Ayuda

Juan Bautista Basset y Ramos

Biografía

Basset y Ramos, Juan Bautista. Valencia, 5.VI.1654 – Segovia, 15.I.1728. Militar y líder popular durante la sublevación del Reino de Valencia en favor del archiduque Carlos.

Todas las referencias documentales coinciden en señalar la ciudad de Valencia como su lugar de nacimiento y en destacar el carácter popular de su extracción social, como hijo de Juan Bautista Basset, dorador, y de Esperanza Ramos. Son vagas e imprecisas las informaciones sobre su etapa de juventud, sacadas a colación por sus detractores en plena confrontación austracista y según las cuales, por haber cometido un grave delito, fue condenado a muerte e indultado a cambio de pasar a servir a Italia.

Según sus propias manifestaciones, entró al servicio de la Casa de Austria en la década de 1670, en sus dos ramas, española y austríaca, y pudo adquirir una sólida preparación tras su experiencia militar en Milán y en las guerras de Hungría, hasta alcanzar el grado de coronel ingeniero del ejército imperial. Durante estos años estuvo a las órdenes del príncipe Luis Antonio de Neoburgo, hermano de la reina Mariana, y del príncipe Jorge de Hessen Darmstadt, con quien se trasladó a Cataluña en 1695, junto a las tropas alemanas ofrecidas por el emperador a Carlos II a causa de la guerra con Francia. Participó en la defensa de Barcelona ante el asedio francés de 1697 y, en 1698, pasó a Orán para elaborar un informe sobre sus fortificaciones. Toda esta trayectoria militar y un claro afán de ascenso social le impulsaron a solicitar, en 1699, la merced del hábito de Santiago.

Declarada ya la Guerra de Sucesión, en 1704 participó en la empresa naval dirigida por el príncipe Jorge para obtener la obediencia de Cataluña y, en el mes de mayo, a su paso por la costa valenciana, desembarcó clandestinamente en Altea para llevar a cabo los preparativos de la rebelión. Tras fracasar los planes aliados en el Principado, intervino en la ocupación de Gibraltar, donde permaneció algunos meses.

En agosto de 1705, al paso de la armada aliada, desembarcó de nuevo tras obtener la capitulación de Denia, convertida así en el primer bastión austracista con el apoyo incondicional de los campesinos, esperanzados por las promesas de abolición del régimen señorial. En diciembre de 1705, al frente de un improvisado ejército del país, inició la marcha sobre la capital del Reino, que capituló el día 16 y proclamó rey al archiduque Carlos.

La primera etapa del gobierno austracista estuvo marcada por la impronta militar de Basset, quien, en su calidad de general de batalla y plenipotenciario del nuevo rey, tuvo que asumir funciones de carácter político para las que no se encontraba capacitado. Pronto se convirtió en un ídolo popular, pero los saqueos y confiscaciones, llevados a cabo por sus seguidores sin control judicial, la persecución de que fueron objeto la nobleza y los franceses, en contra de las capitulaciones, las dificultades provocadas por la negativa generalizada al pago de sisas y derechos, el riesgo en el que puso a la capital de ser atacada por el ejército borbónico y las severas medidas para controlar el orden público, dieron pie a acusaciones de diverso tipo formuladas por sus oponentes borbónicos y también por los sectores moderados del austracismo, e incluso por los jefes del ejército aliado. Todo ello provocó su caída en desgracia y causó un grave daño a la causa austracista, restañado, en parte, con el nombramiento de virrey a favor del conde de Cardona, quien tomó posesión el 4 de febrero de 1706.

Apartado de la escena política y alejado de la capital con la llegada de las tropas inglesas del general Peterborough, la hasta entonces brillante carrera militar de Basset sufrió un claro declive, motivado por algunos fracasos frente a las tropas borbónicas y por su discutible actuación en Denia, Valencia y más tarde en Játiva, por lo cual fue detenido en junio de 1706, encarcelado y trasladado a Cataluña, primero a Tortosa y después, en abril de 1707, al castillo de Lérida, todo ello en medio de una fuerte contestación popular En marzo de 1707 comenzó a instruirse la causa por la responsabilidades políticas y militares en las que hubiera podido incurrir.

Después de la batalla de Almansa y ante la inminente pérdida del Reino de Valencia, fue puesto en libertad y se le encomendó la misión de encabezar la resistencia austracista, para lo que se trasladó de nuevo a Denia. Sin embargo, los enfrentamientos con el comandante gobernador de la plaza, Diego Rejón de Silva, en pleno ataque borbónico, provocaron su precipitada salida de Denia y su traslado a Barcelona, donde se le reabrió el proceso anterior y se instruyó uno nuevo, por el que, en enero de 1708, quedo suspendido de todos los cargos y honores militares durante la voluntad del rey. Esta situación no fue, sin embargo, muy duradera. En mayo de 1708 fue rehabilitado para participar en los preparativos de la defensa de Tortosa, ante el inminente asedio borbónico. Todo parece indicar que, desde el Principado mantuvo estrechos contactos con los migueletes valencianos y que, en el verano de 1711, se le encomendó un nuevo objetivo: el de promover una nueva sublevación entre los valencianos.

En 1713, cuando se produjo la evacuación de las tropas imperiales, optó por quedarse en Cataluña. En 1714 participó activamente en la defensa de Barcelona como comandante general de la artillería y fue hecho prisionero el 11 de septiembre. Desde allí se le trasladó al castillo de Alicante y poco después al de Fuenterrabía, donde, en 1715, tuvo que responder ante la justicia del destino de los bienes confiscados. En 1719, ante la amenaza militar francesa, fue enviado al alcázar de Segovia y allí permaneció hasta que, en 1724, ya muy enfermo, fue excarcelado a condición de no salir de la ciudad. Su estado no le permitió hacer uso de la libertad establecida en el Tratado de Viena y falleció en esta ciudad castellana el 15 de enero de 1728.

 

Bibl.: C. Pérez Aparicio, De l’alçament maulet al triomf botifler, Valencia, Tres i Quatre, 1981; J. Querol, Joan Baptista Basset. Militar i maulet, Valencia, Alfons el Magnànim, 1991; C. Pérez Aparicio, “La Guerra de Sucesión”, en J. M. Jover (dir.), Historia de España de Menéndez Pidal, XXVIII. La transición del siglo XVII al XVIII, Madrid, Espasa Calpe, 1993; A. Muñoz González y J. Catá i Tur, Repressió borbònica i resistència catalana (1714-1736), Madrid, Muñoz Catá, 2005; J. L. Cervera Torrejón, Joan Baptista Basset. Vida i mort del líder maulet, Valencia, Tres i Quatre, 2006; C. Pérez Aparicio, Canvi dinàstic i Guerra de Successió. La fi del Regne de València, Valencia, Tres i Quatre, 2008, 2 vols; C. Pérez Aparicio, “Don Juan Bautista Basset y Ramos. Luces y sombras del líder austracista valenciano”, en Estudis. Revista de Historia Moderna (Universitat de València), n.º 35 (2009), págs. 133-164; A. Muñoz y J. Cata, 25 presos polítics del 1714, Barcelona, Rafael Dalmau Editor, 2011.

 

Carmen Pérez Aparicio