Ortiz, Pedro. Villarrobledo (Albacete), ú. t. s. xv – Alcalá de Henares (Madrid), 1548. Religioso jesuita (SI), catedrático en las Universidades de París y Alcalá de Henares, delegado regio, escritor.
Era hermano de Blas Ortiz, otro ilustre eclesiástico de Villarrobledo (asistente y capellán del cardenal Adriano, luego Papa) y ambos de noble familia. Primero, igual que su hermano Blas, estudió Derecho en la Universidad de Alcalá de Henares. Después marchó a París a estudiar la Teología en aquella célebre Universidad, con tal aprovechamiento que luego de recibir la borla de doctor, poco tiempo después pasó a desempeñar una de sus Cátedras de Teología. Es célebre su encuentro (que primero fue un desencuentro) con Ignacio de Loyola. Se resume de lo que escribió el cronista Baquero Almansa (1884), a su vez basado en la larga crónica del padre La Caballería (1731). “Era catedrático de Teología cuando San Ignacio, que había ido a estudiarla también a París, comenzó a alistar algunos estudiantes para su milicia de Jesús. No lo vio el Doctor Ortiz con buenos ojos, parecióle un tanto sospechoso su celo, e inconveniente para el aprovechamiento científico de los estudiantes; se le puso de frente con toda su influencia, y en unión del Doctor Govea, rector de Santa Bárbara, y del Doctor Peña, solicitó del claustro que reprendiese públicamente a Ignacio de Loyola, mas reunido el claustro, en efecto, el reprendido convirtió a su favor con una persuasiva réplica a los doctores, y el Doctor Ortiz trocóse desde entonces, no sólo en amigo, sino en favorecedor (y fuélo constante) de la naciente Compañía”.
Por su fama de sabiduría Carlos I lo nombró su agente en Roma contra las pretensiones de Enrique VIII de Inglaterra de anular su matrimonio con la reina Catalina. Hallábase en la Corte pontificia cuando llegó san Ignacio con sus compañeros, y él les facilitó la audiencia con el papa Pablo III, procurándoles grandes limosnas para su proyectado viaje a Tierra Santa, que no pudieron realizar por la guerra desatada entre Venecia y el Imperio Otomano.
Luego fue enviado el doctor Ortiz a las Dietas de Worms (1521) y de Spira (1529), convocadas para conversar y tratar de reducir a los protestantes. Esto da idea del enorme crédito que tenía como eminenteteólogo. En premio a estos servicios obtuvo el curato de Galapagar (Madrid), por entonces de gran estimación.
Fue protector del Colegio Máximo de Alcalá de Henares. Y la Universidad Complutense, en vez de convocar un concurso para la Cátedra de Sagrada Escritura, se la otorgó directamente, de una forma excepcional, por unanimidad del claustro. En Alcalá de Henares falleció el año 1548.
Obras de ~: Sermones de Quaresma sobre el Miserere [según N. Antonio] (ms.).
Bibl.: F. La Cavallería y Portillo, Historia de Villa-Robledo [...], Madrid, Oficina de la Viuda de Manuel Fernandez, è Imp. del Supremo Consejo de la Inquisición y de la Reverenda Camara Apostolica, 1751, págs. 113-125 (“Elogio del Sapientísimo Doctor Pedro Ortiz”); N. Antonio, Bibliotheca Hispana Nova [...], Tomus Secundus, Matriti, Apud viduam et heredes Joachimi de Ibarra, 1788, pág. 224; J. Sánchez Biedma, “Ortiz, Pedro”, en Biografía Eclesiástica Completa, vol. XV, Madrid, Imprenta de D. Alejandro Gómez Fontenebro, 1863, pág. 1179; A. Baquero Almansa, Hijos Ilustres de la Provincia de Albacete, Madrid, Imprenta de A. Pérez Dubrull, 1884, págs. 134-136; J. Roa y Erostarbe, Crónica de la Provincia de Albacete, vol. II, Albacete, Imprenta y Sucesores de la Viuda de J. Collado, 1894, págs. 508-409 [sic, error por 509]; A. Sandoval Mulleras, Historia de mi Pueblo, La muy Noble y Leal Ciudad de Villarrobledo, Albacete, Imprenta Fuentes, 1960, pág. 95; J. Simón Díaz, Bibliografía de la Literatura Hispánica, vol. XVI, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Miguel de Cervantes de Filología Hispánica, 1994, pág. 302, n.os 2660-2662.
Fernando Rodríguez de la Torre
