Blasco, Domingo. Dentudo. Ávila, s. m. s. xii – 22.XII.1239. Noble y obispo de Ávila.
Hijo del adalid Sancho Ximeno, muerto en 1173, de la estirpe de los Dávila. Con él se inicia la presencia del linaje en el plano eclesiástico de la ciudad.
El 31 de octubre de 1212 aparece como obispo electo de Ávila en la donación de la villa de Castroverde que Alfonso VIII hace a Álvaro Núñez de Lara. Seguramente fue elegido por el cabildo catedralicio con la aprobación del Rey (assensus), como era costumbre en la época, pero sin duda con la oposición de algunos miembros del cabildo. Cianca, González Dávila y Tello suponen a un Juan compitiendo con él y también Eubel y Gams indican a un Joannes III, muerto en 1216; por su parte, el códice 914 también menciona a un Sancho que murió en 1233. En 1228 Domingo Blasco debía de ser todavía obispo electo, porque el legado pontificio se dirige al clero, cabildo y concejos de la diócesis de Ávila para que recibieran como obispo al deán de Calahorra, también llamado Domingo. A. Lambert se inclina por que fue obispo entre 1215 y 1239. El Schedario Garampi del Archivo Secreto Vaticano registra documentación de Domingo desde la muerte de Pedro Instancio (15 de mayo de 1212) hasta 1237.
Como obispo de Ávila asistió al cuarto concilio de Letrán celebrado en 1215; en 1218 Honorio III le exhorta en una carta a que participe en la guerra contra los moros de Andalucía; interviene en los asuntos generales del reino con motivo del acceso al trono castellano de Fernando III, formando parte, junto con el obispo de Burgos, Mauricio, en 1217, de la embajada que la reina Berenguela envió a su esposo Alfonso IX de León para que dejara de hostigar al nuevo Monarca.
Seguramente para agradecer los servicios prestados Fernando III concedió al obispo y a la catedral de Ávila unas sernas en Olmedo y Arévalo, en 1221, y la aldea de Guijo con su castillo, en 1231.
Fuentes y bibl.: Archivo Secreto Vaticano, Schedario Garampi, Vescovi, 1, 31, índice 475, fols. 48v.-57.
A. Cianca, Historia de la vida, invención, milagros y traslación de San Segundo, primero obispo de Ávila, y recopilación de los obispos sucessores suyos hasta don Jerónimo Manrique de Lara, inquisidor general de España, Madrid, Luis Sánchez, 1595; P. Pressuti, Regesta Honori Papae III, Roma, ex Typographia Vaticana, 1895, 2 vols.; C. Eubel, Hierarchia católica Medii Aevi, t. I, Monasterii Patavii, Typ. Regensbergianae et Il Messaggero di S. Antonio, 1913; A. Lambert, Dictionnaire d’Histoire et de Géographie Ecclésiatiques, t. V, Paris, Letouzey et Ané, Editeurs, 1930, págs. 1168-1169; J. González, El reino de Castilla en la época de Alfonso VIII, vol. III, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), 1960, doc. 899, pág. 575; B. Gams, Series Episcoporum Ecclesiae Catholicae, Graz, Akademische Druck-U. Verlasgsanstalt, 1957; D. Mansilla Reoyo, La documentación pontificia de Honorio III, 1216-1227, Roma, Instituto Español de Historia Eclesiástica, 1965; T. Sobrino Chomón, Diccionario de Historia eclesiástica de España, t. I, Madrid, CSIC, 1972; A. Barrios García, Documentación medieval de la catedral de Ávila, Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca y biblioteca de la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Salamanca, 1981, docs. 63 y 67; Crónica latina de los Reyes de Castilla, ed. y est. previo por L. Charlo Brea, Cádiz, Servicio de publicaciones de la Universidad de Cádiz, 1984; J. I. Moreno Núñez, “Los Dávila, linaje de caballeros abulenses. Contribución al estudio de la nobleza castellana en la Baja Edad Media”, en En la España medieval II. Estudios en memoria del profesor D. Salvador de Moxó (1982), págs. 157-172; A. Ubieto Arteta, Listas episcopales medievales, t. I, Zaragoza, 1989 (ed. facs.); J. I. Moreno Núñez, “Poder económico e influencia social de un clérigo castellano en el siglo xiv: Sancho Sánchez, arcediano de Olmedo”, en En la España medieval, 24 (2001), págs. 395-419.
José Ignacio Moreno Núñez
