Pascual, Martín. Ochandiano (Vizcaya), s. m. s. XVI – ?, 3.I.1632 post. Bordador.
Bordador natural de Ochandiano (Vizcaya) que, como tantos otros más, pronto se trasladó a La Rioja para terminar abriendo en Logroño, a comienzos del siglo xvii, uno de los obradores más influyentes de todo el territorio diocesano, justo en unos momentos en los que la demanda de ornamentos (ternos completos o casullas) para enriquecer las sacristías de las iglesias (debido a que ya se habían concluido o estaban a punto de concluirse en la mayoría de ellas las obras de fábrica), de pendones y estandartes para las cofradías que ya empezaban a proliferar, de almaizares, mangas de cruz, bolsas de corporales, paños de facistol, pulpiteras y frontales en competencia con los guadamecíes, se convertía en una constante. En este sentido, no se debe olvidar que si la batalla de Lepanto fue el germen de tantas cofradías del Rosario como arraigaron por doquier, ya el Concilio de Trento había preparado el camino para la eclosión de todo tipo de brotes devocionales. Y es, precisamente, en ese ambiente contrarreformista donde cobran su verdadero sentido los ternos de terciopelo de dos pelos de Granada, decorados con medallones y bordados de imaginería “a la romana” a base de hilos de oro y sedas de matices.
Con Martín Pascual, pues, no sólo alcanzará esta técnica las mayores cotas de interés, sino que, tras su muerte, se puede decir que el mundo de los bordados se sumergirá en una profunda crisis de la que nunca más saldrá al haber cambiado para entonces las circunstancias ambientales que lo habían hecho posible.
Formado posiblemente como oficial en el taller de Pedro del Bosque, su testamento, dictado en Logroño con fecha 3 de enero de 1632, aclara algunos aspectos importantes de esta relación profesional. Por ejemplo, que su esposa, María Iñiguez de Enderica, con la que tuvo dos hijos que la sobrevivieron (Custodio y Juana, a los que dejaría por herederos universales), había recibido 200 ducados como dote de Pedro del Bosque y que incluso pertenecían a éste las casas donde el matrimonio vivía.
La primera noticia que se tiene sobre su actividad data del 22 de abril de 1605, en que ajustaba a tasación un frontal para el altar mayor de la iglesia logroñesa de Santiago el Real. El 12 de junio de 1606 se obligaba a hacer para la iglesia de Yécora (Álava) una capa de terciopelo negro con su cenefa por 140 ducados.
Nueve días después concertaba para la iglesia de Moreda (Álava) la realización de una dalmática de damasco blanco con decoración similar a la obra de Yécora.
En 1610 ya había entregado también dos casullas para Murillo de Río Leza (La Rioja). El 4 de abril de 1609, los cofrades del Rosario de Viñaspre (Álava) le encomendaban la hechura de un pendón de damasco blanco con una figura de la Virgen en el centro y su correspondiente resplandor, así como un rosario circundando toda la composición. En 1611 terminaba un ornamento entero para Lanciego (Álava) y el 15 de noviembre de ese mismo año asumía la realización de dos dalmáticas llanas para Villar de Maya (Soria).
Pero su principal teatro de operaciones se circunscribe en esencia a toda esa franja ribereña al Ebro y a las cuencas del Leza y del Iregua. El 31 de enero de 1612 ajustaba la realización de un pendón para la cofradía del Rosario de Baños de Ebro (Álava), cuyo esquema trasplantaría con ligeras variantes a Lerín (Navarra) ese mismo año. El 24 de enero de 1613 se comprometía a hacer para la iglesia de Pinillos (La Rioja) una casulla de damasco blanco con cenefas de terciopelo carmesí bordadas con seis figuras. También se detecta su actividad ese mismo año en Viguera, Almarza, San Román de Cameros, Trevijano y en la iglesia de Santa María de Laguardia (Álava), para la que hizo un pendón de damasco carmesí con sendas figuras bordadas en cada uno de sus lados y un ornamento similar al que había realizado para la iglesia de Santa María de Palacio de Logroño. Ante la acumulación de contratas, el 31 de mayo de 1613 admitía como aprendiz en su obrador a Andrés de Ocáriz, natural de Salvatierra (Álava) y el 8 de noviembre de 1614 llegaba a un acuerdo con Ana Sáenz, viuda de Juan Sáenz de Cabezón, natural de El Redal, para que su cuñado Juan Vicente pudiera servirle como aprendiz.
Tal era ya su fama por entonces, que el 21 de septiembre de 1613 los administradores de la iglesia de Alegría (Álava) le entregaban una tela italiana de color carmesí para que la convirtieran en un terno poblado de bordados de imaginería en faldones y cenefas.
El 29 de abril de 1614 se comprometía a hacer un pendón de damasco para la cofradía del Rosario de Clavijo y poco después un voluminoso encargo para Ochandiano que entregaba a un vecino de esa población el 22 de enero de 1615, lo que le abriría las puertas para futuros compromisos en su villa natal.
Castañares de las Cuevas, Cornago, Bucesta, Muro de Cameros, El Rasillo y otros pequeños enclaves tampoco serían ajenos a su vitalidad como afamado bordador.
Pero su obra más importante y conjuntada es, sin lugar a dudas, la que el 23 de agosto de 1618 accedía a llevar a cabo para la iglesia de Alcanadre: un terno de plata blanca de Milán con labores sobre terciopelo carmesí, dos dalmáticas de terciopelo negro con bordados para los oficios de difuntos, diversos frontales y un paño de facistol.
Relacionado con el pintor-dorador Nicolás Ortiz de Orive Salazar y con otros artistas del foco de Logroño, como era habitual, salió en ocasiones fiador de algunos de ellos, lo que en algún momento le ocasionaría serios problemas.
Una de sus hijas, María, entró en el Convento de Santa Clara con el nombre de María de las Vírgenes, para lo cual y con el fin de cumplimentar su dote, Martín Pascual y su esposa María Iñiguez de Enderica hipotecaban unas casas que tenían en Barrio Mercado y que habían adquirido el 28 de noviembre de 1625 por 1.323 reales. Otras más tenían también en la calle de las Ollerías Altas, donde consta que el matrimonio estuvo residiendo durante un prolongado tiempo.
Obras de ~: Ornamentos para la iglesia, Cornago (La Rioja), s. f.; Ornamentos para la iglesia, Muro de Cameros (La Rioja), s. f.
Bibl.: E. Enciso Viana y J. Cantera Orive, Catálogo Monumental.
Diócesis de Vitoria, I. Rioja Alavesa, Vitoria, Obra Cultural de la Caja de Ahorros Municipal, 1967; J. M. Ramírez Martínez, Guía Histórico-Artística. Logroño, Logroño, Gráficas Ochoa, 1994.
José Manuel Ramírez Martínez