Lucio, Marcos. Gante (Bélgica) p. s. XVII – ¿Veracruz (México)?, 1673 post. Ingeniero militar.
Según los más fidedignos testimonios, parece ser que Lucio era natural de Gante, hijo legítimo del secretario de gobierno de dicha ciudad y que pertenecía a la nobleza de la misma.
Sirvió en Flandes para la corona de España entre 1635 y 1639 y entre 1639 y 1640 estuvo en las guerras de España.
Una vez admitido como ingeniero, el Consejo de Indias lo propuso para que pasase a Nueva España “para que sea empleado así donde sea conveniente y haga falta” y en 1642 pasaba a Sinaloa. Hasta 1648 había “observado, descrito y reducido todo lo que propiamente se dice de la Nueva España a un mapa grande y general, dividido éste en otros 6 que comprenden las provincias de Nueva Galicia, Nueva Vizcaya, Nuevo León, Nuevo Méjico y Sinaloa, con su población, distancias y alturas”. Todos estos mapas iban en discursos de presentación. En ese mismo año solicitaba el título de superintendente de las Fábricas y Fortificaciones, equivalente al empleo que tenía Adrián Boot. La Junta de Guerra de Indias consideró la necesidad de un ingeniero, pero hizo ver la conveniencia de un informe sobre el particular que fue encargado al padre Ysasi.
En 1656 llegaba a Veracruz, ante la amenaza de la escuadra inglesa de atacar la ciudad, por el peligro que corrían todas las costas del Seno Mexicano después de haberse apoderado los ingleses de Jamaica. A Marcos Lucio se le encargaba el reconocimiento de la fortificación de San Juan de Ulúa y de Veracruz y su puerto. El nombramiento fue dado por el virrey, duque de Alburquerque, en México a 12 de mayo de 1656. Dos años más tarde presentaba un proyecto de mejoras de la fortaleza que no era aceptado. Pese a ello, en 1659 se le hacía responsable de los reparos de las fortificaciones de Veracruz y San Juan de Ulúa, con un “sueldo de tres pesos por cada día”.
El año 1658 se reedificaba la iglesia de San Juan de Ulúa, siendo castellano el teniente general de Caballería don Francisco Castejón. Fue presupuestado en 6.000 pesos “para cubrir las puertas del Castillo, reedificar los Cuarteles de Tropa y también la Iglesia”. Concedido permiso por el virrey, duque de Albuquerque, dispuso tasasen el costo de las obras el ingeniero militar don Marcos Lucio auxiliado por algunos maestros de albañilería, ascendiendo el presupuesto a 13.386 pesos. Una vez sacado a subasta, no hubo licitadores, realizando por fin las obras el capitán Herrera previa aprobación del virrey. Tres años después, el mismo ingeniero Marcos Lucio propuso algunas obras, entre las cuales se encontraba “acabar la iglesia con postigo, coro, pila de baptisterio y campanario” con un costo de 3.000 pesos, de un total de 7.000 asignados a otras obras.
En 1661 marchaba a La Habana, sin permiso de las autoridades, a ocuparse de las fortificaciones de la isla, allí dirigió la labor de buceo para extraer la plata perdida en el casco de la nave Almiranta. En 1662, de regreso a Nueva España, era encarcelado pese a ser el único ingeniero del reino. Al año siguiente era puesto en libertad. También en 1662 se llevaba a cabo el proceso incoado por el gobernador de Cumaná, don Pedro de Briquela, al padre jesuita Pedro Prat, ingeniero cosmógrafo que había levantado planos de las costas de las Indias y adquirido noticias de sus más importantes fortificaciones, acusado de pasar información al enemigo. Este asunto estaba ligado a la vida de Marcos Lucio, siendo causa fundamental de su posterior desprestigio, aunque al parecer siempre fue considerado en la milicia como extranjero y mercenario en su labor, a pesar de haber servido a la Corona de España en Flandes y en las guerras de España como hemos señalado ut supra.
