López y Andreu, Miguel. Yéqueda (Huesca), 29.IX.1765 – España, 2.VI.1833 post. Fiscal de Charcas, fiscal de Guadalajara, alcalde del Crimen de Galicia.
Miguel López tenía trece años de estudios superiores en 1792, todos obtenidos en la Universidad de Huesca, donde sirvió como consejero del rector, recibió un doctorado en Leyes, y compitió por una cátedra. Profesor de Instituciones de Justiniano en esa Universidad en 1794, desde 1792 fue miembro de la Real Academia de Leyes patrocinado por Carlos III en la Corte, ocupando varios puestos. López sirvió en muchas comisiones legales en Madrid y el Consejo Real lo aprobó para ejercer como abogado en 1793.
Miguel López fue descrito en 1799 como un “mozo de buena índole modales y costumbres”. Recibió su primer nombramiento de Audiencia por Decreto del 10 de agosto y título del 22 de diciembre de 1800, cuando el Rey lo nombró fiscal de la Audiencia de Charcas para reemplazar a Victoriano de Villava. También fue nombrado para ocupar la residencia del antiguo virrey marqués de Avilés a su llegada, tarea que completó en 1803. Tras unos disturbios públicos en La Paz el 25 de mayo de 1809, en los que el gobernador fue destituido, Miguel López fue encarcelado el 11 de febrero de 1810, por su supuesta complicidad. Tan sólo dos semanas antes, había pedido una licencia para regresar a España. Eventualmente absuelto, fue designado fiscal de la Audiencia de Guadalajara por Decreto del 11 de marzo de 1811, pero el nombramiento fue inefectivo, probablemente por los trastornos de esos tiempos. Obtuvo un nombramiento de fiscal de Guadalajara el 1 de octubre de 1813, y desde Lima el 8 de octubre de 1814, informó al duque de San Carlos el placer que le trajo el nombramiento.
Sirvió en Guadalajara hasta la Independencia, después de la cual regresó a España.
Miguel López recibió honores del Tribunal Supremo de Justicia el 29 de junio de 1820 y luego fue nombrado ministro de ese mismo Tribunal el 31 de julio de 1821. Sirvió hasta el 12 de junio de 1823, cuando cesó. Estaba listado en Aragón en 1827 como beneficiario de una “pensión de emigrados” de 12.000 reales de vellón. Fue nombrado alcalde del Crimen de la Audiencia de Galicia para sustituir a Agustín de Soxo por consulta del 8 de abril de 1829, aunque no está listado en esa consulta; no llegó a servir en este puesto. Estaba en Huesca en noviembre de ese año y se jubiló el 2 de junio de 1830 con medio sueldo, ya que, por su edad avanzada, no podía asistir al Tribunal. El 11 de octubre de 1833, él y los hijos de José Agustín Usoz y Moci buscaron la restauración del honor de Usoz y el pago de su salario atrasado ya que habían sido acusados falsamente de estar involucrados en los acontecimientos de 1809 en Charcas.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias (Sevilla), Charcas, 431, relación de méritos de 1794; Guadalajara, 305; Ultramar, 797; 825; Archivo Histórico Nacional, Consejos, 13498; 13506; 18221; Fondos Contemporáneos, Justicia, 4543(3), exp. 4529; Libro de Plazas, 741; Archivo General de Simancas, Secc. XXIII, Dirección General del Tesoro, invent. 2, leg. 84, doc. 185; leg. 94.
J. Vázquez-Machicado, Catálogo descriptivo del material del Archivo de Indias referente a la historia de Bolivia (Sevilla, 1933), La Paz, Ministerio de Educación y Cultura, Instituto Boliviano de Cultura, 1989, pág. 518; M. A. Burkholder y D. S. Chandler, Biographical Dictionary of Audiencia Ministers in the Americas, 1687-1821, Westport, Connecticut, Greenwood Press, 1982, pág. 183.
Mark A. Burkholder
