Ayala, Gaspar de. España, c. 1550 – Lima (Perú), c. 1611. Letrado, fiscal, alcalde del Crimen en Indias.
Inició sus servicios como teniente de gobernador en Canarias y como juez de registros en dichas islas, después de lo cual, sobre consulta del presidente del Consejo de Indias del 10 de abril de 1583, fue nombrado fiscal fundador de la Real Audiencia de Manila, despachándosele su título en Aranjuez el 5 de mayo de ese mismo año.
Su servicio en Manila estuvo marcado por las diferencias que se suscitaron entre los oidores y el presidente del tribunal por cuestiones de competencia en el conocimiento de causas, pero también por sus extensos y permanentes informes al Consejo sobre la situación de Filipinas, dentro los cuales ponía especial atención a sus actuaciones como protector de naturales, pues este encargo se le confió por Real Cédula librada en Madrid el 23 de junio de 1583.
Se mantuvo en el despacho de su empleo hasta la supresión del tribunal, decretada en 1589, pero efectiva desde 1590, año en el que escribía desde Manila, el 25 de junio, para solicitar una plaza en México.
Sobre consulta del Consejo del 17 de junio de 1591 fue nombrado en una plaza de alcalde del Crimen de la Real Audiencia de México, de la que se le libró título en San Lorenzo el 13 de julio de 1591. En México su salud se resintió prontamente y por ello el virrey daba cuenta al Consejo de la falta de despacho en que se hallaba la sala del Crimen, y así, sobre consulta del 2 de agosto de 1595, se ordenó retirarle y que se le diera el salario en su casa, pero a pesar de lo anterior, su mujer informaba al Consejo que su marido había recobrado la salud desde el 24 de junio de 1595 y pedía que no fuera removido de su plaza, por lo que sobre consulta del 25 de julio de 1596 se ordenó que informara el virrey, tras lo cual se mantuvo en su oficio.
Por haber casado a un hijo suyo sin el real permiso, sobre consulta del Consejo del 16 de julio de 1601 fue trasladado a plaza de oidor de la Real Audiencia de Guatemala, oficio que el 16 de marzo de 1602 se declaró por supernumerario, y del que se le libró título en Madrid el 28 de abril de 1602, pero representó esta provisión y solicitó ser jubilado, respecto de lo cual se solicitó la opinión del virrey, quien respondió por carta fechada en México el 18 de enero de 1604, en la que decía que: “La edad y el semblante en que ahora le veo no es de manera que pueda decir a V. M. que esta inútil para serville, alega enfermedades secretas para caminar, estas se quedan en su verdad”.
No obstante lo anterior, en consulta del Consejo del 25 de mayo de 1604 los consejeros sugerían al Rey que de no jubilarle se le diera la plaza de alcalde del Crimen en Lima vacante por promoción de Juan Barrio de Sepúlveda, y fue esta última opción la aceptada, librándosele título de tal plaza en Valladolid el 9 de junio de 1604, el cual recibió en la flota que llegó a la Nueva España el 5 de septiembre de ese mismo año, y diez días después el virrey le comunicó dicho traslado impidiéndole el ingreso al despacho, por lo que el 23 de octubre siguiente escribió desde México al Monarca para informar que, “aunque mi edad y achaques me persuadían a no emprender un viaje tan trabajoso y largo de tierra y mar”, saldría a su nuevo destino en el primer navío que hallase en el puerto de Acapulco, pero, además, solicitaba que se declarase que pasaba a Lima con la antigüedad que tenía en México “porque esta Audiencia y la de Lima corren parejas”, y pedía que se ordenase que le pagasen el salario desde el día en que el virrey no le dejó asistir al tribunal hasta aquel en que tomase posesión en Lima. Finalmente, sobre consulta de Cámara fechada en Madrid el 10 de febrero de 1610 se le concedió la jubilación con goce de salario, decisión que le fue comunicada por Real Cédula de 17 de julio de ese mismo año.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias (Sevilla), Filipinas, 18 A, r. 6, n. 36; Filipinas, 18 A, r. 8, n. 54; Filipinas, 339, l. 1, fols. 221v.-222v., 223r., 348v., 363v.-364v.; Filipinas, 339, l. 2, fols. 14v.-15r.; Indiferente General, 740, n. 112; Indiferente General, 741, n. 265; Lima, 3, 789; Méjico, 72, r. 8, n. 118; Méjico, 1, 1640; Patronato, 293, n. 24, r. 70.
M. Mendiburu, Diccionario Histórico-Biográfico del Perú, t. 1, Lima, Imprenta de J. Francisco Solís, 1874, págs. 428- 429; E. Schäfer, El Consejo Real y Supremo de las Indias, t. II, Sevilla, Escuela de Estudios Hispano-Americanos, 1947, págs. 459, 474, 486 y 523.
Javier Barrientos Grandon