Navarro, Miguel. Rubielos de Mora (Teruel), c. 1550 – ¿Rubielos de Mora (Teruel)?, 1620. Farmacéutico.
Boticario, hijo de un Miguel Navarro, también boticario en Rubielos de Mora, nació alrededor de 1550. En opinión de Colmeiro (1858), tuvo acreditada pericia en el conocimiento de yerbas y simples, hasta el extremo de servir al rey Felipe II en alguna ocasión; Nicolás Antonio (1783-1788) llegó a calificarlo como “pharmacopola Regius Philippi II”, aunque no quede constancia documental alguna que acredite su vinculación al servicio de la Real Casa.
Impulsó, desde 1590, la construcción de la iglesia parroquial de Rubielos de Mora, una iniciativa en la que ya habían participado su padre y su suegro. Fue terciario del Carmelo; propició la fundación del Convento de los carmelitas calzados instaurado en Rubielos de Mora, al que dotó, en escritura protocolizada por el notario Francisco Pérez, el 28 de junio de 1608, de las casas sobre las que éste se asentó. Para ese mismo convento, él y su mujer, Catalina Barberán, habían hecho, con fecha de 2 de diciembre de 1607, una donación de 2000 sueldos. Catalina Barberán falleció en Rubielos de Mora el 14 de enero de 1614; es muy probable que también su marido muriera en esta localidad turolense, a la que estuvo tan unido, quizás en el propio convento por él fundado.
Familiarmente vinculado, tanto él como su esposa, a Rubielos de Mora, no parece que residiera largas temporadas fuera de este lugar; resulta sin fundamento la consideración, reiteradamente repetida, de que la decisión de acercarse al Carmelo respondiera a su “cansancio” de la corte.
Nicolás Antonio (1788, vol. 2: 142-143) atribuyó a este boticario la redacción de unos In Ioannis Mesue Libros Commentaria, posiblemente manuscritos, de los que se han hecho eco los autores posteriores que han tratado su biografía. De ellos no se conoce más constancia que la reseña mencionada.
Bibl.: Letras narrativas del processo Petri Arascot et aliorum presentis civitatis Terulen [sis] et oppidi de Rábielos [...], s. l. [s. XVIII] (en archivo particular, Zaragoza); N. Antonio, Biblioteca Hispana nova sive Hispanorum scriptorum qui ab MDCLXXXIV floruere notitia [...], vol. II, Matriti, Joachinum de Ibarra, 1783-1788, págs. 142-143 (trad. de G. de Andrés y M. Matilla Martínez, Madrid, Fundación Universitaria Española, 1999); Q. Chiarlone y C. Mallaina, Ensayo sobre la Historia de la Farmacia, Madrid, Santiago Saunaque, 1847; M. Colmeiro, La Botánica y los botánicos de la Península hispano-lusitana. Estudios bibliográficos y biográficos, Madrid, Rivadeneyra, 1858; C. Mallaina, Historia histórico-crítica de Farmacia, Madrid, Tipografía del Hospicio, 1875; M. Gómez Uriel, Bibliotecas antigua y nueva de escritores aragoneses de Latassa aumentadas y refundidas en forma de diccionario bibliográfico- biográfico, Zaragoza, Calisto Ariño, 1884-1886; R. Roldán Guerrero, Diccionario biográfico y bibliográfico de autores farmacéuticos españoles, vol. III, Madrid, Gráficas Valera, 1975, págs. 504-505; J. Martínez Rondán, El templo parroquial de Rubielos de Mora y fiestas que se hicieron en su dedicación (1604-1620), Rubielos de Mora, 1980.
Antonio González Bueno
