Ayuda

Sancho Sánchez

Biografía

Sánchez, Sancho. Ávila, f. s. XIII – ¿Olmedo (Valladolid)?, s. m. s. XIV. Noble, canónigo, maestre, chantre, mayordomo, racionero, vicario general del obispado de Ávila, arcediano de Olmedo.

Miembro del linaje Dávila, descendiente tanto de los señores de la rama o Casa Navamorcuende y Cardiel como de los señores de la rama o Casa de Velada. Era hijo de Ximén Muñoz, señor de El Torrico, en el Campo de Arañuelo, junto a Oropesa, sobrino de Blasco Dávila, obispo se Sigüenza (1341) y sobrinonieto de Sancho Blázquez Dávila, obispo de Ávila (1312-1355).

En 1327, según consta en el testamento de su otro tío-abuelo Fernán Blázquez Dávila, acalde del concejo y alcaide de la fortaleza de Ávila, era “canónigo de Ávila e vicario general en todo el obispado”; durante el año 1332 fue mayordomo del Cabildo, según él mismo dice en su testamento; también fue racionero de la Catedral al menos entre 1329 y 1335; por el testamento del obispo Sancho Blázquez se sabe que en 1335 era chantre, en 1329 ya aparece como maestre y arcediano de Olmedo al menos desde 1338 y lo seguía siendo en 1363, según consta en el testamento de Fernán Blázquez, III señor de San Román, que lo nombró tutor de sus hijos menores de edad.

Su origen familiar hace pensar que su posición económica debía ser la propia de su rango ciertamente privilegiado. Pero, además y sobre todo, los cargos que ejerció a lo largo de su carrera eclesiástica seguramente le reportaron unos ingresos que sin duda aumentaron su inicial capacidad económica. Las Constituciones del papa Inocencio IV, de mediados del siglo xiii, fijaron la cuantía de los salarios que debían cobrar los miembros de la jerarquía eclesiástica abulense: un arcediano, auténtico prelado en su circunscripción diocesana, cobraba entre 150 y 180 maravedís, el chantre, jefe de coro, 150, el mayordomo 70, los canónigos miembros de la mesa capitular 50 y los racioneros 26 o 13, según fueran mayores o menores. Además, el personal eclesiástico cobraba unas dietas y pitanzas por asistir a las ceremonias religiosas ordinarias y en determinados días festivos. Por otra parte, algunas propiedades del Cabildo eran asignadas a los beneficiados para que las explotaran y de esta forma obtuvieran una renta similar a la prebenda que le correspondía, logrando a veces el capitular una renta superior a su prebenda. Otras veces acudían a la subasta de las propiedades rurales del Cabildo, convirtiéndose en renteros de las mismas. A todo ello hay que añadir la parte de los diezmos que les correspondía.

Todo ello le permitió realizar una serie de compras de bienes urbanos —unas casas en Ávila— y rurales en varios lugares del obispado —“algos”, cuyo contenido no se especifica, pedazos de tierra y viñas, eras y huertos— entre los años 1329 y 1341, por un montante de 7509,5 maravedís. En dos escrituras de compra se pone de manifiesto la finalidad de las mismas: que el destinatario último era la Catedral de Ávila, mediante donación de Sancho Sánchez a cambio de unos aniversarios a celebrar en determinados días.

Parte de estos bienes, otros bienes raíces que poseía en otros lugares y una cantidad apreciable de dinero (22.361 maravedís) los legó en su testamento al Cabildo y Catedral de Ávila (la mayor parte), a diversas instituciones religiosas y a particulares.

Sin duda, en el contexto de su época Sancho, al igual que otros miembros anteriores y posteriores de las diversas ramas de la familia Dávila, formó parte de una oligarquía eclesiástica que las constituciones de Inocencio IV contribuyeron a configurar, puesto que “señalan con toda claridad que se trata de formar un cuerpo de élite mediante la asignación de unos beneficios elevados, de cuantía suficiente como para atraer a los hijos de los nobles. Se procuraba interesar a los individuos de las familias más acomodadas no sólo para dar relieve social a la clerecía ciudadana, sino también para recibir un grato enriquecimiento en lo temporal gracias a sus últimas voluntades”.

 

Bibl.: J. R. López Arévalo, Un cabildo catedral de la vieja Castilla. Ávila: su estructura jurídica, siglos xiii-xx, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1966; A. Barrios García, La catedral de Ávila en la Edad Media: estructura socio-jurídica y económica (Hipótesis y problemas), Ávila, Obra Social y Cultural de la Caja Central de Ahorros y Préstamos de Ávila, 1973; J. L. Martín Martín, “El Poder económico de los canónigos medievales”, en Historia 16, n.º 61 (mayo de 1981), págs. 55-60; J. I. Moreno Núñez, “Semblanza y patrimonio de don Sancho Blázquez, obispo de Ávila (1312- 1355)”, en Hispania Sacra, vol. XXXVII (1985), págs. 155- 188; “El caballero abulense Fernán Blázquez y el nacimiento de un señorío toledano a principios del siglo xiv: San Román del Monte”, en En la España Medieval, 23 (2000), págs. 117- 135; “Poder económico e influencia social de un clérigo castellano del siglo xiv: Sancho Sánchez, arcediano de Olmedo”, en En la España Medieval, 24 (2001), págs. 395-419.

 

José Ignacio Moreno Núñez

Relación con otros personajes del DBE

Biografías que citan a este personaje

Personajes citados en esta biografía

Personajes similares