Burgos, Diego de. ?, p. s. XVI – c. 1570. Boticario de Felipe II.
Cuando en 1535 Carlos V establece la Casa del Príncipe para su hijo Felipe, nombra como boticario a Juan de Arigón y como ayuda al mismo a Diego de Burgos, ambos acompañarán al ya regente de España y de las Indias, en 1548, cuando el Emperador (en ese momento gravemente enfermo) ordena a su hijo acuda a la ciudad de Augsburgo. El itinerario discurrió por Italia, Alemania y Flandes y regresaron a España en 1551.
Al instalar Felipe II la Corte en Madrid, y su residencia y la de la Real Familia en el Alcázar, allí se ubicó la botica del Rey bajo la dirección de Juan de Arigón, asistido por su ayuda, Diego de Burgos; éste, casado con una hermana de Arigón, compra una casa y su huerto en las proximidades del Alcázar a espaldas del río Manzanares, junto a unos terrenos que se denominarían “huerto de la Priora”. En 1566, el Rey le compra la casa y el huerto por dos mil doscientos ducados concediéndole el usufructo vitalicio con la única condición de que plantase hierbas medicinales y alojase al maestro simplicista que se hiciera cargo del laboratorio de destilación de Madrid o a quien el Rey designase: “aposento della al doctor simplicista o a la persona que nos ordenaremos”.
Acatando la orden del Rey, el cuidado que Burgos da al huerto hizo que la casa fuese conocida como “casa del jardín”. De 1566 a 1570 fue Burgos el encargado de solicitar los destilados para la real botica y de recibirlos.
Cuando en 1567 la viuda de su inventor entrega al Rey un remedio denominado “aceyte de Aparaicio” y su fórmula, actúan de testigos Diego de Burgos, como boticario del Rey, y un médico de cámara.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Palacio (AGP), Cédulas Reales (CR), t. III, fols. 7-7v.º; Archivo General de Simancas (AGS). Casas y Sitios Reales (CSR) leg. 252:3, fols. 130-131; AGS. CSR. Leg. 252:4, fol. 5.
V. Gerard, De castillo a palacio. El Alcázar de Madrid en el siglo xvi, Bilbao, Xarait Ediciones, 1884; J. M. Barbeito, El Alcázar de Madrid, Madrid, Colegio Oficial de Arquitectos, 1992; M.ª M. Rey Bueno, Tradición y modernidad. La asistencia farmacéutica en la Corte española de los siglos xvi y xvii, tesis doctoral, Madrid, Universidad Complutense, 1999; M.ª M. Rey y M.ª E. Alegre, “Renovación en la terapéutica real: los destiladores de Su Majestad, maestros simplicistas y médicos herbolarios”, en ASCLEPIO, vol. LIII, fasc. 1 (2001); F. J. Puerto, La leyenda verde: naturaleza, sanidad y ciencia en la Corte de Felipe II (1527-1598), Valladolid, Doce Calles, 2003.
María Esther Alegre Pérez