Ponce de León, Pedro. Señor de Marchena (II). Sevilla, c. 1305 – ?, 1352. Noble, señor.
Hijo primogénito de Fernán Pérez Ponce de León, I señor de Marchena, y de Isabel de Guzmán, hija de Guzmán el Bueno. Al morir su padre, era niño aún, por lo que su abuela y sus tíos maternos, María Alonso Coronel y Juan Alonso de Guzmán, fueron sus tutores y gobernadores de sus estados, lo que explica la estrecha colaboración política y militar de ambas casas en los tiempos siguientes.
En 1325, en las fiestas de la coronación de Alfonso XI celebradas en Burgos, Pedro Ponce de León fue armado caballero por el propio Rey; él, a su vez, armó a otros cinco hidalgos. Desde entonces, es mencionado con frecuencia por la Crónica de Alfonso XI en acciones de guerra contra moros o contra Portugal.
Su nombre aparece asociado siempre al de su tío y II señor de Sanlúcar, Juan Alonso de Guzmán. Participó en El Salado (1340), formando parte del grupo de ricoshombres que acompañaron al Rey en la jornada.
Tras el largo y duro asedio de Algeciras, se encargó entre 1344 y 1350 de la tenencia de la plaza.
La recompensa por estos señalados servicios no podía dejar de producirse. En 1337 obtuvo los señoríos extremeños de Oliva de la Frontera y Valencia del Ventoso, en la frontera con Portugal. Aunque alejados de las principales áreas de interés para los Ponce de León, fueron conservados hasta 1402. En 1342 recibió el señorío de la villa de Mairena del Alcor, segregada del término de Carmona, y el de Rota en 1349, año en el que Pedro Ponce compró al Monarca el señorío sobre Bailén.
Cuando Alfonso XI murió en el cerco de Gibraltar, el señor de Marchena se fue a Algeciras con el futuro Enrique II ante el temor de que Pedro I pusiese en peligro sus vidas. Cuando comprendieron que la plaza no era suficientemente segura, ambos se marcharon a Morón, donde estaba refugiado Fernán Pérez Ponce, maestre de Alcántara y hermano de este personaje. Este episodio muestra el estrecho vínculo con el entorno de Leonor de Guzmán, favorita del fallecido Monarca, de la que Pedro Ponce era primo segundo.
Finalmente, este primer incidente del reinado se cerró sin mayores consecuencias.
El ascenso económico y político de Pedro Ponce de León propició su matrimonio con Beatriz de Lauria y Jérica, nieta del infante don Jaime y bisnieta de Jaime I de Aragón. El enlace con una casa real era siempre cuestión de gran prestigio, lo que justifica la incorporación de las armas reales de Aragón y las de Vidaurre a la heráldica de los Ponce de León. Además, sobre esta dama recayeron los derechos sobre los señoríos de Cocentaina y Planes, en el Reino de Valencia, aunque la distancia y los avatares de las relaciones entre Castilla y Aragón impidieron una eficaz defensa de los mismos, por lo que nunca llegaron a hacerse efectivos. El matrimonio obtuvo una nutrida descendencia, compuesta por ocho vástagos.
En 1347 Pedro Ponce de León se hizo con el patronato del Monasterio de San Agustín de Sevilla, en cuya capilla mayor, panteón de todo su linaje, ordenó su entierro. Murió en 1352.
Los indudables éxitos de Pedro Ponce de León contribuyeron a marcar la completa autonomía de su línea andaluza respecto a la primogénita leonesa, aunque la extinción de ésta en 1354 trasladó la representación de todo el linaje a sus sucesores.
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Rafael Sánchez Saus