Agulló y Pinós, José de. Marqués de Gironella (I). Barcelona, c. 1646 – Ceuta, 4.X.1704. Militar, capitán general de Ceuta.
Hijo primogénito de Jerónimo de Agulló y Rocabertí, barón de Gironella, y de su esposa María de Pinós y Perapertusa, cuyo matrimonio se celebró en Barcelona en 1640. Parece que José era solamente dos años mayor que su hermana Isabel, bautizada en la catedral de la Ciudad Condal el 14 de septiembre de 1648 (Colección Salazar), de donde podría excogitarse su nacimiento en 1646. Aunque su padre siguió la causa de la insurrección catalana, el hijo lo hizo desde su juventud en el ejército real, comenzado a servir el 30 de agosto de 1669 en la compañía de arcabuceros de la guardia del duque de Osuna, capitán general del Principado, por patente suya y empleo de capitán de caballos. En noviembre del mismo año, pasó a mandar la compañía que tuvo Pedro de Figuerola en el Trozo de Caballería de Rosellón, donde permanecería hasta que el 25 de agosto de 1674 se le nombró maestre de campo del tercio de la Diputación de Cataluña, vacante por la muerte del marqués de Aytona, aunque no se le despachó la patente real hasta el 10 de octubre siguiente. Debió dicho nombramiento a su heroico comportamiento el 27 de junio del mismo año en el llano de San Jorge, “habiendo sido su batallón uno de los nueve que primeramente derrotaron a 17 del enemigo” (AGI, Indiferente, 127).
Mandó dicho tercio en la batalla del Barranco de Espolla, sobre el cauce seco del arroyo de Aubregat (4 de julio de 1677), que obligó a los franceses a retirarse al Rosellón aunque el mariscal de Navailles se atribuyera la victoria. Tras la conclusión del largo proceso de paz de Nimega (agosto del 1678-febrero del 1679), el tercio de la Diputación, que costeaba el principado de Cataluña, fue reformado el 22 de febrero de dicho año, permaneciendo Agulló en situación de maestre de campo reformado hasta que el 5 de junio de 1682 fue promovido al grado de sargento general de batalla. Sirviendo dicho empleo en mayo de 1684, el capitán general duque de Bournonville le ordenó reunir las tropas que guarnecían la Cerdaña para acudir con urgencia al socorro de Gerona. Llegó el día 12, al mismo tiempo que la vanguardia francesa, a la que derrotó en Pontmayor, logrando entrar en la plaza y frustrar el designio enemigo. No fue tan afortunado en la siguiente invasión francesa, durante la Guerra de los nueve años o de la Liga de Ausburgo (1689-1697). Se hallaba gobernando la plaza de Seo de Urgel, que hubo de rendir el 12 de junio de 1691, tras ocho días de trinchera abierta, constituyéndose en prisionero de guerra. También le fue esquiva la fortuna en los fallidos intentos de reconquistar Palamós (1695) y de levantar el asedio francés de Barcelona (1697); no obstante, Felipe V le designó general de la Artillería de Cataluña (1701) y, el año siguiente, le honró con un título de marqués y la capitanía general de Ceuta, gobierno del que se hizo cargo el 1 de abril de 1702. La plaza estaba cercada, desde 1694, por las tropas del rey de Marruecos, Muley Ismail, que había logrado recobrar anteriormente algunas plazas costeras en poder de diferentes potencias europeas como la Mámora (1681), Tánger (1684), Larache (1689) y Arcila (1691).
Agulló se mostró un gobernador muy activo. En el primer mes de su gobierno deshizo mediante una salida el aproche enemigo sobre el ángulo de San Pablo y levantó una estacada —que se llamó el Diente Nuevo— ante el baluarte de Santa Ana. El 17 de mayo del año siguiente, organizó un ataque general sobre el campo sitiador, arruinando sus trincheras, clavando e inutilizando parte de su artillería y limpiando el Camino Real. El 8 de agosto de 1704, tras la toma de Gibraltar, una escuadra inglesa se presentó ante la plaza, donde desembarcó el general Basset con una carta del príncipe de Darmstadt con promesas de promoción y del levantamiento del asedio si entregaba la plaza al Archiduque, que el gobernador rechazó de plano; el tenor de tales proposiciones y la respuesta es bien conocido porque se publicó el año siguiente en Barcelona. Tomó el marqués precauciones inmediatas frente a un posible ataque británico, que evitó la aparición de la armada naval francesa del conde de Toulousse. Poco después enfermaba y fallecía el gobernador, dejando como heredero de su Casa a su hijo mayor, Francisco José, que moriría en la batalla de Almenara (27 de abril de 1710), siendo coronel de un regimiento de caballería que no llegó a tener nombre perpetuo y que, en sus doce años de existencia(1703-1715), vio perecer en combate a tres de sus coroneles: Gabriel Hurtado de Amézaga en Iniesta el 9 de octubre de 1706) y Juan Gutiérrez de Vargas en Villaviciosa el 10 de diciembre de 1710, completan la relación junto al II marqués de Gironella.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Indias, Indiferente, 127, n. 31, Relación de sus servicios militares a 20.VII.1679; Indiferente, 133, n. 148, Relación de sus servicios militares a 20.XI.1694; Biblioteca Nacional de España, ms. 2399, fol.195; ms. 2400, fol. 65; ms. 2401 fol. 123; ms. 2405, fol. 29.
G. Darmstadt, Prinz von, Copia de la carta del Príncipe de Darmstadt, escrita al señor don Joseph de Agulló y de Pinós, Marqués de Gironella, Governador de la Plaza de Zeuta en 8 de Agosto de 1704. [Copia de la merecida respuesta de D. José de Agulló y de Pinós, marqués de Gironella], Barcelona, Francisco Guasch, 1705; J. A. Márquez de Prado, Recuerdos de África. Historia de la Plaza de Ceuta, describiendo los sitios que ha sufrido en distintas épocas por las huestes del Imperio de Marruecos, Madrid, Nieto y Compañía, 1859, págs. 177-178; V. Balaguer, Historia de Cataluña, t. VIII, Madrid, Imprenta M. Tello, 1886, págs. 242-243, 422-424 y 428; V. Bacallar y Sanna, marqués de San Felipe, Comentarios de la Guerra de España e historia de su rey Felipe V, el Animoso, Madrid, Atlas, 1957, págs. 74, 96, 99, 105 y 199 (col. Biblioteca de Autores Españoles n.º 99); C. Martínez Campos, España bélica. Siglo XVIII, Madrid, Aguilar, 1968, pág. 45; B. Cuartero y Huerta, Índice de la colección de Don Luis de Salazar y Castro, t. XLVII, Madrid, Real Academia de la Historia, 1973, pág. 284; J. Galobart Soler, Un Estendard musulmà ofrenat a la Mare de Déu de Monserrat pel marquès de Gironella. Montserrat, Montserrat, Associació de Pelegrins, Confraria de la Mare de Déu de Montserrat, 1993; J. Montes Ramos, El sitio de Ceuta, 1694/1727: (el ejército de Carlos II y Felipe V), Madrid, Agualarga, 1999, págs. 39 y 113; A. Espino López, “Oficiales Catalanes en el ejército de los Austrias, 1635-1700” en Cuadernos de Historia moderna, n.º 24, Madrid, Universidad Complutense, (2000), págs. 31-54.
Juan Luis Sánchez Martín y Juan Miguel Serrano San José