Domingo Alavedra, Xavier. Barcelona, 24.VI.1929 – 12.V.1996. Periodista, escritor y gastrónomo.
Xavier Domingo fue una personalidad de relieve en los círculos intelectuales del exilio parisino de las décadas de 1950 y 1960, en los tiempos políticamente turbulentos de la Ciudad Luz, en los que cristalizó aquel insólito brote revolucionario de mayo del 68.
Hijo de una familia de perdedores de la Guerra Civil, su padre fue encarcelado como fundador del Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), los comunistas catalanes, mientras su madre, Rosa Alavedra, directora de Radio Barcelona —precedente de la Cadena SER—, era extrañada por el régimen franquista y enviada a San Sebastián con sus hijos Xavier, entonces con diez años, y Eugenio.
Xavier había iniciado estudios en un noviciado de los jesuitas —ante el estupor y la oposición de su familia— para, más tarde, abandonarlo y dedicarse a su primera vocación artística: la de pintor. Se trasladó a Madrid, con diecisiete años, donde, además de pintar y vivir de la venta de sus cuadros, comenzó los estudios de Filosofía y Letras, y, en el Madrid antiguo, eligió deliberadamente como domicilio un piso en una calle de nombre significativo: Amnistía.
Asfixiado intelectualmente por el ambiente cultural de la época en Madrid y en España, en 1956 marcha a vivir a París. Un año más tarde, contrajo matrimonio civil —no reconocido en España—con una francesa, Annie Lacarte, con la que tuvo tres hijos: Bruno, Pablo y Laura. En París frecuentó los ambientes del exilio español, cuando la capital francesa era una fiesta de todos los refugiados políticos, exilios y frentes de liberación que en el mundo —especialmente el tercero— han sido, que coincidían y eclosionaban en su Rive Gauche, cuando París significaba toda una educación sentimental y política para el más ardoroso y juvenil gauchismo internacional. Allí compartió afanes y colaboraciones con la editorial Ruedo Ibérico del español —valenciano— José Martínez, en la que publicó diversas obras. También coincidió con gentes como Mario Vargas Llosa, antes con Gabriel García Márquez, con Bryce Echenique o los hermanos Semprún (el ex ministro Jorge y el escritor y periodista Carlos), entre otros muchos.
Trabajó como periodista para la agencia France Presse, en la que también encontraron alojamiento otros profesionales españoles —así, Juan Tomás de Salas, Ricardo Utrilla o Carmen Rico-Godoy, de los que fue amigo personal, figuras clave en la creación del Grupo 16— y a partir de 1971 fue corresponsal de la revista por antonomasia de la transición española, Cambio 16, donde escribió una columna gastronómica muy seguida, ilustrada por uno de sus pantagruélicos autorretratos realizados a plumilla.
Vitalista, epicúreo, heterodoxo, rebelde, erotómano, vividor, gastrónomo —como a él mismo le gustaba definirse—, viajero incansable, seguidor fervoroso del Barça, todo un “disfrutador”, como le etiquetaban cariñosamente sus amigos, Domingo, además del periodismo político, el ensayo, la novela, en los que dejó rastro y seña de su estilo apasionado y mordaz, cultivó con especial solvencia y éxito un género del que fue un pionero y un maestro, un auténtico virtuoso, un campo entonces aún poco seguido en España: el género gastronómico, desde su condición de gourmet, de gourmand, incluso de hábil e inspirado cocinero, de teórico y divulgador, hasta convertirse en uno de los escritores gastronómicos más importantes de España, de renombre internacional, todo un clásico de la especialidad, en la que dejó una brillante y copiosa bibliografía y numerosos artículos, conferencias y opúsculos. En esta rama, además de sus libros, llegó a dirigir una revista, de vida efímera, el Almanaque de los golosos y las guapas, editada por el Grupo 16.
Al comienzo de la transición y tras su regreso a España en 1977, se incorporó a Cambio 16 como periodista y columnista y como articulista en Diario 16.
Su unión como pareja de hecho con la periodista y escritora Lola Gavarrón, a partir de 1979, dio como fruto otra hija, Diana. No acabaron aquí sus peripecias conyugales. En 1990 se casó por primera vez por la ley española y por la Iglesia, en el monasterio de Poblet, con Carmen Rodés, que había sido su mano derecha como delegado de Cambio 16 en Cataluña.
Con la aparición de El Mundo en 1989, inició sus colaboraciones en este diario desde Cataluña, donde fue miembro del Consejo editorial de este periódico en su edición catalana.
Obtuvo numerosos premios, entre ellos el Paternina de Periodismo (en dos ocasiones), de la mano del conde de los Andes, otro eminente crítico y gastrónomo, por su defensa de la entonces emergente nueva cocina vasca, y el Tambor de Oro —concesión rodeada de polémica— de la ciudad de San Sebastián, por el mismo motivo. Falleció en Barcelona a consecuencia de una dolencia cardíaca.
Obras de ~: Villa Milo, Paris, Du Seuil, 1961; La rêve de la raison, Paris, Du Soleil, 1963; El dinero del Opus es nuestro, París, Ruedo Ibérico, 1971; La paella des gogos, Paris, Ballano, 1971; Erótica hispánica, París, Ruedo Ibérico, 1972; La viuda andaluza. Mamotreto ibérico, erótico y amatorio, París, Ruedo Ibérico, 1972; La cocina francesa en 16 recetas, Madrid, Cambio 16, 1976; Cuando sólo nos queda la comida, Madrid, Dédalo, 1980; La mesa del Buscón, Barcelona, Tusquets, 1981; Jabalí, Madrid, Miraguano Ediciones, 1983; De la olla al mole, Madrid, Ediciones Cultura Hispánica, 1983; El desnudo seductor. Cien años de erotismo gráfico en España, Madrid, Arnao Ediciones, 1988; Mil anys de gastronomía catalana, Barcelona, Generalitat de Cataluña, 1989; El sabor de España, Barcelona, Tusquets, 1992; Els jocs olimpics, Barcelona, Bareanova, 1992.
Bibl.: A. R.[amoneda], “Domingo, Xavier”, en R. Gullón (dir.), Diccionario de Literatura Española e Hispanoamericana, vol. I, Madrid, Alianza Editorial, 1993, pág. 460; J. Herralde, Por orden alfabético, Barcelona, Anagrama, 2006.
José Luis Gutiérrez
