Paz y Fuertes, Rafael. Ferrol (La Coruña), 31.VII.1766 – Madrid, 2.IV.1837. Consejero de Castilla, magistrado del Tribunal Supremo de España e Indias.
Hijo de Domingo Antonio Paz y de Antonia Fuertes, fue colegial en el de San Jerónimo de la ciudad de Santiago de Compostela. El 10 de mayo de 1785 recibió el grado de bachiller en Filosofía por la Universidad de esa ciudad. También estudió en ella tres años de Derecho Civil y se graduó de bachiller en Leyes. A continuación, asistió durante cuatro años al estudio y pasantía del licenciado José Lavandeyra, abogado del Colegio de la Audiencia de Galicia. El 9 de julio de 1792 fue recibido y aprobó de abogado en el Real Acuerdo de la expresada Audiencia, época desde la cual tuvo bufete en la villa de Ferrol. En 1793 fue elegido para el empleo de procurador síndico personero de esa villa, donde también fue regidor trienal.
En 1798, Carlos IV le confirió la Fiscalía de los Juzgados de Guerra y Real Hacienda de Marina del departamento de Ferrol, de la que tomó posesión el 29 de marzo del año siguiente. El 25 de noviembre de 1803 fue nombrado revisor regio de libros prohibidos del puerto del Ferrol. Domingo Fernández Campomanes, consejero de Castilla y subdelegado de teatros por ausencia del marqués de Fuertehíjar, le nombró el 13 de septiembre de 1806 censor del teatro de Ferrol y vocal de la junta subdelegada de esta villa. El 24 de noviembre, el Rey le concedió honores de auditor del departamento de Ferrol, que equivalían a los de oidor de Audiencia. El 24 de agosto de 1808 fue nombrado por el Reino de Galicia asesor de la subdelegación de rentas de Ferrol. Por su parte, la Junta Superior de Gobierno de la plaza de Ferrol, el 23 de enero de 1809, le nombró asesor del Tribunal militar recientemente establecido en ella. El mismo año, el 28 de noviembre, Gaspar María de Nava, conde de Noroña, comandante general del Ejército y Reino de Galicia y presidente de su Real Audiencia, le designó comisario de seguridad pública de la villa de Ferrol. El 30 de mayo de 1810, el gobernador y capitán general del propio Reino, Ramón de Castro y Gutiérrez, designó a Paz capitán de la quinta compañía de las Milicias honradas de Ferrol. Por Real Orden de 14 de agosto de 1814 le nombró Fernando VII vocal de la Junta del Arbitrio del vino de Ferrol, creada por Cédula de 28 de marzo de 1778.
Por un Decreto Real despachado el 5 de noviembre de 1815, se le concedieron los honores de alcalde del Crimen de la Audiencia de Galicia. Una Real Orden de 25 de enero de ese año le había recomendado para la primera vacante de alcalde de Casa y Corte, y otra, de 4 de septiembre, del Ministerio de Gracia y Justicia, le recomendó para plaza supernumeraria de la misma sala u honores de ella. Igualmente se le recomendó, en Real Orden de 24 de febrero de 1816, para plaza de oidor de la Chancillería de Granada, o de agente fiscal del Consejo Real. El 22 de diciembre fue habilitado para que pudiera pretender varas y corregimientos de segunda clase. Por otra Real Orden de 6 de julio de 1819, el Ministerio de Marina le recomendó al de Gracia y Justicia para una vacante de magistrado de la Chancillería de Valladolid.
Durante el restablecimiento del sistema constitucional en 1820 en Ferrol, por no haber concurrido como la mayor parte de su vecindario a las funciones de su publicación, se le tuvo por desafecto a las nuevas instituciones, por lo que sufrió reiteradas persecuciones, fue insultado por los tragalistas, y su casa señalada con las iniciales de “servil”. En ella los liberales pusieron un letrero con la leyenda “constitución o muerte”, y se fijaron contra él en las esquinas de las calles varios pasquines que le amenazaban con el asesinato. Por antiliberal y en consideración a su decidida adhesión y acrisolada lealtad a los Reyes durante las dos primeras etapas liberales, fue uno de los individuos nombrados para componer el Ayuntamiento realista de Ferrol en julio de 1823; y el asesor de quien se valió el brigadier de la Real Armada y comisionado regio interino de Galicia, José Brandariz, para el mejor acierto de dicha regia comisión.
Un decreto despachado el 24 de febrero de 1824 nombró a Miguel Cutanda abogado decano del Colegio de Madrid, a Manuel Victoriano Lozano, intendente de policía de Toledo, y a Rafael Paz, alcalde de Casa y Corte. El ferrolano toma posesión de su nuevo destino el 27 del mes siguiente. Había desempeñado la Fiscalía de Marina del departamento de Ferrol durante veinticinco años, tres meses y diecisiete días. Tres años más tarde, Fernando VII, por decreto despachado el 26 de mayo de 1827, le concedió plaza en el Consejo de Castilla. El 10 del mes siguiente se expidió su título de nombramiento y seis días más tarde juró el empleo.
El 24 de marzo de 1834 se creó el Supremo Tribunal de España e Indias. Un decreto del 1 del mes siguiente nombró a los nuevos magistrados: Andrés Subiza, José Martínez de Areta, José Montemayor, José Villanueva, José Mier, Teótimo Escudero, Matías Herrero Prieto, Francisco Redondo, José María Calatrava y Rafael Paz y Fuertes. Un año y medio mes después, un decreto de la Reina gobernadora de 13 de septiembre, atendiendo a los achaques y larga carrera de los magistrados del Tribunal Supremo José Martínez Areta, Matías Herrero Prieto y Rafael Paz, los jubiló con los honores y el sueldo que les correspondían por clasificación. Paz había prestado servicios en la administración por espacio de treinta y seis años. El sueldo que percibía en activo era de 50.000 reales y le quedaron como jubilado 10.000 menos.
Rafael Paz había contraído matrimonio en 1799 con Manuela Membiela y Rico, natural de Madrid, hija de Juan de Membiela, contador general de propios y arbitrios del Reino, y de María Rico. Rafael Paz falleció el 2 de abril de 1837 a causa de una pulmonía.
En el momento de morir vivía en la calle de la Montera, n.º 41. Fue enterrado en uno de los nichos del camposanto de la sacramental de San Andrés, extramuros de la Puerta de Toledo. La Junta de Montepío del Ministerio declaró en favor de su hija María Dolores, nacida en Madrid el 21 de febrero de 1803, la pensión anual de 12.000 reales de vellón.
Fuentes: Archivo Histórico Nacional, Ministerio de Hacienda, legs. 528/36 y 1542/49; Ministerio de Justicia, Jueces y Magistrados, leg. 4750/7278.
Ricardo Gómez Rivero
