Blanco, Gilberto. Valencia de Don Juan (León), 4.II.1872 – León, 3.IV.1938. Agustino (OSA), educador, escritor y poeta.
Fueron sus padres Juan Blanco Manovel y Mauricia Álvarez Luna. Éstos le enviaron a realizar los primeros estudios al colegio San José, de Valencia de Don Juan (León), fundado en 1884 por la provincia de Castilla de la Orden de San Agustín. En este colegio consiguió el premio de retórica de 1886. Al año siguiente ingresó en el convento de San Agustín de Calella (Barcelona), para emitir la profesión religiosa el 5 de marzo de 1888.
Cuando todavía no había finalizado los estudios eclesiásticos, el 16 de septiembre de 1892 salió destinado para el colegio de El Rasillo en Cameros (La Rioja), como alumno de tercer curso de Teología. Cerrado este centro de estudios el 18 de julio de 1894, Gilberto Blanco fue destinado al colegio San Agustín de Calahorra (La Rioja). Aquí se dedicó a la enseñanza de latín, religión, moral, literatura y caligrafía. Fue ordenado sacerdote por el obispo de Tarazona, Juan de Soldevilla, el 22 de septiembre de 1894.
Aunque continuó con las tareas pedagógicas en los colegios agustinos de la provincia de Castilla, pronto comenzó a desplegar por su capacidad literaria. En vista de ello fue nombrado cronista de la provincia de Castilla en 1902, y la Orden agustiniana le otorgó, el 4 de noviembre de 1904, el título de lector.
Sin descuidar la actividad literaria, Gilberto Blanco fue prior del colegio San José de Valencia de Don Juan (1903-1907), del colegio Nuestra Señora de la Consolación de Huelva (1911-1919) y del convento de Calella (1933-1935); secretario provincial (1897- 1899; 1899-1904) y definidor provincial (1899- 1903; 1907-1911; 1936-1938). Asistió como discreto de la provincia de Castilla a los capítulos generales de la Orden de San Agustín celebrados en 1911 y 1925. En el Capítulo General de 1913 intervino como corrector de documentos. De la archicofradía de Nuestra Señora de la Consolación y Talleres de Santa Rita, de Valencia de Don Juan, fue director desde su fundación en 1903.
Aunque destacaba como predicador, director de ejercicios espirituales y confesor, Blanco era ante todo poeta, músico y escritor. Se inició con la pluma en periódicos riojanos como El Eco Calahorrano, La Rioja Baja, La Opinión y La Rioja. En los años finales de siglo xix y primeros del xx se encuentran en sus números poesías, cuentos, fábulas, artículos de opinión y de crítica literaria firmadas por Gilberto Blanco. Luego vendría la publicación de sus obras literarias en las prensas leonesas, vallisoletanas, onubenses y madrileñas. El poema “El Paso Honroso”, compuesto en León el año 1934, mereció el Premio de la Diputación Provincial en la Justa Literaria celebrada ese año. De Gilberto Blanco es también el Himno a la Virgen del Camino, escrito desde Huelva en el verano de 1925, a petición de Manuel Uriarte, maestro de capilla de León. Por otro lado, sus propuestas de carácter histórico han tenido menor fortuna, y son criticadas por no verse amparadas en la investigación científica.
A petición del ayuntamiento de su villa natal, los restos mortales de Gilberto Blanco fueron trasladados el 21 de mayo de 1944 de León al Panteón de Hombres Ilustres de Valencia de Don Juan.
Obras de ~: El cinturón de María. Lecturas cristianas, Madrid, Imprenta Asilo de Huérfanos del Sagrado Corazón de Jesús, 1911; Justicia de Dios o El Cristo de la pelota. Leyenda calahorrana, León, Imprenta Católica, 1931; Justicia de Dios o El Cristo de la pelota. Leyenda calahorrana, León, Imprenta Católica, 1931; León. Romance heroico, León, Imprenta Provincial, 1931; Cancionero de la Consolación y otras poesías, ed. de L. Estrada González, Madrid, Revista Agustiniana, 1998. El resto de la producción literaria se encuentra recogida, en su mayor parte, en B. Estrada Robles, Al servicio de Dios y de la Iglesia. Memoria necrológica de la Provincia de Castilla (1870- 2004), Madrid, Revista Agustiniana, 2005, págs. 143-150.
Bibl.: G. de Santiago Vela, Ensayo de una Biblioteca Ibero- Americana de la Orden de San Agustín, I, Madrid, Imprenta Asilo de Huérfanos, 1913, págs. 410-412; L. Estrada González, “Introducción”, en G. Blanco Gutiérrez, Cancionero de la Consolación y otras poesías, de L. Estrada, Madrid, Revista Agustiniana, 1998, págs. 7-19; I. González Marcos, “El convento agustiniano de Huelva (1901-1931)”, en R. Lazcano (ed.), Conventos Agustinos. X Congreso Internacional de Historia de la Orden de San Agustín. (Madrid, 20-24 de octubre de 1997), Roma, Institutum Historicum Agustinianum, 1998, págs. 428-479: 441, 443-444, 451, 455-457, 465-468 y 470; B. Estrada Robles, Al servicio de Dios y de la Iglesia. Memoria necrológica de la Provincia de Castilla (1870-2004), Madrid, Revista Agustiniana, 2005, págs. 136-150.
Rafael Lazcano González
