Tornera Sota y Luna, Juan Francisco. Madrid, p. s. XVIII – ¿Cumaná? (Venezuela), s. m. s. XVIII. Sargento mayor de Infantería y Milicias de las provincias de Cumaná.
Juan Francisco Tornera Sota y Luna fue hijo de Juan de la Tornera y Sota, caballero de la Orden de Calatrava, natural de Arce, arzobispado de Burgos, gobernador y capitán general de las provincias de Nueva Andalucía, Cumaná y Cumanagotos (por nombramiento real de 22 de diciembre de 1717), y de Teresa de Anoz Carballo y Luna, natural de la ciudad de Gante, en Flandes.
Juan Francisco se encontraba sirviendo en Cumaná como soldado arcabucero, con diez escudos de sueldo al mes, desde el 17 de abril de 1722 hasta el 18 del mismo mes y año; desde este día hasta el 29 de julio de ese año como alférez real del Castillo de Araya, con veinticinco escudos; desde este día al 7 de febrero de 1728, como teniente capitán y cabo subalterno del Castillo de Santa María de la cabeza de la ciudad de Cumaná, con treinta escudos. Desde el mencionado día 7 de febrero estuvo desempeñando el cargo de sargento mayor de Infantería y Milicias de aquellas provincias, con sesenta y cinco escudos, de cuyo nombramiento dio cuenta el gobernador a Su Majestad.
El primero de mayo de 1727 se nombró, al expresado Juan Francisco de la Tornera Sota, capitán de mar y guerra del bergantín que el gobernador había armado para recorrer las costas y limpiar aquellos mares e islas de barlovento de piratas y comerciantes enemigos de la Corona.
El gobernador de Cumaná, el 29 de diciembre de 1728, le encomendó la averiguación del número de convertidos a la religión católica en el espacio de ocho años, lo que le llevó a recorrer las poblaciones, realizar el recuento de municiones y armas. Por orden del gobernador, junto con veinticinco hombres, acompañó al obispo de Puerto Rico, Sebastián Lorenzo Pizarro, en la visita que hizo de aquellas provincias. Se supone que siguió desempeñando sus servicios a la Corona mientras vivió.
Fuentes: Archivo General de Indias (Sevilla), Indiferente General, leg. 145 N. 86.
Ángela Pereda López
