Morales, Ascencio (o Ascensio). ?, ú. t. s. xvii – s. m. s. xviii. Abogado, oidor de la Audiencia de Sevilla, cronista de Badajoz.
Nada se conoce sobre su vida, su familia, ni el lugar y fecha de nacimiento y muerte, aparte de su papel crucial en uno de los mayores proyectos de documentación histórica realizado jamás en España, aunque hoy en gran parte está perdido.
Al objeto de reforzar la teoría regalista sostenida por España de cara a la renovación del convenio suscrito con Roma en 1723, Felipe V determinó respaldar su posición demostrando que todas las iglesias y conventos españoles debían su existencia a los Reyes, que desde la antigüedad habían impulsado su fundación y sostenimiento. Idea que sustentaba el derecho de la Corona a intervenir en el nombramiento de obispos y otros cargos eclesiales, y al control de los bienes de la Iglesia, al que Roma se oponía. Panorama en el que también se mezclaban otras cuestiones de gran interés para España por su repercusión en los litigios sobre la isla de Sacramento, misiones de Asunción en Paraguay o el problema de los jesuitas. Para el logro de sus propósitos el Monarca ordenó buscar en todos los archivos del Reino cuantos códices, bulas, crónicas y documentos pudieran apoyar el derecho de Patronato.
Un trabajo ímprobo que se prolongó entre 1743 y 1755, realizado por muy pocas personas.
Uno de los especialistas más cualificados de su tiempo en la cuestión del Patronato Real y las regalías, con experiencia ya demostrada en las negociaciones del concordato anterior, era el abogado Ascencio Morales. A fin de estimular su celo y proporcionarle los medios necesarios, fue nombrado oidor de la Audiencia de Sevilla con el sustancioso salario de setenta y cinco reales diarios. Morales recorrió España durante diez años investigando los archivos de Castilla, León, Asturias y Galicia, con atención especial a las diócesis de Palencia, Valladolid, León, Astorga, Santiago, Tuy, Orense, Oviedo, Burgos y las quince colegiatas de sus jurisdicciones. Mas cuando, concluido el enorme esfuerzo, se disponía a recibir la recompensa por su labor, murió su patrón y protector, Felipe V, lo que puso en peligro no sólo aquélla, sino hasta su cargo en Sevilla. Aunque tras un período de zozobra, el nuevo Monarca continuó la empresa, ordenándole seguir la tarea en los obispados de Cuenca, Murcia, Cartagena, Orihuela, Plasencia y Badajoz, ciudad ésta a la que llegó en 1753, y cuyo trabajo remató en un año con el título de Informe al rey D. Fernando sexto o Crisis histórica de la antigüedad y fundación de Badajoz y lugares de su obispado […], seguido de una extensa relación de contenidos, única documentación de cuantas recopiló que está publicada.
La obra, basada en los originales conservados en el archivo de la Catedral pacense de San Juan Bautista, y aparecida en 1908 con el título de Crisis Histórica de la Ciudad de Badajoz, constituye un corpus documental de extraordinario valor para el conocimiento de dicha ciudad.
Obras de ~: Informe al rey D. Fernando sexto o Crisis histórica de la antigüedad [...] (ed. con el tít., Crisis Histórica de la Ciudad de Badajoz, Badajoz, Tipografía Arqueros, 1908; ed. facs. de A. González Rodríguez, Badajoz, Ayuntamiento, 2006).
Bibl.: A. Rodríguez Moñino, “Ascensio de Morales. Cronista de Badajoz. Notas bibliográficas”, en Revista de Estudios Extremeños, vol. IV (1930), págs. 121-136; F. Rávago y Noriega, Correspondencia reservada e inédita del P. Francisco de Rávago, confesor de Fernando VI, introd. de C. Pérez Bustamante y est. prelim. de C. Pereyra, Madrid, Aguilar Editor, 1936; E. Rodríguez Amaya, “Inventario general de los Archivos de la S. I. Catedral y Ciudad de Badajoz, formado por don Ascensio Morales en 1753-54”, en Revista de Estudios Extremeños, t. VIII (1952), págs. 389-492; A. González Rodríguez, “Estudio Introductorio”, en A. de Morales, Crisis Histórica de la Ciudad de Badajoz, op. cit.
Alberto González Rodríguez