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Joan Sans Balsells

Biografía

Sans Balsells, Joan. Robert de la Riba. La Riba (Tarragona), 5.II.1912 – Barcelona, 19.II.1999. Capuchino (OFMCap.), compositor y organista.

En 1922 inició sus estudios musicales en la Escolanía del Santuario de Nuestra Señora de Pompeya (Barcelona), bajo la dirección del organista y maestro de capilla Antoni Català; la profunda impresión que le causó la audición del órgano de Pompeya, construido por Pau Xuclà en 1910, despertó su vocación organística desde su infancia. Antoni Català lo condujo a iniciar los estudios de Piano con Carles Pellicer, en la Escola Municipal de Música de Barcelona.

A los doce años sintió la vocación de ingresar en la Orden de los frailes menores capuchinos de San Francisco, y en 1925 se trasladó a Igualada para iniciar los estudios religiosos en el Seminario Seráfico. Entre 1928 y 1929 estudió en el noviciado de Manresa y de allí se trasladó al Convento de Olot para cursar los estudios de Filosofía entre 1929 y 1931, hasta completar su formación eclesiástica con los estudios de Teología en el Convento de Sarrià (Barcelona), donde pasó a residir a partir de 1932. Allí recibió la ordenación sacerdotal, el 1 de noviembre de 1935, de manos del cardenal Francesc Vidal i Barraquer.

Cuando estalló la Guerra Civil Española, estudiaba Armonía con Jaume Pahissa en la Escuela Municipal de Música de Barcelona. En julio de 1937 pudo huir a Francia para dirigirse a Italia, donde completó sus estudios de Piano, Órgano y Composición con Alceo Galliera en el Conservatorio de Milán. En 1940 tuvo que regresar a Cataluña por causa de la Segunda Guerra Mundial. Se trasladó al Convento de Tarragona y, un año más tarde, al de Igualda, donde inició una estrecha colaboración musical con el compositor Joan Just. Entre 1940 y 1942 se desplazaba semanalmente a Barcelona para perfeccionarse en la composición con Joan Lamote de Grignion, y, posteriormente, con Joaquim Zamacois.

En 1942 inauguró el órgano del Santuario de Pompeya, restaurado después de la Guerra Civil. A partir de 1946 se instaló definitivamente en Barcelona, donde asumió los magisterios de capilla y del órgano del Santuario de Pompeya. Entre 1946 y 1969 estuvo al frente de la Escolanía y de la Capilla de Música del Santuario, donde llevó a cabo una gran labor pedagógica y musical, dedicándose intensamente a la composición con el fin de enriquecer los servicios musicales del santuario con obras pensadas para la escolanía, el coro, la orquesta y el órgano. Las “Audiciones Sacras” de la iglesia de Pompeya contaban con la presencia de destacados intérpretes, algunos de ellos formaban parte de la Orquesta Ciudad de Barcelona, y ocuparon un lugar destacado dentro de la vida musical de la Barcelona de la posguerra. De aquella época datan algunas de sus composiciones más célebres, como la Rapsòdia Nadalenca para coro y orquesta (estrenada bajo su batuta en el Palau de la Música Catalana), la Sinfonieta concertant, la serie de sardanas y una buena parte de sus obras para órgano, algunas de las cuales ya vieron la luz a través de la revista Tesoro Sacro Musical y de la colección Biblioteca Orgánica de la editora musical barcelonesa Boileau.

La popularidad concertística del padre Robert de la Riba aumentó con motivo de su presencia habitual en los ciclos de los “Conciertos populares” del Palau de la Música Catalana entre 1952 y 1956, donde, junto al repertorio organístico de Johann Sebastian Bach y de la escuela romántica francesa, ofrecía sus propias transcripciones de obras sinfónicas de Mozart, Beethoven, Mendelssohn, Strauss y Grofe, con el anhelo pedagógico de suscitar el interés por el órgano, un instrumento casi desconocido por el gran público.

A partir de la desaparición de la Capilla de Música del Santuario de Pompeya, en 1970, y hasta finales de la década de 1980, el padre Robert de la Riba vivió entregado a una intensa actividad concertística, tanto desde los teclados de su órgano barcelonés, con el que realizó innumerables conciertos, como desde los numerosos instrumentos que inauguró por toda España. Su labor concertística lo llevó a ofrecer conciertos en Alemania, Inglaterra, Italia, Francia, y en los países centroamericanos de Costa Rica, México y Nicaragua. Su perseverante y brillante dedicación a la divulgación del repertorio organístico de los siglos xvi al xx era vivida desde el espíritu de una profunda e íntegra religiosidad, que le llevó a huir de los circuitos de la competitividad concertística. Durante más de cuarenta años, gracias a sus conciertos semanales, convirtió la iglesia de Pompeya en el estandarte barcelonés de la música organística. En su extenso repertorio ocupaba un lugar primordial la obra de órgano de Johann Sebastian Bach, cuya opera omnia interpretó cuatro veces; también dio a conocer por primera vez al público barcelonés las obras completas de órgano de Mozart, Mendelssohn, Franck y Liszt.

La formación organística del padre Robert de la Riba aún pudo seguir bastante de cerca el modelo de la escuela francesa de Guilmant, Gigout, Widor, Boëlmann, Tournemire, Vierne y Dupré, todos ellos grandes intérpretes, improvisadores y compositores. El padre Roberto se ha erigido, al igual que ellos, en un intérprete excepcionalmente virtuosos, dotado para la libre improvisación en todos los estilos, capaz de improvisar en concierto una obra en forma de toccata, fantasía, fuga o variaciones. Sus obras para órgano están impregnadas de este virtuosismo y constituyen uno de los pocos testimonios compositivos españoles de música organística vinculados con el modelo francés, heredero de la tradición romántica de César Franck.

Manuel Valls situaba la figura del padre Robert dentro del grupo de la generación de la Guerra Civil; de hecho, pertenecía a la misma generación que Xavier Montsalvatge, sin embargo, en su obra compositiva se percibe con claridad el post-impresionismo de la música francesa y el nacionalismo enraizado en la tradición lírica catalana. Su legado compositivo —orquestal, liderístico, camerístico, coral y religioso— conservado en el Arxiu Musical dels Caputxins de Sarrià (Barcelona), irá ocupando, a medida que sea conocido, el lugar que merece dentro de la música española del siglo xx.

 

Obras de ~: Missa catalana para coro asamblea y órgano, Madrid, Unión Musical Española (UME), 1965; Dorm infantó (canción para voz y piano), Madrid, UME, 1965; Espines (canción para voz y piano), Madrid, UME, 1966; El cant dels ocells (canción para voz y piano), Madrid, UME, 1966; Música per a Orgue, Barcelona, Tritó, 2001.

 

Bibl.: M. Valls i Gorina, Història de la Música Catalana, Barcelona, Tàber, 1969; J. M. Gregori i Cifré, “Riba, Robert de la”, en E. Casares Rodicio (dir. y coord.), Diccionario de la música española e hispanoamericana, vol. IX, Madrid, Sociedad General de Autores y Editores, 2002, págs. 164-166; “Notes per a una semblança del pare Robert de la Riba, organista i compositor”, en Anuari de l’Orgue, III (2004).

 

Josep Maria Gregori i Cifré

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