En 1663 realizaba la Planta de la Nueva Ciudad de la Vera Cruz en la forma que por la acelerada nueva de haber ocupado el enemigo el Puerto de San Francisco de Campeche, la puso su Gobernador Don Fernando de Solís y Mendoza, y en 1670, dos planos: la Planta y demostración del Castillo e Isla de San Juan de Ulúa y el plazel como hoy está con los padrastos del almagasen, ramales y más paredes de la iglesia por acabar y la media luna por cerrar el Angula Agudo, que por la vista de ojos del Virrey Marqués de Manzera se mandó demoler por ser padrastros para el mayor seguro del Castillo de San Juan de Ulúa, y Planta y demostración del Castillo e Isla de San Juan de Ulúa, con el plazel y la forma que tiene propuesta el Castellano... , demolido y arrazado el almagacen, sus ramales y demás paredes de la iglesia por acabar... y el abrir un foso o cortadura alrededor de dicha media luna y cortina como se declara en esta planta…
En 1663 debió volver a Cuba, ya que se le atribuye la construcción del torreón de San Lázaro, construcción militar de pequeñas dimensiones perteneciente al sistema defensivo de la ciudad de La Habana, que asumía la función de vigilancia y servía de enlace entre los castillos de La Punta y La Chorrera. Fue construido en la orilla de lo que fue la caleta de San Lázaro o de Juan Guillen, sitio de desembarcos frecuentes de piratas. También presentaba un proyecto, respecto a la plataforma exterior de los Doce Apóstoles, del castillo del Morro en La Habana, por el que se mostraba partidario de su demolición “por estar a demasiada altura sobre el nivel del mar y no tener suficiente espacio para retirar los cañones”, proyecto que se aprobaba ese mismo año.
Finalmente, en el mismo año de 1670, presentaba la Planta y demuestra[ci]ón del Castillo é Isla de San Ju[an] de Vlúa con el plazel y la forma que tiene propuesto el Castellano con Fer[nan]do de Solís y Mendoza, cauallero de la orden de Santiago, demolido y arrazado el almagacen, sus ramales y vnas paredes de la yglesia por acabar, como está mandado por Su Ex[celenci]a el s[eño]r marqués de Mancera, vi Rey desta Nueba España = y el abrir un fosso o cortadura al rededor de d[ic]ha media luna y cortina como se declare en esta planta y levantar en la cortina vna espalda como se declare en dicha planta por la letra H y su punteado = obras tan precissas del ser[vici]o de su Mag[esta]d como se dexa considerado. No se ha resuelto = del año 1670. En este último año citado debió viajar a Campeche, quizá el mejor astillero de América por la calidad de sus maderas, donde realizaba varias obras.
En enero de 1673 Francisco Pozuelo de Espinosa era ayudante de ingeniero, aunque no había ejercido ni seguido la profesión, por lo que debía ser examinado por el P. José Zaragoza o por Jorge del Pozo, “que son insignes Yngenieros y Maestros de matemáticas”. El 6 de febrero de ese año, era examinado por el P. Zaragoza “en cuanto toca al acuerdo y buena disposición de buen Yngeniero militar, que le halla bien instruido, con sobrada suficiencia”. Una vez admitido como ingeniero, el Consejo de Indias lo propuso para que pasase a Nueva España en lugar de Marcos Lucio, “para que sea empleado así donde sea conveniente y haga falta”.
Lucio fue uno de los ingenieros cuya actuación en Nueva España en la segunda mitad del siglo XVIII fue más activa. Sus proyectos más importantes se refirieron a la ciudad de Veracruz y al castillo de Ulúa, aunque nada definitivo pudo dejar terminado en dicha plaza. Durante su permanencia en Veracruz, fueron muy conocidas las desavenencias que tuvo con el castellano de San Juan de Ulúa, don Francisco Castejón. Años más tarde, sería el ingeniero que realizaría los proyectos del gobernador de la ciudad, don Fernando de Solís y Mendoza.
Bibl.: J. A. Calderón Quijano, “Ingenieros Militares en Nueva España”, en Anuario de Estudios Americanos, 6 (1949), págs. 1-72; J. O. Moncada Maya, Ingenieros Militares en Nueva España. Inventario de su Labor Científica y Espacial. Siglos XVI-XVIII, México D.F., Universidad Autónoma de México, 1993; J. A. Calderón Quijano, Las Fortificaciones Españolas en América y Filipinas, Madrid, Editorial Mapfre, 1996; C. Laorden Ramos, Obra Civil en Ultramar del Real Cuerpo de Ingenieros, Madrid, Ministerio de Defensa, 2008, 2 vols.; J. Carrillo de Albornoz y Galbeño, “Pozuelo y Espinoza, Francisco”, en Real Academia de la Historia, Diccionario Biográfico de la Real Academia de la Historia, en línea, disponible en http://dbe.rah.es/biografias/francisco-pozuelo-y-espinoza.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
