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José de Cistué y Coll

Biografía

Cistué y Coll, José de. Barón de la Menglana (II). Estadilla (Huesca), 27.XII.1725 – Zaragoza, 1.I.1808. Fiscal de Quito y de Guatemala, alcalde del Crimen de México, oidor de México, fiscal del Consejo de Indias (Perú), cámara del Consejo de Indias.

Hijo de Francisco Antonio Atilano de Cistué y Ejea, señor de Estadilla y natural de esa población, y de Rosa Coll y Chía de Calasanz. Sus abuelos paternos fueron José Cistué y Puyuelo de Estadilla y Antonia de Ejea y Ejea de Fonz. Sus abuelos maternos fueron Nicolás Coll y Viverón de Calafanz y Gerónima Chía y Balafanz de Capella. Su hermano mayor, Pedro, primer barón de la Menglana, también fue abogado y sirvió como su apoderado. José Cistué sucedió a su hermano en este título. Su única hermana, María Antonia, se casó con Antonio Mozarbe.

Cistué tenía diecinueve años de estudios mayores en 1753: tres en Filosofía por la Universidad de Zaragoza y los otros en jurisprudencia civil y canónica por la Universidad de Huesca. En ésta pasó catorce años como colegial en el Mayor de San Vicente Mártir, donde fue rector. Recibió los grados de bachiller en Leyes en 1745 y Cánones en 1746 por Huesca, y eventualmente un doctorado. Cistué sirvió la cátedra de Decretos en 1746, la cátedra de Vísperas de Cánones en 1749, y de 1752 a 1754 la cátedra de Instituta en Huesca. También sirvió un turno como vicerrector de la Universidad. El obispo de Lérida lo nombró su vicario general y provisor.

En 1754 obtuvo un primer puesto y un segundo puesto por voto en una consulta para oidor en Santo Domingo; en 1756 recibió un tercer puesto para oidor en Guatemala, y luego de una Consulta de 27 de octubre de 1757 y Título de 4 de marzo de 1758, fue elegido para sustituir a Andrés de Morales como fiscal en la Audiencia de Quito. El 10 de noviembre de 1758 obtuvo licencia para viajar a Quito con sus criados Ramón Las Plazas, de Zaragoza, y Diego Galván, de Tudela. En Quito, Cistué se convirtió en padrino del marqués de Selva Alegre, quien fue un cabecilla de la conspiración y rebelión de 1809 en Quito.

La Corona mudó a Cistué a Guatemala como oidor en 1772 por su falta de popularidad con los plebeyos de Quito, después de introducir las nuevas rentas populares de la Corona, que causaron la sublevación de 1765. Aunque brevemente apoyó la opinión de la población que se oponía a los impuestos, poco después cambio de opinión y huyó a Latacunga. Por Decreto del 18 de enero y Título del 7 de febrero de 1773, el Rey lo nombró para reemplazar al difunto Felipe Romana como fiscal de Guatemala, puesto que sirvió hasta ser ascendido en sustitución de Juan Manuel González Bustillo como alcalde del Crimen en México por Consulta de 22 de mayo y Título de 21 de junio de 1775. Como fiscal, Cistué presentó en 1775 un plan sensato para reconstruir la nueva ciudad de Guatemala después del devastador terremoto de 1773. Él describió edificios que serían resistentes a temblores aun siendo lo más atractivo y funcional posible. Desafortunadamente, su plan no fue seguido detalladamente por los constructores. Cistué ascendió al nuevo puesto de oidor de México por Consulta del 29 de mayo de 1776. Nombrado fiscal de asuntos peruanos en el Consejo de Indias para sustituir al difunto Piña el 28 de octubre de 1777, asumió el puesto el 15 de junio de 1778. En 1782, Cistué fue admitido a la Orden de Carlos III, con pensión. El 26 de octubre de 1787 recibió un voto en la Cámara del Consejo de Indias cuando sus actividades como fiscal le permitieron participar. Sirvió en la Real Junta de Comercio, Moneda y Minas y se jubiló con el salario completo el 25 de septiembre de 1802, pero con la salud quebrantada. Murió en Zaragoza. El anuncio de su muerte en la Gazeta de Madrid concluía así: “La rectitud de su carácter, la pureza de sus costumbres y la dulzura de su trato hicieron que fuese respetado y amado en todas partes, y hacen ahora mui sensible su pérdida”.

Cistué recibió licencia en 1782 para casarse con María Josefa Martínez de Jiménez Pérez y Manrique de Lara, dama de honor a la futura reina María Luisa.

Tuvieron al menos tres hijos: Luis María, quien fue admitido en la Orden de Carlos III en 1802, luchó contra los francés en Zaragoza, luego fue oidor de la Audiencia de Valencia y, finalmente, maestre de campo bajo el reinado de Isabel II; José María, quien también luchó en Zaragoza y más tarde se casó con la hermana del marqués de Campo Sagrado, y Francisco.

Su hijo Luis sucedió con el título nobiliario.

 

Fuentes y bibl .: Archivo General de Indias (Sevilla), Quito 124, relación de méritos de 1755; México 1641, 1642; Guatemala 515, relación de 1753; 425; 503; Contratación 5501, n.º 2, ramo 21; Indiferente 870A, relación de 1773, 870B, 902, 865, 886, 1519; Archivo General de Simancas, Secc. XXIII, Dirección General del Tesoro, invent. 2, leg. 43, doc. 79; leg. 57, doc. 12; leg. 59, doc. 70; leg. 60, doc. 159; Invent. 13, leg. 8, docs. 80, 142; leg. 9, doc. 221; Archivo Histórico Nacional, Estado (Carlos III), expediente 130, pruebas de José de Cistué; Gazeta de Madrid, 16 de febrero de 1790, 11 de marzo de 1808.

 

V. de Cadenas y Vicent, Extracto de los expedientes de la Orden de Carlos 3.º 1771-1847, t. III, Madrid, Hidalguía, 1981, pág. 113; M. A. Burkholder y D. S. Chandler, Biographical Dictionary of Audiencia Ministers in the Americas, 1687-1821, Westport, Connecticut, Greenwood Press, 1982, págs. 88-89; M. A. Burkholder, Biographical Dictionary of Councilors of the Indies, 1717-1808, Westport, Connecticut, Greenwood Press, 1986, págs. 29-31.

 

Mark A. Burkholder