Arigón, Rafael de. Bélgica, p. m. s. XVI – ?, f. s. XVI – p. s. XVII. Boticario del Real Servicio de Felipe II.
Este boticario, de origen flamenco, orientó su vida profesional en la dirección y explotación de una botica de su propiedad abierta en la Corte, para la que obtuvo la pertinente autorización. En ese tiempo no se consideraba incompatible, siendo boticario examinado, la titularidad del Real Servicio con tener intereses en una botica abierta al público, por eso en esta botica tenía una importante participación económica su hermano Juan, aunque el trabajo en ella lo realizaba exclusivamente Rafael de Arigón.
En 1543 se data el primer documento que liga a Rafael de Arigón con el Real Servicio a través de la contratación de su botica para que en ella se atendiera a los criados de la Casa del Regente.
Cuando en 1561 se instaura la Botica del Común se adjudica la titularidad de este servicio a la botica de Rafael de Arigón.
El año 1570, los reyes efectúan un viaje por Aragón y Cataluña, siendo Rafael de Arigón el encargado de acompañarles llevando como ayuda al boticario Bartolomé de Sejo. El buen funcionamiento de su oficina permitió que Arigón soportase los descubiertos que habitualmente mantenía la Real Hacienda con sus proveedores.
La actitud de este boticario fue la base para que, cuando en 1593 su hermano José solicita se haga toda la atención en medicamentos para el Real Servicio desde la botica de sus hermanos, el informe que la sumillería de Corps eleva al Rey se muestra favorable alegando “el caudal” que tenían sus hermanos.
Pese a esta fidelidad y exquisito servicio que realizó Arigón durante cuarenta y tres años, el solidarizarse en la defensa de los intereses económicos de las boticas madrileñas condujo a que en diciembre de 1594 se cancelara su contratación para el Real Servicio.
Bibl.: Archivo General de Simancas (AGS), Casas Reales, Junta de Obras y Bosques, leg. 280; Archivo General de Palacio, Exps. Personales, Caja 1341/9.
M. Rey Bueno, Tradición y modernidad. La asistencia farmacéutica en la Corte española en los siglos XVI y XVII, tesis doctoral, Madrid, 1999; M. E. Alegre Pérez, “Los orígenes de la Real Botica y sus actuaciones al servicio de los Austria”, en Arbor, n.º 665 (2001), págs. 242, 249.
María Esther Alegre Pérez
