Torres Fernández, José Luis. Jerez de la Frontera (Cádiz), 14.III.1901 – 28.VIII.1966. Maestro grabador y diseñador gráfico.
Jerez siempre gozó de fama, entre otras cosas, por sus muchos y buenos artistas en el gremio de la litografía y artes gráficas; no en vano, y debido a la demanda de etiquetas para las botellas de vino y carteles para publicitar éste, la industria litográfica está presente en la ciudad desde 1866, año en el que procedente de Málaga, un litógrafo llamado Manuel Hurtado de Mendoza se establece en la calle Arcos. Desde entonces una pléyade de magníficos artesanos en este campo se formará en la ciudad, llegándose a alcanzar cotas artísticas y de calidad muy notables. Otros destacados litógrafos como Francisco Rodríguez, Juan Barroso o Manuel Narváez contribuyeron también a ello ya en los albores de la siguiente centuria.
Pero los grandes maestros del diseño gráfico en el siglo XX fueron Teodoro Miciano y José Luis Torres, los cuales crearon una fecunda escuela, siendo ciertamente los responsables que en Jerez la litografía y las artes gráficas en general alcanzasen tan altas cotas de maestría que llegaran a situarse a la cabeza de España.
José Luis Torres nació en 1901 en la calle Catalanes, muy joven se casó con su prima Belén Montes Torres y juntos se marcharon a Madrid en busca de mejores horizontes. Allí se formó como autodidacta, desarrollando sus grandes cualidades innatas para la litografía, el dibujo publicitario y el diseño de carteles y etiquetas. Tras la Guerra Civil vuelve a Jerez y establece un taller en la plaza del Mamelón. En dicho taller se consagraría como uno de los mejores diseñadores de etiquetas para vinos, siendo muy demandado por la mayoría de las empresas bodegueras en una época de pleno apogeo de la industria vinícola jerezana. Sus diseños eran inconfundibles: orlas, blasones, escudos, armas, caballeros y símbolos medievales fueron el principal motivo ornamental de sus trabajos Decenas de millones de estas artísticas etiquetas viajaron hasta los más apartados rincones del planeta, adheridas a las botellas del jerez. Otra importante faceta artística de José Luis Torres fue la decoración de espejos publicitarios con los que ganó diversos certámenes internacionales de publicidad gráfica. Posiblemente algunos recuerden aquellos grandes espejos con publicidad de vinos y brandies que decoraban la mayoría de los antiguos bares y colmados. El más famoso de todos ellos fue el que, con la imagen de un venerable anciano de barba blanca, mostraba el eslogan: “Siempre bebí Centenario Terry”. La mayoría de dichos espejos se encuentran en colecciones particulares, siendo actualmente muy cotizados. Algunos escasos ejemplares están localizados en bares y cafés de El Puerto de Santa María, Sanlúcar de Barrameda y Cádiz; en Jerez sólo conocemos un establecimiento que exhibe uno de sus espejos, se trata del bar La Moderna en calle Larga, el mismo publicita dos marcas de las bodegas Marqués del Mérito. Podemos afirmar, sin ningún género de dudas, que Torres fue una figura clave en la publicidad gráfica española.
José Luis Torres era de fuerte personalidad, recia figura, carácter independiente y muy aficionado a las tertulias de café. Allá por los años cincuenta del pasado siglo era figura omnipresente en los corros tertulianos de los tradicionales Nuevo Bar, Los Gabrieles o La Española. Al morir, víctima de un cáncer en 1966, su sobrino y discípulo Juan Espina se hizo cargo del taller, creando al poco tiempo una nueva empresa de diseño gráfico denominada Proyectos Gráficos Mamelón, dotada ésta con lo más avanzado de la técnica de aquel tiempo:
Fuentes y bibl.: J. L. Jiménez García, “José Luis Torres”, en Diario de Jerez, 14 de noviembre de 2004; VV. AA., Diccionario enciclopédico de la provincia de Cádiz, t. IV, pág. 34 Madrid, Cinterco Editorial; M. M. González Gordon, Jerez – Xerez – Scheris, Jerez, Imp. Padura 1935.
Antonio Mariscal Trujillo
