en calificarlo como hombre afable, pero a la vez “enérgico a la hora de urgir el cumplimiento de los deberes, reivindicador con exquisito tacto de los derechos de la Iglesia, trabajador y persona de costumbres austeras”.
Valls dejó páginas escritas de Filosofía, Teología y Pastoral, que han permanecido inéditas. Por sus actividades históricas y archivísticas en Barcelona, Lérida y Gerona fue nombrado correspondiente de la Real Academia de la Historia.
Sallent, su ciudad natal, le dedicó una calle en 1917. Se conserva su casa natal, convertida en un centro cultural y a la vez de remembranzas institucionales de la organización corporativa municipal de Sallent antes de las reformas producidas por el Decreto de Nueva Planta de la Real Audiencia de Cataluña de 1716.
Bibl.: E. Romero González, “Isidre Valls i Pallerola (1859-1933) (sic), empresario y político catalán en la Restauración. Notas para su estudio”, en Annals of the Archive of “Ferran Valls i Taberner’s Library”: Studies in the History of Political Thought, Political & Moral Philosophy, Business & Medical Ethics, Public Health and Juridical Literature (Barcelona), 3-4 (1989), págs. 309-317; C. Serrano, Historia de los Valls: Una familia catalana de juristas, catedráticos, empresarios, políticos, banqueros y eclesiásticos. (Dos siglos de derecho, finanzas y política de la Cataluña contemporánea), Málaga, Universidad de Málaga, 1994, passim, especialmente págs. 46-54; M. J. Peláez, “Isidre Esteve Rudesindi Valls Pascual (1822-1877)”, en Diccionario crítico de juristas españoles, portugueses y latinoamericanos (hispánicos, brasileños, quebequenses y restantes francófonos), vol. II, tomo I, Zaragoza-Barcelona, Universidad de Málaga, 2006, págs. 627-628, n.º 1170.
Manuel J. Peláez Albendea
